jueves, 30 de mayo de 2013

Teengears [ Hacía el escondite ]






Capitulo.- 8         –Hacía el escondite–






–Parece que conocen al ser, y saben muy bien lo que esta pasando. –Comentó uno de los investigadores. Rodeado de un equipo de vigilancia en la cámara de capturas de dispositivos.

–Estos chicos si que son curiosos. –Dijo el heredero– Esa chica le hablo al Alien con el nombre Break.

–¿Los alienigenas se comunican con ellos? –Lo volteo a ver otro de los investigadores– ¿Es por eso, que el Haarp no causo efecto en ellos? –Cuestiona con asombro.

–¡Suficiente! ¡Vayan por los tres y llévenlos a la sala de estudios! ¡Rápido! –Ordeno con determinación el heredero.


Tres de los presentes, respondieron con un firme "Si". Yendo hacia donde se encontraban los chicos.

Lea y Seungri, estupefactos al presenciar muy cerca al ser. No hacían mas que mirarlo y esperar lo que sea. A pesar de todo, seguía siendo increíble creer que se tratara de un robot enviado por Break. Siendo la primera ocasión que ven ante ellos a un autentico alienigena. Simplemente no abrieron la boca y se limitaron a esperar. En tanto el ser abre sus brazos y los engancha a los dos, uniéndolos a él, pareciendo un abrazo. Los jóvenes inmóviles y con sus corazones temblando, cerraron sus ojos con algo de inseