sábado, 31 de diciembre de 2011

Naruloid [El inicio de una nueva vida] *Final*






Capitulo-61                             -El inicio de una nueva vida-


Sasuke estaba apunto de irse a dormir junto con Karin cuando Itachi lo detiene…

-Sasuke… Espera por favor.

-¿Qué pasa? –Voltea a verlo algo molesto-

-Eres un afortunado, podrás pasar más tiempo con Karin ya que, no nos iremos de viaje hasta que “ella” se recupere…

-Eso ya lo sé…

-Aunque entre más nos tardemos más difícil será para nosotros el irnos…

-No queda de otra…

-Que descanses hermanito tonto… -Alborota su cabello con su cálida mano-

-Hm… -Se va con Karin a otra habitación-

-… (Espero y Aiko se recupere pronto…) –Piensa mientras camina a la sala con seriedad y al llegar mira el sofá- (Será mejor que duerma de una vez)…

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Aiko había despertado al sentir el beso y solo esperaba la respuesta del rubio quien lucia muy alarmado…
Cansado de ocultarlo, sus sentimientos se desbordan espontáneamente…

-¡Si! ¡Si es verdad Aiko! –Vuelve a acercarse y toma sus manos mirándola con determinación sin dejar de sonrojarse- Te amo, la verdad no se si esas sean las palabras suficientes para expresar todo lo que siento por ti… -Algo emocionado-

-Deidara… -Susurra y comienza a llorar de emoción con un matiz carmesí en sus mejillas-

-¡No! ¡No llores! –Se inclina para abrazarla cálidamente, alzándola leve de la cama-

-N-No… Estoy feliz –Apenas corresponde cerrando sus ojos, sin dejar de llorar- Yo, siento lo mismo… ¡Dios! ¡Tenia tanto miedo! ¡He sido muy tonta! ¡Tenías razón!

-¿Miedo de que? –Aun abrazándola mira hacia un lado preparado para escucharla atentamente-

-Que no sintieras lo mismo… Que nunca pudiera ser capaz de decirlo… Pero… Ahora… Es fácil decirlo, es extraño… Te amo… ¡Te amo Deidara!

-Sí, es extraño… Aiko… -Acaricia una de sus mejillas mirando sus llorosos orbes violetas y admirando conmovido el rubor de sus mejillas- Te amo… -Con un tono mas profundo y lleno de sentimientos le planta un beso para después limpiar sus lagrimas delicadamente con sus pulgares y toma sus mejillas delicadamente- No quiero que derrames una lagrima más… Ahora en adelante, solo seremos tú y yo… -Vuelve a abrazarla para reconfortarla con la unión de sus cuerpos y acaricia su cabeza- Ahora quiero que descanses Aiko…

-Pero… ¡No quiero que me dejes sola!... –Lo estrecha con sus brazos-

-Hn… -Sonrojado- Entonces me quedare aquí contigo…

-… -Se aleja de él para acostarse y verlo desde ahí sin soltar su mano- Siéntate aquí…

-… -Se sienta en el borde de la cama a su lado sin dejar de verla y se aproxima lo suficiente para que ella se acurruque junto a él, entrelazando sus dedos-

-… -Cerca de él cierra sus ojos con una leve sonrisa- (Soy tan feliz)…

-(El verla tan tranquila… Y junto a mí, me hace sentir tan mal… En cualquier momento nos pueden encontrar y me alejaran de ella, por mucho tiempo… No se si Itachi logre programar otro vuelo… Maldita sea… Maldito  Madara, por su culpa, estoy metido en este lío… Del que quiero escapar) –Pensaba mientras la miraba descansar seriamente y acaricia su cabello-
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Al día siguiente la casa de Karin fue invadida por los amigos de Aiko que nuevamente preocupados por ella decidieron ir gracias a que Sasuke les aviso, según él, solo a Arika, de la situación de Aiko, pero esa noticia rápidamente había corrido y justamente al medio día estando a tres días de navidad…

-¡Hermana! –Exclama Arika al verla en cama otra vez-

-… -Aiko dormirá y Deidara la cuidaba-

-La despertaras… -Murmura el rubio-

-¡Cállate! ¡Rubio idiota! ¡Por tu culpa mi hermana esta así! –Lo mira muy irritada-

-Hey, tranquila señorita… -Interviene Itachi- No es culpa de nadie… Además según Gakupo Aiko estará bien…

-¡Hola chicos! –Saluda con energía Naruto acercándose a un lado de Arika al entrar-

-Naruto… -Lo nombra Itachi con seriedad y una tenue sonrisa-

-¿Habrá fiesta o que? –Cuestiona Deidara algo incomodo-

-Oye, nosotros también nos preocupamos por Aiko ¡Idiota! –Dice la castaña muy enojada-

-Relájate Deidara… El resto de amigos de Aiko esta abajo… Y recuerda que esta no es tu casa… -Comenta al mirarlo y dirige su vista a- Arika-chan en unos minutos más ordenaremos pizza para todos ¿Te gustaría? –Pregunta siendo amable-

-¡Pizza! ¡Claro! –Responde animada la chica-

-¿Por qué hoy no eres custodiada por tus agentes? (Que bueno que no los trae) –Vuelve a preguntar el pelinegro-

-… -Suspira y cruza sus brazos- Se que ustedes son parte de Akatsuki…

-Éramos… -La corrige Deidara-

-Bueno eran… -Lo mira molesta- Sería mala idea traerlos, son tontos pero astutos, no saben lo que me costo que no vinieran… Solo lo hice por mi hermana, se lo mucho que los quiere… A ustedes dos –Observa a Itachi y Deidara-

-Gracias… Que considerada de tu parte Arika… -Murmura Itachi haciendo una educada y leve reverencia-

-… -Deidara solo los observa luego coloca su mirada en Aiko- ¿Creen que se recupere para navidad?

-… -Itachi sonríe muy leve y se acerca a él- Seguro sí… -Toca su hombro gentilmente-

-¡Oigan animo ella estará bien! –Exclama Naruto tratando de animarlos con una impecable sonrisa- ¡Vamos abajo Arika-chan! –Toma su mano y se la lleva-
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Después comieron todos juntos y hablaron con Aiko, cuando ella despierta sin dejar la cama, ya que aun se sentía muy débil.

Gakupo les brindo un gran apoyo a Deidara e Itachi, regalándoles medicinas que Aiko necesitaba para su recuperación, que le había pedido a su padre… Llegó la noche y era otra noche la cual tenían que pasar bajo el techo de casa de Karin quien se preocupaba por la llegada de sus padres en tres días más, lo que mas deseaba era estar con Sasuke pero sabia que pronto se iría… Todos anhelaban que Aiko se aliviara lo mas pronto posible y volviera a caminar ya que con gran esfuerzo caminaba para ducharse, ir al baño y vestirse ya que le daba pena que Deidara le ayudara, lo que si casi parecía un capricho, era que, le pedía ayuda para comer pero es que cuando él la alimentaba, se sentía tan feliz y amada, le fascinaba ver la expresión llena de pena de Deidara cuando lo hacia…

Así pasaron dos días… Hasta que llegó navidad la época favorita de Aiko. Volvió a nevar.


Karin, Deidara, Itachi y Sasuke, estaban en la sala conversando…

-Mañana por la tarde llegan mis padres, ayer me llamaron… ¿Cómo sigue Aiko? Deidara… -Lo mira-

-La veo igual… Con una intensa fiebre desde hace dos días…

-… -Baja su mirada preocupándose-

-Tranquila… -Sasuke la abraza-

-Karin, en verdad estoy muy agradecido… El que nos hayas abierto las puertas de tu casa… Es digno de apreciarse… No cualquiera lo hace… Nuevamente gracias… -Habla Itachi con seriedad-

-No es nada… Por cierto ¿A dónde irán? Si Aiko no se recupera para mañana… -Desvía su mirada-

-No te preocupes, por favor… Ah, casi lo olvidaba… Deidara, Sasuke, les quería decir que ya programe vuelo para mañana…

-¡¿Qué?! –Gritan los dos al mismo tiempo sorprendidos-

-Fue muy difícil, dudo que consiga programar otro más… -Los mira-

-¡Pero Aiko! –Exclama enojado Deidara- ¡¿Acaso piensas dejarla aquí?! ¡Yo no me iré sin ella!

-Deidara… -Lo observa-

-¡Aiko aun no se recupera! ¡Aun sigue enferma!

-Deidara… No podemos arriesgarnos más, los padres de Karin volverán, cuando regresen nosotros ya no debemos estar aquí… Lo siento, Aiko estará bien con su hermana ¿No crees?... –Le dirige su fría mirada que lo caracterizaba-

-¡Ni siquiera has hablado con Tsunade! –Lleno de ira y alarmado- ¡Es más, ni siquiera podemos hablar con ella! ¡¿Cómo sabes que la aceptaran?!

-Es hermana de sangre… De Arika Misaki…

-¡Bastardo! –Afila su mirada puesta en el-

-¡Ya basta! –Se escucha un grito de Aiko que los hace callar y mirarla-

Todos giran su mirada hacia ella… Aiko se acercaba con su pijama puesta lentamente….

-¡Aiko! –Deidara corre hacia ella y la abraza- ¡Estas caminando! Sin esfuerzo…

-A-Aiko… -Asombrado Sasuke-…

-… -Itachi sonríe-

-Ya no discutan por favor… -Murmura correspondiendo el abrazo de Deidara tímidamente-

-… -El rubio se aleja tan solo para tocar su frente- Tú temperatura… Es normal… -Abre mucho sus ojos mirando a Aiko-

-Deidara, me siento muy bien… No quiero que peleen por mi culpa… -Con un rostro afligido lo observa sin soltar sus brazos donde aferra sus dedos-

-No puede ser… -La abraza efusivamente y besa su frente sin importarle que los demás lo vieran- ¡Ya estas bien! –El rubio se sentía muy feliz-


Lo que nadie noto, era que, parte de la enfermedad que ataco a Aiko, se la había provocado ella misma, aparte de haber estado dentro de agua helada congelándose, fue por los sentimientos y ganas de morirse, sus dudas y miedos, sobre el amor que sentía hacia Deidara, todo eso en conjunto le ocasiono que su cuerpo se deteriorara… Pero, fueron las dos palabras que salieron de los labios del rubio, lo que la hizo muy feliz y esa felicidad corría por sus venas sacándola de ese escondite, del escondite donde oculto sus sentimientos hacia él, todo el tiempo… Y se alivio de esa fiebre

Fue muy grato el que Aiko volviera a su salud habitual, claramente era muy fuerte… Y llegando a ser afortunados tomaron el vuelo… Aiko se había despedido de todos sus amigos y de su hermana a quien le prometió escribirle correos electrónicos y Arika le prometió ir a  visitarla, ella buscaría un pretexto para viajar quizá “Que quería comer pizza en Italia” Era uno bueno.
Aunque tuvieran que adaptarse a ese país, dejar recuerdos en Japón, que los atesorarían en sus corazones, y tener que aprender un nuevo idioma, iban felices, puesto que lo habían logrado… Aiko estaba sana y sonriendo, ella nunca se alejo de Deidara, la mayor parte del tiempo mantuvieron sus manos unidas…

Aiko extrañaría a sus amigos y el colegio, que tan solo faltaba un año mas para la graduación… Pero nada, absolutamente nada la haría mas feliz que estar con su amado, ella sabe que si esta con el, todo lo puede lograr, el es toda su fuerza, su vida sin él… No existiría.

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Tres años después….

Aiko ya había cumplido veinte años, y se había unido en matrimonio con Deidara… Viviendo juntos en una linda casa, cerca de casa de Itachi los “Ex criminales” Nunca fueron encontrados ni buscados como lo fue en Japón, para ellos, llegar a Italia fue como volver a nacer… Iniciar una nueva vida…
Karin había viajado hace apenas una semana, para irse a vivir con Sasuke, no soportaba mas estar sin él. Sasuke todo este tiempo fue indiferente con las miles de seguidoras que tenia, que lo acosaban, guardo todo el tiempo a Karin en su corazón, siéndole infinitamente fiel… El joven pelinegro vivía apartado de su hermano, en un departamento en el centro de la cuidad, siendo ya un esplendido universitario… Y Aiko también, pero…

Es sábado en Italia, el dulce y cálido aroma de primavera envolvía a todos… Aiko, preparaba comida regional que había aprendido a elaborar… Una singular sonrisa ilumina su rostro mientras cocina, como si algo la hiciera inmensamente feliz y quisiera gritarlo a los cuatro vientos… Esperaba la visita de su hermana, quien después de tres largos años, quiere verla y al ser millonaria como siempre, se le facilita el ir a Italia llevándose consigo a Naruto…

Dan las cuatro de la tarde y Arika toca el timbre de la casa, esperando que no se haya equivocado de dirección.
Deidara es quien les abre la puerta y los observa sorprendido de lo mucho que han crecido pues casi alcanzan su altura.

-Vaya… Cuanto tiempo sin verlos… Adelante… -Les permite pasar-

-Créeme rubio… Yo me sorprendo más al verte tan amable… -Comenta Arika al haber notado su rostro asombrado al verlos, entrando a la casa junto con Naruto-

-Quizá el amor lo cambio… -Habla Naruto sonriéndole a su novia-

-… -Deidara vuelve al sofá de la sala y mira la televisión- ¡Aiko ya llegaron! –Grita en un tono muy alto avisándole así a su esposa-

-No creo que haya cambiado mucho… -Se escucha la voz de Aiko quien ya no ataba su cabello en esas coletitas, si no que lo dejaba caer hasta su cintura-

-¡Oh! ¡Te noto diferente! –Dice Naruto- ¡¿Te cortaste el cabello?! –Tratando de adivinar-

-Lo tiene mas largo y suelto… -Pronuncia en un tono bajo Arika al verlo, cruzándose de brazos-

-… -Aiko ríe levemente con una tierna sonrisa se acerca a su hermana y la abraza- Te extrañe mucho… -Murmura con pequeñas lagrimitas en sus ojos-

-Vamos, solo fueron tres años… -Corresponde sonriendo de lado-

-Han pasado muchas cosas… -Susurra Aiko alejándose de su hermana-

-Lo sé…

-Dime… ¿Tu y Naruto no se han casado? –Pregunta la pelinegra-

-¡¿De que hablas?! –Sonrojada- ¡Claro que no! Nos concentramos en los estudios… -Mira de reojo a Naruto apenada-

-Si… ¡Aunque seria genial! ¡¿O no Arika-chan?! –Emocionado la observa-

-¡Cállate! –Le da un golpe en su cabeza muy ruborizada-

-¡Ay! ¡Siempre hace eso! –Con lagrimitas en sus ojos-

-… -Aiko ríe divertida- Bueno, pasen al comedor, la comida esta lista… -Con un tono dulce camina hacia la cocina-

-(¿Soy yo? ¿O Aiko es más dulce? Vaya cuanto cambia la gente en tres años…) –Piensa a sus adentros Naruto, mientras se dirigía al comedor con Arika-

En ese preciso momento, se escucha el timbre nuevamente-

-¡Yo voy, yo voy! –Grita Naruto con una sonrisa y apurado llega a la puerta-

-Hola… -Saluda Itachi siendo acompañado por Sasuke y Karin-

-¡Oh! ¡Sasuke!... ¡Itachi! ¡Hola! ¡Cuánto tiempo sin verlos! –Exclama muy contento Naruto-

-¿Quién es?... –Cuestiona Deidara al aproximarse- Ah, son ustedes… Ya es costumbre que los Uchiha lleguen sin previo aviso… -Dice serio Deidara-

-Ah  vamos Deidara… -Entra Itachi y posa su mano sobre su hombro- ¿Somos amigos no? –Sonríe-

-Si… -Desvía su mirada-

-Además, tienes una casa muy linda… Hablando de cosas lindas… ¿Dónde esta tu linda esposa? –Se adentra más y de fondo se puede ver a Naruto molestando a Sasuke, y Karin con una gota en su cabeza-

-En la cocina…

-¡Ah si! ¡Arika también se quedo en la cocina! ¡Vamos Sasuke! –Corre Naruto llevándose a Sasuke y él a Karin hacia el comedor-


Todos se reúnen en el comedor, de casa de Deidara y Aiko, para disfrutar de una rica y agradable comida juntos, mientras platicaban y reían… Aiko siente que es un momento perfecto para dar una noticia muy importante, que espera y a todos los haga felices como a ella…

-Chicos… -Habla Aiko y todos callan para poner su atención en ella algo extrañados de verla muy seria- Quiero aprovechar… Para decirles algo muy, muy importante…

-… Adelante Aiko –Dice Itachi y todos asienten con su cabeza-

-Yo… Yo… -Mira a Deidara y se ruboriza bajando su mirada- Voy a tener un bebe…

-… -Deidara queda paralizado mirándola, quedándose sin habla-


Todos sonríen y la observan conmovidos, exceptuando a Itachi.

-¡Que lindo un bebe! –Exclama emocionada Karin-

-… -Arika muy asombrada observa a Deidara y Aiko, luego se sonroja- (¿Un bebe? Ósea que… Si obvio ellos tuvieron que… Hacerlo) –Muy enrojecida de sus mejillas, se encoge de hombros lentamente-

-Felicidades… -Dice Sasuke con una leve sonrisa-

-… -Itachi se siente extraño, sus sentimientos se confunden, por un lado esta feliz, pero por el otro le duele- (Pensé que ya lo había superado… ¿Sigo enamorado de ella?...) –Piensa con una expresión triste en su rostro-

-¡Si muchas felicidades a los dos! –Exclama Naruto- ¡¿Cómo le pondrás al bebe Aiko?! –Cuestiona muy emocionado-

-Aún, no lo se… -Con una sonrisa y su mirada abajo siente una mirada pesada y observa a Itachi quien la miraba-… -Desvía su mirada extrañada al notar que el rostro de Itachi es el único afligido-

-Aiko… -La nombra Deidara quien se levanta de su asiento y se acerca a ella para abrazarla con una sonrisa leve- Me haces muy feliz… -Le susurra y le da un beso en la mejilla-

-Awwww… -Conmovida Karin saca un paño para secar sus lágrimas- ¡Esto es hermoso! –Mira a…- ¡Sasuke tengamos un bebe! –Lo mueve del hombro sonrojada-

-¡¿Qué?! –Sasuke se exalta muy asombrado y ruborizado cuando todos ríen al verlo-


Excepto Itachi, quien seguía con un semblante melancólico, decepcionado de el mismo… Solo trata de mostrar una forzada y falsa sonrisa, ya que no le gustaría arruinar esa hermosa unión, de su mejor amigo y de la única mujer que ama… El seguía soltero a pesar de ya pasar de los veintiocho años… Era feliz viendo a ellos felices, pero al enterarse del fruto de su amor, se siente fatal,  intenta ocultarlo…
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Después de seis meses… El vientre de Aiko anunciaba visiblemente que esperaba un hijo…
Arika sufre la perdida de su madre adoptiva Tsunade, quien fue asesinada… Cayendo toda la herencia y el pesar sobre sus hombros… Hundida en la tristeza, busca el paradero de sus verdaderos padres en Japón, ya que quiere verlos, llevarlos a Italia y reunirse todos en familia, a ella no le importa si ellos no la quieren ver o entre ellos se odian solo quiere decirles a los tres que los ama… A pesar de todo…
Y así fue… Llego a contactar con ellos, después de semanas y aceptaron ir a Italia con ella, para ver a Aiko… Aunque en todo el viaje sus padres no se dirigieron la palabra…

Llegan por sorpresa a casa de Aiko y Deidara…

El rubio de orbes azules, los había dejado solos y salió un rato con su amigo Itachi ya que no quería saber nada de los padres de Aiko, a quienes les guardaba cierto odio, por hacer sufrir tanto a su esposa en un pasado.
Estaban reunidos en la sala tomando café y galletas horneadas por Aiko…

-Papá, mamá como pueden ver Aiko va a tener un hijo… -Dice Arika al mirarlos-

-Sí, esta bien… -Muestra una sonrisa falsa su madre-

-¿Es del rubio que parece chica, que acaba de salir? –Cuestiona el padre- ¡¿El fue el que te secuestro verdad hija?!

-Para nada papá… El me salvo… -Habla Aiko tocando su vientre-

-¡¿Te salvo de que?! ¡Tú vivías conmigo! ¡De repente desapareces y después de tantos años te veo viviendo con un transexual y embarazada!

-¡Tranquilo papá!  -Exclama Arika-

-… -Aiko comienza a llorar ya que el embarazo la hace más sensible-

-Aiko esta delicada…

-… -La madre de Aiko y Arika comienza a derramar lagrimas también- Arika tiene razón cállate… Mira a nuestras hijas… -Las observa- Solo quieren vernos, son seres humanos se merecen esto… Hijas yo nunca, nunca las deje de amar, siempre las recordaba…

-Madre… -Murmura Arika-

-Lo lamento tanto… Por una de las tantas peleas que tuvimos yo y tu padre mi familia y mi vida se destrozaron… -Entre sollozos- No dejen que algo como esto las separe ni arruine sus vidas… Sean fuertes… -Se levanta y las abraza a ambas aunque estuvieran sentadas-

-… -El padre solo observa la escena con un nudo en su garganta- Desgraciadamente hijas… Esta familia ya no puede ser igual…

-¡¿Por qué?! –Cuestiona aun con lágrimas Aiko-

-Por que no hija… Tu padre y yo no podemos volver… No nos amamos, desde hace muchos años que estamos divorciados, aunque a ustedes si las amamos, pero las cosas no son tan fáciles… -Vuelve a su lugar-

-Es como dice tu madre… Ustedes ya son adultas –Mira el vientre de Aiko- Y pronto formaran cada una su propia familia, así es la vida…

-… -Aiko seca sus lágrimas con sus manos- Sí, pero… Me hace más feliz verlos, después de tanto tiempo… Y el escucharlos decir esas palabras… Gracias hermana… -Mira a Arika con una sonrisa-

-… -Arika sonríe leve- Solo quería decirles a los tres, que los quiero… -Baja su mirada frunciendo el ceño- No me van las cursilerías pero… Es lo que siento… Y quería verlos juntos, como hace años… -Saca de su bolsa una fotografía algo maltratada de ellas con sus padres, siendo aun niñas, todos sonreían-… -Se las muestra-

-A-Arika… ¿De donde has sacado esto? –Cuestiona su madre asombrada al ver la foto-

-La he conservado… Yo jamás los he olvidado… Siempre tuve la esperanza de verlos algún día… -Sonríe-


La madre llora de felicidad tomando la foto en sus manos y todos sonríen comenzando a recordar los momentos que pasaron juntos que aunque no fueron muchos eran pruebas del amor que se tuvieron mutuamente, momentos que nunca volverían pero se mantienen en sus memorias…

Días después…

Aiko veía el atardecer junto con Deidara en un parque sentados en una de las bancas, veían como los niños se divertían y corrían, escuchando esas infantiles risas llenas de inocencia mientras jugaban…

-Será niño… -Dice Aiko en un tono suave tocando su vientre-

-¿Niño?... –La mira de reojo mientras colocaba su brazo sobre sus hombros- He pensado en su nombre… Pero sabiendo ahora que será niño…

-¿A si?... –Lo observa sonriendo-

-Sí… -Avergonzado baja su mirada- He elegido uno…

-¿Cuál es?...

-Deidara… -Ríe un poco y mira el cielo-

-¡Ese es tu nombre! –Ríe y lo abraza-

-No se me ocurrió uno mejor, además si es mi hijo, seria genial que llevara mi nombre… -Acaricia su cabello-

-Yo pensé otro… -Murmura mientras lo abrazaba-

-Y… ¿Cómo es? –La mira-

-Aunque no me creas… También pensé ponerle tu nombre –Ríe divertida-

-… -Ríe- Muy bien, esto deja claro que somos pésimos para poner nombres…

-… -Seguía riendo-… Bien entonces se llamara Deidara… Deidara Junior –Dice entre risas-

-Perfecto… -Con una sonrisa une su frente con la de ella unos segundos para después depositar un corto beso en sus labios- Te amo…

-… Deidara… -Susurra-

-No… Ahora… -Coloca su mano sobre el vientre de Aiko- Los amo…
.

.

-Yo… Siempre… Te amaré mas a ti.



                                                                …




La Escritora Despistada: Al fiin!! *-* No saben lo feliz que me siento! xD... Gracias en serio gracias por leer... Y aunque digan que no agradesca lo hago xD... Espero les haya gustado ^^ Me dio penita por Itachi, hice lo que pude pero ps u.u.... gyyaa!! Itachi amame a mi! xDDDD!!! Estoy soltera! LOL... Ok ya, proximamente hare un fanfic Yaoi de Deidara y Itachi *-* Mentira xD pero seria interesante... Bueno es todo gracias por leerme ^^... Ah casi lo olvido FELIZ AÑO!! Para los que lean esto este ultimo día del 2011 Espero y se la pasen muy bien si toman no se pasen xD... y ya adiós ^^ 

Que el 2012 Este lleno de buenas sorpresas para ustedes... Oh genial termina el año y termina Naruloid que ironia~ xD... Año nuevo fanfic nuevo!! xDDD 

viernes, 30 de diciembre de 2011

Naruloid [Para eso son los amigos]




Capitulo- 60                                                    -Para eso son los amigos-








El cielo completamente nublado, del que seguían descendiendo esos copos de nieve suavemente… El reloj indicaba que ya era media noche y Sasuke se despedía de su novia Karin, quien no dejaba de tomar su mano ni borraba de su rostro aquella expresión afligida.



-Karin, espero que algún día volvamos a vernos… -Le decía mientras miraba sus ojos-



-Promételo… Por favor, prométeme que nos volveremos a ver en el futuro.. –Lo abraza aferrándose a él-



-Sí… -Corresponde recargando su mejilla en su cabeza- Te lo prometo… -Susurra- Te amo.



El molesto sonido del timbre de su celular, corta con el momento…

Sasuke sin soltar a su novia, coge el móvil de su bolsillo del pantalón y responde…



-¿Itachi?... –Frunciendo el ceño-



-Sí, soy yo ¿Cómo supiste?...



-Son las doce de la noche… ¿Quién mas me llamaría?...



-Cierto… Oye Sasuke…Tu me habías dicho que los padres de Karin salieron de vacaciones y ella esta sola ¿Verdad?...



-Así es…



-Bueno, veraz ocurrió un imprevisto… Como ya sabes planeábamos irnos al amanecer por que sabemos que la policía a detectado mi casa y no queremos ir a prisión.



-Ve al grano… ¿Y Aiko? ¿Ya la encontraron?...



-Tranquilo hermanito, déjame continuar… Nuestros planes han cambiado, hemos encontrado a Aiko pero… No esta en buenas condiciones, necesita un doctor y reposo… Es decir, no vamos a poder irnos mañana temprano ya que Aiko no luce nada bien… La podríamos dejar con su hermana, pero Deidara no quiere… Dice que sin ella no se va y tú, yo y Aiko por supuesto que no queremos ver a Deidara en la cárcel…



-…



-Entonces me preguntaba ¿Si tu novia seria tan amable de dejarnos quedarnos esta noche y las que sean necesarias en su casa, hasta que Aiko se recupere?...



-Le preguntare… -Mira a Karin y después de que le explica todo…-



-Claro Sasuke… Mi casa es su casa, pero recuerda que mis padres vuelven en cinco días… -Le dice al mirarlo la pelirroja-



-Gracias Karin… -Le sonríe y vuelve a la bocina- Dice que esta bien… Pero sus padres vuelven en cinco días, un día después de navidad…



-Perfecto… Espero que para entonces, Aiko se encuentre bien… Bueno yo y Deidara ya casi llegamos a casa pero solo por las maletas, llevaremos nuestro equipaje a casa de Karin…



-De acuerdo prepararemos la cama de Karin para Aiko… Los estaremos esperando…



-Ah y hermanito…



-¿Si?...



-¿Podrías conseguir un doctor? –Sonríe leve-



-¿Qué?... Llamen a un medico o llévenla al hospital…



-No, no la llevaremos al hospital ya sabes por que…



-Es verdad… -Suspira- Ahora que recuerdo Gakupo de los “Vocaloids” Del colegio sabe de medicina ya que su padre es medico…



-Genial, llámalo… Adiós –Cuelga-



-… -Retira la bocina de su oído y guarda su celular-



-Sasuke ¿Esta todo bien?...



-Sí, solo que… ¿Sabes el numero de Gakupo?... –La observa serio-



-Oh, si, me lo dio Luka una vez… -Se aleja- Espera iré por mi directorio… -Camina apresurada hacia otra habitación-



-… -La ve irse con seriedad-





Después de unos minutos… Gakupo llega a casa de Karin junto con Luka y Miku… Tocando la puerta y Karin acompañada de Sasuke la abre sorprendiéndose al verlos.



-¡Hola! –Saluda alegre Miku-



-¡¿U-Ustedes dos que hacen aquí?! –Cuestiona sorprendida la pelirroja-



-Bueno, cuando Sasuke llamo a Gakupo –Explicaba Luka- También me despertó a mí ya que, yo dormía a su lado…



-Aaaah… -Una gota aparece en la cabeza de Karin-



-¡Y cuando Luka se entero de lo ocurrido, me llamo a mi! –Exclama Miku entusiasmada- ¡Yo dormía plácidamente me adentraba en el mundo de los sueños, había dulces, ponis rosados y!…



-¡Si ya basta Miku! –Gritan todos al unisonó-



-Ups… -Sonríe con sus ojos cerrados y una gota resbala por su sien-



-… -Sasuke suspira- Gracias por venir Gakupo… Realmente necesitamos tu ayuda….



-Es todo un placer… Ahora ¿Dónde esta la chica?... –Entra siendo seguido por Miku y Luka, mirando a su alrededor-



-A-Aiko.. Bueno aun no llega… No han de tardar… -Contesta el pelinegro y mira hacia otro lado molesto- Itachi… -Masculla en un tono bajo-



-¡Bien mientras llegan pongamos karaoke! –Exclama con emoción miku-



-¡Siii! –Responden alegres ala vez Luka y Gakupo-



-¿Karaoke? –Extrañada la pelirroja- Son las doce y quince minutos de la noche, despertaremos a los vecinos –Comenta Karin con una falsa sonrisa y una gota en su cabeza-



-Solo será mientras llegan… -Dice Luka sonriendo y de fondo se puede ver a Miku y Gakupo preparando el Karaoke-



-Etto… -Aun con una forzada sonrisa llena de extrañeza Karin-



-¡Así es! –Agrega Gakupo- ¡Ustedes también deben cantar!



-¡¿Qué?! –Se inmuta Sasuke-



-Sí, si la vida es mejor cantando… -Emite en un tono melodioso Gakupo-





Sasuke y Karin asombrados los observan… Y Sasuke piensa a sus adentros…



-(Rapido Itachi o te mataré…)



Justo cuando Miku toma el micrófono para cantar “World is mine” El timbre de la casa de Karin suena…



-¡Llegaron! –Gritan Sasuke y Karin corriendo para abrir la puerta-



Al abrir la puerta se pueden ver Itachi con un rostro serio y Deidara cargando a Aiko en sus brazos quien parecía desmayada…



-Buenas noches Karin… -Saluda Itachi con una leve sonrisa- Te agradezco que nos hayas dejado estar en tu hermosa casa….



-N-No es nada… Además son como la familia de Sasuke y él es lo más importante para mi… -Dice Karin sonrojada- (¡Había olvidado lo sexy que es Itachi!) –Muerde su labio inferior al verlo-

.



.

Rápidamente atienden a Aiko… Llevándola a la habitación de Karin para acostarla en su cama, dejando a Gakupo revisar la salud y el estado de Aiko… Esperando que no sea grave…



Después de media hora, Gakupo sale de la habitación de Karin yendo a la sala donde estaban todos reunidos y preocupados…

Deidara es el primero en verlo y se levanta del sofá para aproximarse hacia él con la desesperación grabada en su rostro, lo mira fijamente.



-¿Cómo esta? -Cuestiona el rubio-



-Bueno… -Observa como todos lo miraban en silencio- No soy doctor como mi padre, pero según parece que se encuentra bien… Aunque no estoy muy seguro…



-… -Agarra el cuello de su abrigo con fuerza frunciendo el entrecejo- ¡¿Cómo que no estas seguro?! ¡¿Esta bien si o no?!



-Deidara… -Lo nombra Itachi acercándose a ellos para detener a Deidara, con solo mirarlo hace que lo suelte-



-Por ahora debe descansar –Se acomoda el cuello de su abrigo sacudiendo la tela- Y tiene que permanecer bien arropada… Probablemente le dará fiebre no es grave… -Agrega Gakupo-



-¿Estas seguro? –Pregunta Deidara al dirigirle una amenazadora mirada-



-S-Si… -Con una gota de sudor en su cabeza- Déjenla descansar… -Sonríe-



-Gracias Gakupo-san –Murmura Itachi-



-No es nada… Ahora permítanme retirarme, es tarde ya… Miku, Luka las llevare a casa… -Las llama mirándolas-



-Sí, sí… -Contesta Luka con sus brazos cruzados frivola-



-(¿Me pregunto si viven juntos?) –Pensó Itachi al verlos-



-… -Antes de irse Gakupo mira de reojo a Itachi y Deidara- Descuiden estará bien… Cualquier cosa, pueden llamarme… Realmente es un milagro que siga respirando después de haber estado expuesta a ese intenso clima, es una chica muy fuerte… -Con una sonrisa se retira-



-… (Aiko…) –Piensa Deidara intranquilo-



Itachi, Sasuke y Karin acompañan a sus invitados a la puerta para agradecerles y despedirse de ellos… Por otro lado Deidara, se queda en la habitación donde Aiko parecía dormir pacíficamente… Manteniéndose a su lado en pie cerca de la cama…



-(Aiko… ¿Habrá escuchado lo que dije?) –Vuelve a preguntarse en su mente y recuerda ese momento-



-Aiko… Yo… Yo… -Coloca su fría mano en la mejilla de ella acercando su rostro lentamente mientras articula difícilmente- Te… Te amo… -Casi susurrando, dejando chocar su aliento en sus labios cerrando sus parpados un momento para luego alejarse sin dejar de verla-






Una expresión afligida se apodera de su rostro al pensar que quizá esas palabras ella no las logró escuchar… Lo que le entristece más y dejándose llevar por sus sentimientos, la estrecha con sus brazos aferrándose a ella con un afecto especial.





Entre cierra sus ojos al contemplar el rostro de Aiko…



-(Estoy cansado de esto… Si no lo escuchó, entonces se lo diré directamente, cuando vuelva a abrir sus ojos…) –Pensaba y se aproxima a ella para tomar con naturalidad su mano- (Ya no me queda duda… Quiero estar con ella, hasta el final de mis días, hasta que uno de los dos cierre sus ojos, para siempre… Desde que la conocí, mi vida, tiene una razón, tengo un motivo para existir, para seguir, para luchar… Por ella, olvide todas las vacías pasiones que tenia… Explosiones, Arte, Alcohol… Incluso mi tristeza y profunda soledad fueron desvanecidas con su presencia…) Te amo… -Susurra en un tono casi inaudible y se inclina para posar sus labios delicadamente sobre los de ella, con sus ojos cerrados-



La escena parecía sacada de un cuento de hadas, lo que lo hizo mágico… Aiko logra sentir esos tibios labios, ella solo abre sus parpados lentamente, observando como Deidara se separa de sus labios lentamente, sintiendo su corazón inquieto y un ligero rubor se apodera de sus pálidas mejillas…



-Deidara… -Estaba muy sorprendida ya que era el primer beso que le propinaba-



-A-Aiko… -Algo nervioso abre sus ojos notablemente ante la inesperada reaccion de Aiko manteniendo su mirada puesta en ella algo coloreado de sus mejillas hasta su nariz- ¿Cómo te sientes? –Suelta su mano y trata de verse serio-



-Deidara… ¿Por qué me besaste?...



-… -No sabe que decir y solo desvía su mirada-



-Dime… ¿Es verdad? –Con un tono suave-



-¿Qué?



-Que… Me amas… ¿Es cierto?



-Tú… -Alterado y avergonzado la observa- ¿Lo escuchaste?



-S-Si… -Apenada- Cuando estábamos cerca del río… Y hace minutos otra vez… La primera vez que lo escuche pensé que era un sueño… Pero ahora…



-…



-Deidara, respóndeme… -Le pedía mirándolo con sus ojos destellantes-



-Tch… -Frunce ligeramente el ceño muy ruborizado y baja su mirada, mientras puede sentir como su corazón podría explotar en cualquier momento-

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*Próximo Capitulo: Final. *




La Escritora Despistada: Solo quiero agradecer a cierta personita que me ha comentado mucho y me ha leido hasta aqui... GRACIAS Kata-san... Realmente me encantan tus comentarios y es muy lindo de tu parte que te tomes la molestia de comentar cada capitulo que lees ^^... Sobre lo que mencionaste en un comentario, que deberia sacar un libro, esto solo lo tomo como un pasatiempo muy bonito, me encanta escribir para mi es un arte hermoso *-* Pero no creo que escriba tan bien como para sacar un libro xD de todos modos muchas gracias por tus alentadores comentarios y gracias a los que lean n_n El siguiente ya es el Final espero lo disfruten y sobre todo sea de su agrado, gracias de antemano...

domingo, 25 de diciembre de 2011

Lovely Rose [Prueba de amor]







Capitulo- 20                                              -Prueba de amor-








----------------> >Escena Yaoi << -----------------



Grell parecía como hechizado por los orbes diabólicos color carmín del demonio que lo miraba profundamente, acorralándolo en ese árbol.



-… -Sus piernas temblaban por la inmensa emoción que corre por sus venas-



-¿Le gustaría compartir conmigo la eternidad? –En un tono de voz suave-



-¡¿L-La eternidad?! –Sonrojado hace un gesto de asombro- ¿Q-Que quieres decir Sebas-chan?...



-¿Acaso es usted tonto? –Frunce ligeramente el ceño sin dejar de verlo, elevando el tono-



-¡¿Eh?! ¡No! ¡Pero no te entiendo!... –Desvía su mirada aun con ese rubor en sus mejillas- Es decir, tú siempre has sido tan frío conmigo… Aunque eso me vuelve loco –Muestra un rostro pervertido y se le cae la baba- Pero… -Observa sus ojos un momento- Tan cruel… Tan egoísta… ¡Tan sexy! ¡OH SEBAS-CHAN! ¡Hazme tuyo! –Lo abraza con gran felicidad ruborizado y aparecen corazoncitos a su alrededor-



-… -Suspira con sus ojos cerrados- Grell-san usted rompe toda clase de romance, espero… Y no rompa también mi corazón… -Corresponde mirándolo con seriedad-



-Se-Sebas-chan, no me digas que… Tú –Sin soltarlo mira su rostro enrojeciéndose de sus mejillas-



-Así es… -Afirma y acerca lentamente sus labios a los suyos-



-¡Acepto! (¡Oh se esta acercando!...) –Lo mira con una sonrisa mostrando sus picudos dientes mientras poco a poco se acerca Sebastian a él entre abriendo sus labios, tal y como él había soñado-… -Atrapa los labios del otro demonio entre los propios y los acaricia formando un apasionado beso incluyendo la lengua, haciendo que el demonio rojo, en cualquier momento reventaría de emoción-



-Hn… -Sebastian se concentraba en degustar cada rincón de la boca del demonio de cabellera carmín, con sus ojos cerrados, apegándolo más a su tibio cuerpo-



-(Oh dios de la muerte… ¿Esto es la muerte? No… Esto es… ¡Amor! ) –Aparta lentamente sus labios de los de Sebastian y le dedica una lasciva sonrisa- ¡Oh! ¡Sebas-chan! ¡Aquí viene lo mejor! –Se le lanza encima haciéndolo caer al suelo-



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A pesar de que Suiseiseki había conseguido llevarse bien con Finnian sin ser detectada por Sebastian o alguien más, nunca pudo sacarle la información que quería… Ya que era un tanto tímida con él, al estar enamorada de ese joven y fuerte jardinero…

Regreso a la mansión Trancy como derrotada sin poder presentarse frente a su ama no quería hasta que pudiera darle información sobre Ciel o algo…



Al siguiente día, volvió a visitar a Finnian esta vez estaba convencida que lograría saber la verdad sobre lo que pensaba Ciel de Shinku, pero no tuvo éxito, sin embargo se llevo mejor con él, se conocieron más y ya eran como los mejores amigos en solo un par de días… Para Suiseiseki, era como un sueño hecho realidad… Ella pensó que quizá nunca lo lograría pues el estar frente a ese niño rubio era difícil a veces el hablar y solo quería jugar con él o conversar…

La dama que poseía el anillo del poderoso rubí, seguía deprimida por lo que su primo le había dicho, no salía para nada de su habitación. Grell era quien se encargaba de llevarle comida y le ayudaba a bañarse y vestirse, siendo su mayordomo era lo menos que podía hacer. Alois continuo seduciendo a Sarah y no solo él, Claude también, quien cada vez estaba más cerca de llevar a cabo su malévolo plan: Matar a Alois Trancy…

Todo permaneció así en la mansión Trancy, día tras día hasta pasar una semana que para Shinku fue eterna…



Pero la castaña no se daría por vencida, ella pensó: “Esta vez lo lograre”… He hizo una visita más al jardín de la mansión Phantomhive donde por supuesto encontraría a Finnian.



Ambos estaban en la zona donde se podía jugar con ese gigantesco perro endemoniado llamado: Pluto.

Suiseiseki tomaba su distancia con una sonrisa… Finny reía divertidamente y arranca un gran árbol con todo y raíz, girando con el, para tomar vuelo y lo lanza muy lejos, para el, no era nada, ya que poseía una fuerza inhumana…



-¡Ve por el pluto! –Exclama el rubio observando como Pluto rápidamente corre por ese árbol con su lengua de fuera y una sonrisa canina llena de felicidad-



La tierra vibra cuando pluto corre alejándose del lugar…



-… -Suiseiseki ríe- Parece que solo tú puedes jugar con él… -Sonriendo leve mientras se acerca a él-



-Sí… Es un lindo perrito –Voltea a verla y sonríe cerrando sus ojos-



-(¿Perrito?) –Piensa con una gota que resbala por su cabeza- ¡La verdad, me da un poco de miedo! ¡S-Solo un poco! –Evade su mirada apenada-



-… -Ríe- Sí lo se… No te hará nada si yo estoy contigo… -Se aproxima a ella mirándola con una encantadora sonrisa-



-… -Lo mira sonrojándose completamente y se aleja de repente- ¡Ah! ¡Estas muy cerca niño! –Agita sus brazos muy avergonzada-



-¡Ah, lo siento! –Adopta un gesto de preocupación y ala vez tierno-



-Ya, ya... esta bien… -Vuelve a acercarse a el y frunce el ceño- Oye Finny, tengo algo que preguntarte…



-¡¿Si?! –Sonriendo la observa-





Se escucha como alguien mas se acerca hacia ellos y voltean a verlo sorprendiéndose al ver que se trataba de Ciel, quien al estar cerca de ellos frunce ligeramente su entrecejo mirándolos, empuñando su bastón con porte y elegancia…



-Ustedes… ¿Qué creen que hacen?... –Le dirige su fría mirada a la castaña- ¿Tu que haces aquí?...



-¡B-Bocchan! –Exclama Finny sorprendido al verlo presente-



-Y-Yo… -Ríe con nervios- ¡Yo ya me iba! ¡Adiós! –Apunto de correr se escucha en un tono alto la voz de Ciel-



-No sirve de nada que huyas… Si huyes, le diré a Sebastian que te mate…



-Bocchan… -Con un rostro triste el rubio-



-Ahora dime ¿A que has venido?... –Mirándola con determinación-



-Etto… -Une sus dedos mirándolos muy nerviosa sin saber que decir-



-Bocchan, ella solo vino a ayudarme, vera ella también es jardinera y es mi amiga, si le molesta por favor perdóneme… Y déjela irse… Ella no vino con malas intenciones lo sé… -Mira de reojo a Suiseiseki con preocupación-



-… -Suspira- Tengo mejores cosas que hacer… Solo que escuche unas molestas risas mientras tomaba té en mi despacho… ¡Sean menos ruidosos! –Ordena y se da media vuelta-



En ese preciso momento regresa Pluto emocionado con el árbol entre sus dientes y se sienta dejando el árbol en el suelo para después transformarse de repente en humano desnudo, acercándose a Finny tratando de llamar su atención pero este lo ignora por que esta preocupado por Suiseiseki ya que teme del silencio que su amo había mantenido por breves segundos, sin irse…



-Tú… -Dice en un tono claro Ciel- Ven conmigo… -Camina alejándose-



-¿Y-Yo? –Pregunta Suiseiseki y mira a Finny-



-… -Finny solo asiente leve con su cabeza para darle seguridad-



-… -Ciel se detiene y voltea su mirada hacia ellos molesto-



-¡S-Si ya voy! –Exclama Suiseiseki apresurándose-



-(Espero y Bocchan sea amable con ella…) –Piensa Finny al mirar el cielo con angustia-





Mientras caminaban entrando a la mansión dirigiéndose a una de las habitaciones…



-(Los Trancy, por supuesto que son sospechosos, pero no puedo actuar impulsivamente, debo esperar hasta tener mas pruebas, después, enviar a Sebastian a que investigue y analizarlos…) –Pensaba a sus adentros el conde- Por aquí… -Le dice y abre una puerta dejándola entrar primero y la deja entre cerrada- Se que eres sirvienta de Shinku Trancy… Por eso –Mirándola fijamente- Quiero aprovechar el que hayas venido… -Camina hacia uno de los muebles y toma el muñeco de felpa “Kun-Kun” en sus manos- (La verdad no puedo evitar pensar tanto en ella, eso es raro… Sebastian dice que no es normal ni natural, que algo “ellos” tienen que ver con mis sentimientos, pero, por algún motivo, quiero darle un regalo a Shinku… No directamente…) –Pensaba mientras veía a Kunkun y a la castaña- (Pero debe llegar a sus manos… Es la única forma de controlarme, de controlar, estas ganas de verla y estar con ella… Sabiendo que tiene algo mío, algo que yo le daré, quizá despeje mi mente y talvez este intenso deseo de abrazarla que me quema por dentro, se apague un poco…) –Se acerca a ella resonando el taconear de sus zapatos- Toma… -Extiende sus brazos dándole el muñeco de felpa-



-¿Eh?... ¿P-Para mi? –Confundida y sorprendida aparece un tenue rubor en sus mejillas al observar el muñeco, tomándolo lentamente-



-No… Es para Shinku… Haz que llegue a sus manos… -Mira hacia otro lado-



-¿Para Shinku? –Sonríe emocionada-



-Sí… -La mira y un tono carmesí se apodera de sus mejillas- No es lo que crees… Es solo que…



-¡Kyaaa!!! ¡Genial! ¡Esto es una prueba de amor!!! –Muy emocionada abraza el muñeco de felpa-



-¿Prueba de amor? –La observa extrañado y con recelo- Oye, tranquilízate…



-¡Oh lo siento! –Se pone firme-





La imagen y nombre de aquella dama que había cautivado irracionalmente sus sentidos, regresa a su mente, y sin poder retener esa curiosidad que lo carcomía, sintiendo una inquietud vibrante que hacia latir rápidamente su corazón, pregunta con timidez y algo de enojo al no poder controlarse…



-Dime… ¿C-Como esta Shinku? –Desvía su mirada ruborizado- (Maldición no pude contenerme)



-¿Eh?.. –Parpadea con asombro breves segundos- ¡Genial! ¡Te interesa Shinku, te sonrojas! Eso quiere decir que… ¡Estas enamorado! ¡Woow! ¡Increíble! –Muy emocionada da brinquitos- ¡La magia del anillo funciono!!! –Exclama muy contenta y al notar que esas indebidas palabras salen de sus labios cubre su boca con ambas manos asustada mirando a Ciel con temor-





Aquello que había dicho la castaña, era más que una prueba para Ciel, para él, lo fue todo… Comenzó a comprender todo, Sebastian tenía razón su amor no era natural y los Trancy habían hecho algo para hacerlo sentir así… ¿Pero que quiso decir esa jardinera con “Magia y Anillo”?…Esas dos palabras hacen que el conde empiece a examinar en su mente, aunque no se imagina lo que pueda hacer, todo era como un enigma, un enigma que pronto debía resolver. No piensa dejar las cosas así… Tiene que deshacerse, de lo que sea que se interponga en su camino… Su camino hacia la venganza, ya que ese amor, no lo deja concentrarse en ese deseo.



-… -Ciel pone una cara de sorpresa, luego frunce el ceño- ¿Qué dijiste? ¡¿Cuál magia?! –Molesto sin dejar de mirarla fijamente-



-Oh, no… (¿Qué he hecho?...) –Lo observa sin contestar con una expresión llena de miedo-



La tensión crece a su alrededor, solo observa a Suiseiseki con el ceño fruncido, esperando respuesta… Suiseiseki queda como paralizada sin saber si correr o quedarse ahí…



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viernes, 23 de diciembre de 2011

Naruloid [La calidez de tu voz]

Capitulo-59                                                        -La calidez de tu voz-








La nieve no dejaba de caer, parecía que se estaba destrozando el cielo…

La camioneta de Itachi estaba medio cubierta de esa blanca nieve, él seguía revisando el motor, tratando de arreglarlo. Frunce ligeramente el ceño y asiente, al pensar que ya lo ha reparado, cierra esa parte de la camioneta y sube a ella, cerrando la puerta, introduce la llave e intenta encenderla… Pero solo produce un molesto ruido, y no se mueve, pero al menos consiguió que las luces se encendieran, la apaga y suelta un gran suspiro, sintiéndose agotado y frustrado ante su situación… Su camioneta no avanza, su amigo se había dejado llevar por sus impulsos y se fue solo a buscar a Aiko, quien hasta a él mismo le preocupaba…



-(¿Dónde estará Deidara?...) –Se pregunta en su mente y con un rostro serio, vuelve a tomar su celular, para llamar al rubio- (Vamos, contesta...) –Piensa con la bocina en su oído y logra escuchar el timbre del celular de Deidara muy cerca- (…) –El se sorprende y se deja guiar por el sonido, encontrando el móvil de su amigo a un lado, en el asiento del copiloto donde el iba- (¿Por qué lo dejo aquí? ¿Acaso no quiere que lo moleste?...) –Apaga su celular y vuelve a salir, creyendo que si hace un segundo intento, lograra solucionar el problema de su camioneta-

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Mientras tanto… Deidara se encontraba totalmente perplejo ante tan fuerte escena, Aiko parecía muerta…

Deja caer al suelo el abrigo de ella y también la linterna de mano, aún sin estar seguro si sigue con vida, apresura el paso para entrar al agua sin pensarlo mucho, solo sabe que tiene que sacarla de ahí… Poco a poco siente como va hundiéndose en el helado río, luchando con la corriente para poder acercarse a Aiko, quien no estaba muy lejos de la orilla y se mantenía contra esa roca. El rubio se comienza a sentir un poco nervioso y su corazón late más y más, un intenso sentimiento lo invade, no sabe muy bien que es, solo continua… Y aun viéndola en ese estado, habla temblando de frío…



-¡Aiko!... ¡Aiko! –Se aproximaba a ella- ¡¿Qué diablos haces aquí?!... ¡Aiko, respóndeme! Tch… -Sin poder evitarlo, empezaba a temblar incontrolablemente a causa del inmenso frio que congelaba su piel- A-Aiko… - Llega con ella y toca su mejilla, abriendo mucho sus ojos al notar que su piel estaba muy helada como el hielo- ¡Aiko! –La mira con desesperación y la toma en sus brazos, llevándola hacia la orilla- (¿Por qué no responde?... ¿Estará…? No…) –Piensa y la saca del río respirando agitadamente por el frío que siente su cuerpo, extiende el abrigo de Aiko sobre la nieve y ahí la recuesta, arrodillado cerca de ella, la observa sin saber que hacer para que abriera sus ojos o le respondiera-





Las blancas estrellas de nieve, seguían cayendo suavemente, parecían no tener fin…

El rubio se había empapado y se moría de frío pero lo que más le preocupaba era ver congelada a Aiko, quien mantenía un rostro tranquilo con sus ojos cerrados y labios entreabiertos, se acerca para pegar su oído sobre el pecho de ella, intentando escuchar su corazón, y se siente algo aliviado al percibir unos leves latidos, algo lentos…



-Aiko ¿Estas viva verdad?... –Cuestiona mirando su rostro y sus lagrimas salen de sus ojos, comenzando a llorar en silencio, extiende sus brazos para tomarla entre ellos, alzando su espalda del suelo repleto de nieve para abrazarla- Aiko… -Murmura mientras esas lagrimas descendían lentamente por sus mejillas, creyendo que la ha perdido, y eso que escucho fue solo su imaginación-



Trata de darle calor al abrazarla… Sosteniéndola en sus brazos la observa detenidamente, su lindo rostro tan apacible que parecía estar sumergida en un profundo sueño… Algunas lágrimas caen depositándose en las frías mejillas de Aiko…



-No… No quiero perderte… No a ti... Tú eres mi vida…-Pronunciaba en un tono entrecortado sin dejar de llorar silenciosamente- Aiko…





En ese momento a Deidara ya no le importa su orgullo ni mostrar su debilidad, no podía contener ese sentir, ni retener más ese amor que en este instante se desbordaba y estaba a flor de piel, al ver a su amada como si hubiese perdido la vida… Se arrepiente de ser tan duro, indiferente e introvertido con ella… En lo más profundo de su corazón, desea que Aiko abra sus ojos, que pueda verlos una vez más, esos hermosos orbes violetas llenos de inocencia, de los que se había enamorado, los mismos que lo habían cautivado la primera vez que la vio, para poder decirle cuanto la ama… No sabe si ella lo escucha o si haya sentido la tibieza de sus lágrimas que seguían depositándose en sus pálidas mejillas…



-Aiko… Por favor, dime algo… Lo que sea… -Aún temblaba por el frío y se le dificultaba el hablar con ese enorme sentimiento que lo controlaba-





Un repentino y oscuro pensamiento llega a su mente… Que quizá Aiko ya no esta con vida y el nunca pudo decirle esas dos simples palabras… Que para el, eran dos palabras muy pesadas, al ir cargadas de sentimientos los cuales estaba convencido eran puros, tan puros como la nieve que no se detenía y comenzaba a juntarse en su cabeza y hombros… Cierra sus parpados y posa delicadamente sus labios en la frente de ella, se aleja para mirar su cara jadeando levemente al no soportar tan intenso frío, su ropa estaba húmeda lo que lo congelaba cada vez mas, aun así intentaba darle calor a Aiko, aunque pareciera inútil… Sosteniéndola en sus brazos y pegándola en su pecho sin dejar de llorar… Después de unos segundos, la contempla observando aquellos copos de nieve que parecían adornar su oscuro cabello aún con esa serena faz, lucia como un ángel…



-Aiko… Yo… Yo… -Coloca su fría mano en la mejilla de ella acercando su rostro lentamente mientras articula difícilmente- Te… Te amo… -Casi susurrando, dejando chocar su aliento en sus labios cerrando sus parpados un momento para luego alejarse sin dejar de verla-



Una expresión afligida se apodera de su rostro al pensar que quizá esas palabras ella no las logró escuchar… Lo que le entristece más y dejándose llevar por sus sentimientos, la estrecha con sus brazos aferrándose a ella con un afecto especial.



El rubio había dejado el coraje que sentía hacia ella, por haber salido de casa y poner en peligro su vida, en este momento era llevado por sus más profundas emociones que se habían abierto ante la aparente muerte de Aiko…



Sentía que era en vano seguir hablándole, que ya era tarde para decirle eso, que no importaba cuanto tratara de darle calor, seguía fría y el seguía congelándose, pero algo en su interior no le permitía pensar en otra cosa que no fuera en ella ni tampoco abandonarla.



De pronto Deidara puede sentir como el cuerpo de Aiko hace un ligero movimiento… Ella recuperaba su conciencia al reaccionar por el sonido de su voz al hablarle…



-Dei… Deidara –Musita débilmente al abrir temblorosamente sus parpados-



-¡Aiko! –Exclama reaccionando muy sorprendido al escucharla, detiene sus lágrimas y la aleja tan solo para volver a ver esos ojos violetas, esos ojos que lo miraban y el semblante tranquilo y cansado de Aiko-… -La observa impaciente y alterado-



-Gracias… -Murmura bajando su mirada y se balancea frágilmente hacia él al perder el equilibrio-



-¡O-Oye!… -La sostiene abrazándola sonrojado, sintiendo una paz interior-



Aiko se encontraba en un estado muy delicado y débil, tan débil que ni siquiera tenia la fuerza de mantenerse erguida…



-Gracias… -Repite en ese mismo tono de voz-



-¿Por qué?... –Sin soltarla-



-Por salvarme… Otra vez –Cierra sus ojos trazándose una tenue sonrisa, colocando su cabeza contra su pecho- T-Tengo frío… -Tiembla apretando levemente sus parpados-



-Tú… Tú eres una tonta… -Ruborizado frunciendo el entrecejo, se estremecía tratando de soportar el clima que los envolvía- (Que alivio, esta hablando… ¿Habrá escuchado lo que dije?...)



-…



-Vamos… Debemos ir con Itachi, él estaba en su camioneta, seguramente nos esta esperando… -Dirige su mirada a los lejos notando la neblina en la oscura noche-



-… -Suspira-





Deidara no dejaba de abrazar a Aiko y aunque ambos estaban muy helados, la cercanía era muy cálida por el amor que sentían entre ellos…



El rubio de orbes azules le coloca a Aiko su abrigo sobre sus hombros y le enreda su bufanda en el cuello levemente, ya que eran las únicas prendas que no estaban mojadas y la carga en su espalda llevándose consigo la linterna para alumbrar su camino…



Vuelve a caminar lentamente, pues se sentía congelado y sus músculos entumecidos, pero el llevar a Aiko sobre su espalda, le proporcionaba algo de calor y al escuchar su ligera respiración cerca de su oído le da ánimos para continuar, caminando por entre los tantos arboles y terreno inestable de esa zona boscosa llena de nieve.

El no estaba muy seguro si tomo la dirección correcta para llegar con su amigo, pero no se rendiría y mucho menos sabiendo que Aiko seguía dando señales de vida, de esa vida, que era tan valiosa para él… En su interior se preguntaba una y otra vez ¿Si ella escucho su confesión amorosa?... Claro que no iba a preguntarle directamente, además para el, lo más importante ahora era llegar con Itachi para llevarla al hospital.

Mientras caminaba se impulsa y acelera el paso con su mirada derecha, tratando de recordar el camino, ya que le urge llegar para poder propinarle calor dentro de la camioneta a Aiko, en eso, no se fija cuando la tela de su pantalón se engancha en una de las ramas de las tantas plantas que los rodeaban y lo hace tropezar cayendo de frente, sintiendo como cae el peso de Aiko encima de él, rompiéndose la tela y rasgándose parte de la piel de su pierna por la caída.



-Tch… Maldición… -Masculla y se levanta lentamente, sin soltar en ningún momento a Aiko, volviendo a caminar, soportando el dolor en la zona dañada de su pierna, la cual sangraba, la herida fue algo profunda, pero le preocupaba más su “hermanita”- Aiko… ¿Estas bien? –Voltea su cabeza hacia un lado sin escuchar respuesta-





La pelinegra no se había hecho ni un solo rasguño, ya que Deidara había amortiguado su caída, ella parecía como dormida todo el tiempo, ni siquiera se percato de lo ocurrido.





-(Mientras siga respirando, no importa si no contesta…) –Piensa y sigue su andar-





Finalmente encuentra la camioneta de Itachi, sintiéndose afortunado por no perderse… Itachi al escuchar que unos pasos se acercan, gira su mirada hacia Deidara y hace un gesto de sorpresa al ver que llega junto con Aiko, con su ropa empapada de agua y con su dorado cabello notablemente cubierto de nieve… Notando la sangrante herida de su pierna…



-Deidara… ¿Estas bien?... –Cierra la parte de enfrente de la camioneta estando esta vez seguro de que la ha arreglado-



-… -Se aproxima mas y lo mira con seriedad- Sí…



-Pero, tu pierna… ¿Qué te paso? Estas sangrando mucho… -Mirando su pierna con preocupación-



-¡Estoy bien! Abre la camioneta, debo recostar a Aiko en el asiento de atrás…



-Sí… -Rápidamente abre la puerta ayudándole a acostar a la pelinegra en el asiento trasero, deteniéndose a verla un instante- ¿Qué fue lo que le paso?... –Se acerca y toca la frente de la chica- Vaya, esta muy fría y pálida…-Pasa sus manos palpando la ropa de Aiko- Y mojada… -Voltea a verlo- Tú también…



-No tenemos tiempo, Aiko necesita un doctor esta muy grave… -Abre la puerta del asiento del copiloto para subirse a la camioneta-



-Bien, entonces vámonos… Espero y esta vez no me falle…



-… ¿Qué? –Ya dentro de la camioneta lo observa antes de cerrar la puerta, molesto-



-Nada… -Pasa por enfrente de la camioneta para llegar al otro extremo y entrar en ella tomando el asiento del volante-



-…Rápido Itachi –Dice intranquilo-



-Espera… -Se quita su abrigo habilidosamente y se gira para alcanzar a Aiko y cubrir su cuerpo con este- (Pobre niña…) –Con un rostro serio, vuelve a su posición colocándose el cinturón de seguridad-



Resopla algo estresado, esperando que su camioneta funcione, y la enciende escuchando como el motor vuelve a trabajar como es debido…



-¡Genial lo conseguí! –Eleva el tono de voz algo contento por su logro sonriendo levemente y mueve la camioneta tomando una dirección para salir de ahí-

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En camino a casa…



-Deidara ¿Doctor?



-Sí y rápido Aiko necesita atención médica… -Mirando al frente con determinación-



-… -Suspira leve y entre cierra sus ojos- Deidara, parece que aún no entiendes nuestra situación… Debemos tomar temprano el vuelo o lo perderemos, sabes lo difícil que es para nosotros programar un vuelo y si seguimos aquí mañana es muy posible que la policía nos encuentre, y tú y yo, iremos a la cárcel… Piensa ¿Qué pasara con Aiko y Sasuke? Sin nosotros ellos estarán solos… Además por más que necesitemos llevarla a un hospital, no podemos



-¿Por qué? Nuestros rostros no son conocidos aún… -Lo mira-



-Sí, lo sé pero, no debemos tomar ese riesgo… La policía no conoce con exactitud nuestro rostro pero si conocen algunos rasgos físicos nuestros… ¿Y si nos ven sospechosos? No dudaran en interrogarnos y eso puede ser peligroso…



-Tch… -Muerde su labio inferior mirando por la ventana-



-Lo mejor será que volvamos a casa y esperemos que ella sola se recupere…



-¡No! –Voltea a verlo arrugando el ceño con enojo- ¡Yo se que Aiko esta muy grave! ¡¿Qué no la vez?! ¡Ni siquiera puede caminar, su pulso es muy bajo y, y no importa lo que hagas sigue pálida y fría! ¡Necesita un medico! ¡Ahora! ¡¿A casa?! ¡¿Ir a casa y esperar un milagro?! ¡¿Estas loco?!...



-Oye, relájate… -En un tono bajo lo mira de reojo unos segundos y vuelve su vista al frente-… Se que Aiko necesita atención medica, pero… No somos gente común, Deidara… Es imposible… Piénsalo. –Dice mientras conducía-



-… Ella, ella es lo mas importante para mí, aun mas que mi propia vida… Sin ella, ya no me importaría vivir, es mi motivo de vida… Y lo sabes –Lo mira de la misma manera-



-… Le llamare a Sasuke, espero y este despierto –Toma su celular-

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viernes, 16 de diciembre de 2011

Lovely Rose [Negro y Rojo]



Nota: Este capitulo contiene una escena Yaoi, de SebasGrell. Si no te gusta el Yaoi osea (Boy and Boy L♥ve) No te preocupes, antes de la escena avisare, y cuando termine la escena tambien ^^ .






Capitulo-19                                                      -Negro y Rojo-








En la residencia Phantomhive, solo se escuchaba el sonido de los pájaros que paseaban por los arboles, volando en el jardín y pasan por fuera de la ventana abierta de la cocina…

Dentro estaban Bard, quien pensaba que hacer para la merienda sentado en una de las sillas, siendo acompañado por Finnian…



-… -El niño rubio suspira con angustia- Últimamente, la mansión esta algo triste… -Comenta en un tono triste y se sienta en una silla cerca de la mesa-



-Sí, al parecer, Bocchan esta más ocupado que nunca… -Con sus brazos cruzados y ese cigarrillo entre sus labios-



-¡Sería genial que el joven Alois Trancy visitara la mansión como antes! –Comenta más alegre Finny-



-¡Cállate!... Que no te escuche Sebastian –Mira a sus lados con preocupación-



-… -Ríe inocentemente- También, que pudiéramos ir a uno de esos bailes de la Mansión Trancy… -Con una encantadora sonrisa cierra sus ojos y recuerda a la castaña de quien se sentía enamorado-



-… -Lo observa con una gota en su cabeza-





Aparece Sebastian detrás de Bard…





-Ustedes dos… ¿No han perdido bastante tiempo ya?... –En un tono serio-



-¡Ahh! ¡Sebastian-san! –Exclaman al unisonó poniéndose de inmediato en pie, y con firmeza lo miran de frente-



-Bard… ¿No has empezado ni ha preparar los ingredientes para la merienda?... –Mirándolo con desaprobación- Y Finny ¿Qué no deberías atender el jardín?... –Le dirige la misma mirada-



-Etto… -Sintiéndose nervioso el rubio jardinero-



-¿Qué es, lo que están esperando?... –Afila su mirada puesta en ellos-



-¡Si! –Responden a la vez y Finny sale corriendo de la cocina mientras Bard comienza a buscar los ingredientes-



-(Perfecto, ahora podre ir con la señorita Charlotte) –Piensa con una delicada sonrisa y se escabulle-



-Sebastian, sabes donde… -Decía antes de ver que el mayordomo había desaparecido-… -Parpadea algo asombrado y sin comprender- ¿Se-Sebastian?..



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Alois había quedado dormido sobre su escritorio con papeles y trabajo pendiente a su lado… Cuando Sarah toca la puerta para llevarle té…



-¿Danna-sama? –Tocando con suavidad la puerta-



-… -Se despierta de sobresalto- ¡Ahh! ¡No Claude no me dejes! –Exclama al despertar con sus ojos exaltados- ¡¿Quién es?! –Irritado mira la puerta-



-Yo… Sarah señor…



-¡No me digas señor! Y entra… -Recarga su espalda en el respaldo de su asiento, entrecerrando sus parpados, con sus rubios cabellos desordenados, y el lazo de su cuello mal atado-



-… -La tímida sirvienta abre la puerta y entra con la bandeja con el té y se lo sirve, colocándolo sobre su escritorio dejándolo a su alcance- ¿A-Algo más? –Lo mira muy sonrojada-



-… -Toma el té alzando leve sus cejas y prueba un sorbo- Le falta azúcar… -Frunce el ceño-



-Lo lamento, ahora mismo le traigo azúcar… -Reverencia muy apenada-



-¡No!... ¡Olvídalo!



-Eh… -Lo observa- S-Si…



-Ven… Acércate, quiero verte… -Deja el té a un lado con seriedad-



-… -Asiente y camina con nervios hacia él- ¿S-Si?... –Cerca de él-



-Vaya… -Mirando sus grandes pechos, subiendo su mirada hasta sus ojos- Eres muy bella… -Susurra-



-Gracias Danna-sama… -En un tono bajo y dulce, cierra sus ojos-



-… -Acerca sus manos a sus pechos y los acaricia- Son tan suaves… -Con una picara sonrisa-



-¡Ah!... –Muy ruborizada abre sus parpados con sorpresa y los vuelve a cerrar- Hn…



-Dime Sarah… ¿Qué te ha hecho Claude?... ¿Te ha besado? –Sigue tocándola y mirando sus ojos seductoramente-



-… -Queda sin habla solo se estremece y no abre sus ojos-



-¡Contéstame! –Frunce el entrecejo y presiona con su mano uno de sus pechos-



-¡S-Si! –Muy enrojecida de sus mejillas y asustada aprieta sus parpados-



-Maldito… -Masculla y deja sus pechos para cruzar sus brazos enojado-



-¿Danna-sama? –Lo mira aun con ese rubor en sus mejillas-



-No, dime Alois… Sarah… -Murmura y sonríe- Desde ahora, quiero que me llames por mi nombre… ¿De acuerdo?



-Si, como ordenes Alois… -Leve reverencia y baja su mirada, sin comprender el comportamiento de su amo-





Sebastian gozaba su visita a “La casa de los gatos”, jugando con dos de los felinos de Charlotte…





-… -Con una imborrable sonrisa, el demonio estaba hincado en el suelo, jugando con esas encantadoras criaturas-





Charlotte solo lo contempla desde una considerable distancia, no podía evitar el sentirse tan enamorada de quien ya sabia, era un demonio. Solo suspira y con su abrigo abierto, se descubre el escote y coquetamente se acerca hacia él arrodillándose frente a él, para alcanzarlo, viendo sus gatos…



-¿Le gustan mucho verdad? –Mira el rostro del demonio, con un ligero sonrojo-



-Sí, son muy lindos… No más que eso –Ríe entre dientes, ignorando por completo su provocativo escote y se dedica a acariciar a uno de los gatos, tomándolo en sus brazos y sentándose para disfrutar más cómodamente del momento-



-… -Se coloca en cuatro, mirándolo sonrojada- Seb-Sebastian… -Se acerca a su rostro pensando en robarle un beso, pero Sebastian lo esquiva, poniéndose de pie llevando consigo al gato-



-Charlotte… -Afila su mirada puesta en ella-



-Lo… Lo siento yo… -Se abrocha su abrigo bien y se levanta del suelo avergonzada-



-Esta bien… -Sonríe- Claramente, no puedo enojarme contigo…



-… -Ríe con sus ojos cerrados-



-Observe… -Deja al gato caer con sus patitas en el suelo y le da la espalda a la chica para chasquear sus dedos, apareciendo al segundo que lo hace una mesa llena de exquisitos alimentos y vino servido- ¿Gusta?... –Con una sonrisa voltea levemente su rostro a un lado y la mira de reojo-



-… -Boquiabierta sorprendida- ¿Cómo?... –Camina y se detiene quedando a un lado del demonio, poniendo su vista a la mesa-



-Todo es solo para usted… -Mirándola con calidez-



-Seb-Sebastian-san –Sus mejillas se tornan rojas y baja su mirada- Gracias…



-No… -Dice al acercarse y tomarla de su barbilla delicadamente, aproximando su rostro al suyo- No tiene que agradecer… -Pronuncia en un tono suave, serio y muy cerca de sus labios-



-… -Embelesada ante los encantos del demonio siente que su corazón explotara si continua-…





En ese precioso instante se escucha como un vidrio se rompe y giran su mirada hacia una de las ventanas donde entraba Grell con un salto lleno de celos e ira…



-¡Tú! –Señala a Charlotte con el ceño fruncido-



-¿Eh?... –Ella se sorprende y Sebastian mira con indiferencia a Grell soltando a la dama-



-¡Tú aléjate de mi Sebas-chan!!!!! –Grita con furia aproximándose a ellos y aprieta sus dientes con rabia-



-Grell-san… ¿Cómo es que llegó aquí? –Cuestiona Sebastian mirándolo con el ceño ligeramente arrugado-



-¡E-Etto! –Nervioso y apenado se acerca a Sebastian y une sus manos mirándolo con ojos enamorados- ¡Yo te seguí Sebas-chan! ¡Y sentí muchos celos al ver la atención que le ponías a esos gatos!... –Cruza sus brazos y con sus ojos cerrados, alza sus cejas- Pero, eso puedo tolerarlo… -Rompe posición y agita sus brazos furioso- ¡Lo que no puedo tolerar es ver lo cercas que estabas de esa mocosa!



-… -Sebastian suspira fingiendo molestia- Evidentemente, usted nunca entenderá ¿no es así?... –Lo mira de reojo con sus brazos cruzados-



-¿Eh? ¿Entender que?... –Confundido lo observa-



-Que no me interesa… Un demonio tan asqueroso…



-¡Ah! –Le duele-



-Inútil…



-¡Ahh!!! –Le duele más-



-Y severamente molesto…



-¡AAhhh!! –Le duele peor- ¡P-Pero que cruel! –Con lagrimitas en sus ojos- ¡Eso solo te hace extremadamente sexy!!! –Se emociona- ¡Oh si! ¡Me gusta, me vuelves loca Sebas-chan! –Toca sus mejillas ruborizadas y se mueve de un lado a otro-





Charlotte solo miraba molesta a Grell, ya que parecía que ellos, ya se conocían desde mucho antes, ella solo se convierte por un momento en espectadora de tan confusa escena… Que la ponía un poco celosa



-Disculpe señorita Charlotte… -Se dirige el mayordomo a ella de una manera educada- Ahora mismo sacare a este ser tan repugnante de su humilde hogar… -Sonríe cerrando sus parpados con gentileza-



-S-Si… -Sonrojada lo observa-



-Bien, hasta luego… -Se gira para irse-



-Espere… -Toma su muñeca-



-¿Mm?... –La mira de reojo-



-¿Volverá?... –Con su mirada baja aun con ese rubor-



-Sí… Por supuesto –Le sonríe- Lo prometo



-… -Alza su mirada y ve su dulce sonrisa, sonriendo también-



-… -Grell le dedicaba una mirada llena de odio a Charlotte- (¡Estúpida mocosa, no toques a mi Sebas-chan! ¡Aléjate de él!!!) –Pensaba conteniendo sus ganas de matarla-



-Grell-san… -Lo llama Sebastian-



-¡¿Si Sebas-chan?! –Se exalta con gran emoción sonriendo-



-Sígame, por favor… -Le sonríe y camina saliendo por la puerta-



-¡Oh, claro! –Responde completamente feliz y corre hacia él siguiéndolo, saliendo de casa de Charlotte, imaginándose que se trata de alguna aventura amorosa-



-… (¿Quién… es el?..) –Se pregunta Charlotte en su mente al ver irse a Grell-



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La castaña tal y como lo había prometido, había ido a la mansión Phantomhive, pero en lugar de entrar por la puerta siendo tan solo una simple sirvienta, entro por el jardín esperando no ser descubierta ni vista por nadie que no sea ese niño rubio, del que aún desconocía su nombre, él era su segunda razón de ir…



Camina cuidadosamente y con algo de temor ya que desconocía ese lugar para por entre las plantas, arbustos y arboles, escondiéndose evitando ir por los caminos del jardín, siendo muy cautelosa, dedicándose solo a buscar a ese rubio, quien era el único con quien debía comunicarse…

Después de unos minutos se queda dormida en medio de los arbustos, y flores… Finny aparece cerca, sin que ella lo presenciara ya que estaba inconsciente… El chico de dorada cabellera muy contento con una leve sonrisa y unos ojos azules que reflejaban su alegría, riega las flores, mojando accidentalmente, sin darse cuenta a Suiseiseki y así ella despierta de sobresalto muy espantada…



-¡Ah! ¡No! ¡Esta fría! –Emitía en un tono alto, asustada y temblando-



-¿Oh?... –Finny puede ver como los arbustos se mueven y escucha esa conocía voz extrañado-



-… Brrr –Se estremecía de frío y sentía escalofríos correr su piel, sale de los arbustos- ¡Oye tú, ten más cuidado! –Le grita señalándolo muy molesta con sus ojos cerrados-



-¡Ah! ¡Lo siento! –Hace reverencia muy avergonzado-



-¿Eh?... –Al abrir sus ojos puede ver que era ese chico rubio de sus sueños- ¡Ah! ¡E-Eres tú! –Ríe nerviosa- ¡N-No te preocupes yo! Etto… -No sabe que mas decir y baja su vista, sonrojándose-



-No sabía que estabas ahí… -Ríe- ¡De verdad lo siento! –Sonríe- ¡Hola! ¡Mi nombre es Finnian! ¡¿Y el tuyo?! –Entusiasmado la mira con una impecable sonrisa y colorado de sus mejillas-



-¿F-Finnian?... –Parpadea con sorpresa unos segundos- M-Mi nombre es… ¡Suiseiseki! –Pronuncia su nombre enérgica-



-¡Vaya! ¡Eres la chica del baile! ¿Me recuerdas?... E-Ese día creo que tuviste un accidente y… -Mira hacia otro lado muy nervioso-



-¿Eh?... ¡A-Ah, si! ¡Claro! –Ríe un poco frunciendo el entrecejo con extrañeza-



-Por cierto… -La mira de sus pies a su cabeza- ¿Qué haces aquí?



-¡¿Eh?! ¡P-Pues! Yo… Yo… -Apenada desvía su mirada-



-¿Si? –Sonriendo-



-¡Q-Quería ver el jardín, ni creas que te vine a ver a ti! –Ríe de una manera exagerada por sus nervios- (No debe saber a que he venido…) –Pensaba al dejar de reír sonrojada-



-Ah, que bueno que te guste… -Se ruboriza bajando su mirada un momento, luego la levanta animado- ¡Yo soy quien se esfuerza para mantenerlo perfecto y que sea del agrado de Bocchan! (Aunque… A veces ocurra algún desastre por mi exceso de fuerza y Sebastian-san tenga que…..) –Pensaba con una gota en su cabeza recordando todas las tragedias que le han ocurrido y también con Pluto, el perro demoniaco-



-…Etto… -Mira su alrededor, quedando en silencio su timidez no le ayudaba a hablar-



-¡Suiseiseki-chan! ¿Quieres acompañarme? Es hora de mi almuerzo… -La mira sonrojado y sonriendo-



-… -Parpadea ruborizada al ver su sonrisa-… (Debo conseguir la información que necesito, pero, también quiero saber mas sobre él… ¡Estoy enamorada de un Phantomhive!) –Pensaba y sonríe de medio lado con nervios- ¡C-Claro! ¡Pero! ¿Prométeme algo si?



-¿Oh?...



-Nadie, nadie debe saber que estoy aquí, o me mataran…-Con voz temblorosa- Ni tu amo, ni los otros sirvientes, y… y ni ese extraño mayordomo ¡Nadie! ¿De acuerdo? –Une sus dedos mirando estos sintiendo sus mejillas arder-



-¡Si! –Asiente con su cabeza sonriendo al cerrar sus ojos- Este será nuestro secreto –Ríe-¡Ven! ¡Comamos algo! –Toma su mano-



Para Suiseiseki ese momento en el que Finny toma su mano pasa muy lento… Y se siente muy feliz. Finny la lleva a comer junto con él y después le muestra los alrededores de la mansión Phantomhive, cuidando que nadie los viera…







<<<------------------------Alerta Yaoi (SebasGrell)------------------------->>>





Sebastian había llevado a Grell dentro del bosque, en medio de los altos arboles, que se extendían hacia el cielo, al mirar arriba se podía ver el firmamento y algunas nubes… Los rayos del sol atravesaban las ramas de los arboles, que ligeramente eran agitadas por el aire… Todo era tan mágico para el demonio rojo…





-Seb-Sebas-chan… ¿A dónde me llevas? –Cuestiona Grell mientras Sebastian tomando su muñeca caminaba adentrándolo más a ese bosque, él demonio rojo sentía como su corazón se iba a salir de su pecho, pero con una emoción y felicidad enorme, sonríe-



-Grell-san… -Lo acorrala de repente en el grueso tronco de uno de los arboles, mirándolo fijamente con un semblante serio- ¿Sabe por que lo traje aquí?...



-N-No… -Sonrojado, con una tonta sonrisa, siente como fluye una excitación en su interior perdiéndose en la mirada carmesí del otro demonio-



-Para decirle que lo odio… -Frunce el entrecejo y entrecierra sus parpados-



-¿Eh?... –Confundido-



-Lo odio… ¡Por hacerme sentir esto! –Acerca su rostro al suyo y dobla ligeramente su rodilla, colocándola entre las piernas de Grell y apegando su cuerpo al suyo-



-¡Ah! ¡S-Sebas-chan! –Exclama extasiado y muy feliz, sonrojándose sin borrar una sonrisa, luego observa los ojos de Sebastian, cuando nota su silencio, completamente embargado al ver sus orbes color rubí que parecían brillar, sus piernas tiemblan ligeramente por la conmoción-…



-Maldito demonio… -Susurra y cierra sus parpados al unir sus labios con los de Grell delicadamente-



-… (¡Oohh!!! ¡Yeeeees!!!!) –Grita en su interior y explota por dentro, quedando todos sus sentidos invadidos por la fogosidad que corre en su ser-





Grell se siente triunfante y entre cierra sus parpados sintiendo cierta debilidad al sentir los suaves y tersos labios del otro demonio, concentrándose en disfrutar el momento, aunque no entendía en su totalidad la acción de Sebastian, era lo que menos le importaba, estaba sucediendo, lo que tanto deseaba…



-… -Sebastian separa sus labios lentamente y mira sus ojos esmeraldas- Tengo algo que preguntarte…



-Oh… Lo-lo que sea… -Sintiendo que se derretía y estaba en la gloria-



-…



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jueves, 15 de diciembre de 2011

Naruloid [Entre la nieve]






Capitulo- 58                                                                -Entre la nieve-








Itachi había conducido hacia el monte aún sin saber si era correcto buscar a Aiko por ese lugar… Deidara no deja de mirar por las ventanas de la camioneta buscándola con sus ojos… Itachi disminuye la velocidad al entrar a esa zona llena de arboles y suelo inestable por la nieve.





-Oh no… -Murmura Itachi al sentir que le es difícil seguir por ese camino- Es mucha la nieve… Las llantas se atascarán en cualquier momento si continuo… -Mira de reojo a su amigo- Mejor regresemos quizá ya volvió a casa…



-¡Solo sigue! –Exclama molesto sin mirarlo-



-¿Qué no escuchaste lo que dije?... Bien, por si acaso llamaré a Sasuke…



-…



-… -Saca su celular con una mano mientras con la otra conducía-

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Los labios y la piel de Aiko, eran visiblemente pálidos, con sus parpados cerrados y labios ligeramente entreabiertos respiraba ligeramente… Ya no podía pensar, ni moverse, ni siquiera seguir llorando, estaba inconsciente, sin embargo, su cuerpo se mantenía con vida… Aunque esta dependiera de un hilo... Tan frágil, como lo era ella.



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Itachi corta la llamada…



-Sasuke dice que no hay señales de Aiko, que esta preocupado y nos ayudaría a buscarla, pero esta con su novia…



-… -Sigue mirando por la ventana sin hablar-





Se hizo el silencio… Para Itachi fue incomodo, así que habla en un tono bajo, para no molestar a su rubio amigo…



-Ahora que recuerdo… No esta muy lejos ese río… -Comenta con seriedad-



-¿Qué río?... –Le dirige su fría mirada-



-El río… En el que encontraste a Aiko, hace años… -Mantenía su vista al frente al conducir dificultosamente por ese sitio-



-…Es verdad, lo había olvidado… -Baja su mirada-



-Pensaras que es una locura pensar esto… Pero ¿No crees que quizá Aiko fue a ese río?... ¿Qué es lo que te dicen tus corazonadas? –Sonríe muy leve al verlo de reojo por unos segundos-



-No lo había pensado… Pero, no lo creo…. –Siente como aumenta el ritmo de su corazón- Es ilógico… -Mira hacia abajo-



-… -Sigue conduciendo-



Itachi decide dirigirse hacia ese río, no le gustaba andar sin rumbo fijo… Pero no le aviso a Deidara, sabia que faltaba poco para llegar al riachuelo… Al conducir el pelinegro noto que algo en su motor fallaba… Además le era difícil seguir entre tanta nieve… De pronto su camioneta se detiene y se apaga sola…



-Maldición… -Masculla Itachi y pega su frente al volante- Sabía que esto ocurriría –Murmura-



-… ¿Qué pasa? –Cuestiona el rubio al verlo-



-No lo sé, debo revisar… -Se endereza y suspira- Quizá el motor se congelo… La verdad no sé… -Mira a través del vidrio de la ventana, como vuelven a caer esos blancos copos de nieve- Afuera esta helando… El clima no ayuda mucho...



-Tch… -Frunce el ceño-



-Voy a tardar Deidara… -Se coloca la gorra de su chamarra negra- Revisare la camioneta…



-¡Yo no pienso perder el tiempo!



-¿Tienes un mejor plan?... ¿Qué piensas hacer? ¿Volver caminando a casa o buscarla cerca de aquí, aun con este clima?... –Mirándolo-



-La… Buscaré… -Desvía su mirada-



-…Suerte –Apunto de abrir la puerta-



-…Gracias



-Ah... –Antes de salir, abre uno de los compartimientos de su camioneta sacando una linterna de mano mediana- Toma… -Se la da en sus manos- Esta muy oscuro, no te preocupes, tiene suficiente batería... –Le sonríe muy tenue-



-… -Asiente leve y la toma mirándola-



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El rubio salió de la cálida camioneta al clima invernal… Esas estrellas de nieve que por el frío viento chocaban contra su rostro, lo hacían medio cerrar sus ojos, iluminando con la linterna su alrededor y su camino… Sus botas se hundían levemente a cada paso que daba, era pesado caminar… Respiraba agitadamente por los nervios y desesperación que sentía por encontrarla, también experimentaba cierto temor en su interior, temor de no encontrar a su pequeña hermanita. Sigue caminando sin rendirse contra el helado viento, que parecía empujarlo hacia atrás…



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Sasuke mira el reloj de uno de los muebles de la casa de Karin con preocupación, este marcaba las nueve de la noche… Karin no dejaba de hablar y por más que el pelinegro quisiera prestarle su atención, no podía, puesto que su amiga Aiko lo tenia muy angustiado en su interior… Sentados en la orilla de la cama de la pelirroja…



-Sasuke… -Lo nombra alzando el tono de voz-



-… ¿Qué? –La observa-



-¿No me estas escuchando verdad?... –Pone un rostro afligido-



-Lo siento Karin… Es solo… -Baja su mirada con angustia-



-Mi amor… -Toma con delicadeza su rostro haciéndolo verla a los ojos- Aiko esta bien, lo sé… -Lo suelta y cruza sus brazos al cerrar sus parpados frunciendo el ceño- A decir verdad me dan celos que pienses tanto en ella… -Molesta- ¡Por dios Sasuke! Es la última vez que nos veremos, quizá en mucho tiempo y tú –Es interrumpida al sentir un beso por parte de su novio-



-… -Sasuke permanece con sus labios posados sobre los de ella por unos segundos., luego se aleja- Karin… -Mirando sus ojos-



-… -Muy sonrojada- Sasuke…



-Te extrañaré… -Susurra mirándola fijamente-



-Yo… Yo también –Suspira y toma sus manos- Me alegra que mis padres se hayan ido de vacaciones… La casa es solo mía y, seguramente no tendremos interrupciones… Aunque en navidad, quizá este sola… -Baja su mirada aun ruborizada- Y como esta es la ultima vez que nos veremos, estaba pensando que, como despedida… Tú y yo… Ya sabes –Mira hacia otro lado muy coloreada de sus pálidas mejillas-



-… ¿Qué? –Fijando su mirada en ella-

-… -Una vena salta de su sien y sus anteojos se nublan sin verlo- Q-Que… Que… Hagamos el… ¡A-Amor! –Mueve sus anteojos tomándolos de un lado muy nerviosa al verlo-



-… No creo que sea el momento



-… -Suspira con decepción-



-… -Desvía su mirada- (Aiko… Itachi, Deidara, más vale que la encuentren…)



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El rubio caminaba y caminaba, gira su vista hacia atrás y ya no alcanzaba a ver la camioneta de Itachi, se había alejado mucho… Vuelve su vista al frente y mirando el suelo mueve su linterna para alumbrar la nieve bajo sus pies y detiene su andar cuando nota que justo frente a sus pies, se podían distinguir unas huellas un poco mas pequeñas que las de él, las cuales poco a poco estaban siendo borradas por la blanca nieve que seguía cayendo del cielo… Algo le hace pensar que esas huellas le pertenecen a Aiko, así que acelera el paso y sigue ese camino marcado con esas huellas mientras unos intensos nervios le recorrían el cuerpo… Aun respiraba agitadamente.

A lo lejos logro vislumbrar un rio… Recordando lo que le había dicho su amigo…





-Ahora que recuerdo… No esta muy lejos ese río… -Comenta con seriedad-



-¿Qué río?... –Le dirige su fría mirada-



-El río… En el que encontraste a Aiko, hace años…-Pensaras que es una locura pensar esto… Pero ¿No crees que quizá Aiko fue a ese río?... ¿Qué es lo que te dicen tus corazonadas?...





Deja de recordar para apurar su paso y poder ver ese río que tenia cerca de él…



-Es… Es ese río… No puede ser… -Musita y apresurándose se aproxima mas a ese rio-





Al llegar a la orilla, puede ver que el camino de huellas termina justo ahí… Sus ojos se abren como platos y comienza a temblar al ver el abrigo, gorro, bufanda y guantes que puede identificar que son de Aiko… Rápidamente se acerca y cae de rodillas frente a estas prendas mirándolas con mucho asombro y temor… De inmediato su mente se llena de los peores pensamientos, de lo que le pudo haber ocurrido…

No sabe que hace parte de la ropa que la abrigaba cerca del río…Solo sabe que no se rendirá y seguirá buscándola manteniendo la esperanza de que sigue con vida…





-A-Aiko… -Dice en un tono suave y contiene su llanto, llevando sus temblorosos dedos a esa ropa, tomando el abrigo en sus manos y abrazándolo con angustia al cerrar sus parpados- ¡Aiko! –Exclama al ver el blanco cielo solo haciendo eco y viendo con sus azulados orbes como siguen cayendo esa nieve, sin tener un final-







Se levanta del suelo repleto de nieve, incorporándose con el abrigo en su mano… Agacha su cabeza y se hace una sombra que impide ver sus ojos, aferrando sus dedos al abrigo que sostenía con su mano. El odiaba sentirse así, ese nudo en la garganta vuelve a aparecer, al pensar que quizá ya la perdió… Solo puede verse como una brillosa lagrima se desliza por su mejilla y muerde su labio inferior…



Decide seguir la corriente del río por instinto, caminando por la orilla del mismo… Solo observando el agua correr… Pues cree que quizá Aiko se cayó accidentalmente como aquella vez, pero no seria lógico… Si hubiera sido un accidente… ¿Por qué estaba su ropa cerca del río?... El rubio deduce que quizá en medio de la depresión, Aiko se dejo caer al agua inconsciente de sus acciones… Eso lo llena de rabia, pero ala vez de tristeza, ya que de ser así, había pocas probabilidades de que siguiera viva, sabia que nunca supo nadar y la corriente era fuerte.

Camina mas rápido iluminando con la luz de la linterna y llevando consigo ese abrigo purpura, todo a su alrededor era muy oscuro, apenas podía ver lo que había en el agua.

Seguía buscando en el agua, desde la orilla, de pronto ve algo extraño, parecía una cabeza o una piedra, no logra ver con claridad, así que camina un poco más para estar mas cerca y pasa la luz de su linterna por eso que parecía una “roca”, se detiene y abre notablemente sus parpados con gran asombro, rápidamente su corazón comienza a latir, al no poder creer lo que estaba viendo… Aquello no era una simple roca, se trataba de una cabeza, de alguien, de alguien muy conocida y querida por él, su joya... Era Aiko, sin dudas era ella, totalmente impactado ante el estado en el que se veía su pequeña “hermana”… ahí estaba ella, dentro del agua, contra una piedra, nunca se imagino que la llegaría a encontrar así. Sobre la cabeza de Aiko, se había amontonado la nieve formando como un gorrito… Parecía muerta, lo que le impresiona de sobremanera que sin poder contener mas sus lagrimas, estas llenan sus ojos y caen aun sin que parpadee, se estremece y queda paralizado por lo que veía frente a sus ojos…



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La Escritora Despistada: Holaa :3 ... Respondiendo a uno de los mensajes, lo que menos me gusta de Deidara, es... NADA xD todo en el es amor... lo adoro xD... Y quiero agradecer sus comentarios ^^... En especial a Shula, que me ha estado comentando muchos capitulos de este Fanfic, me alegra que te haya gustado, realmente tus comentarios me complacen mucho, muchas gracias...Y ya me extendi mas de lo que esperaba con este fanfic, espero y no se aburran xDDDDDDDDDD... en fin es todo, GRACIAS por leer ^^...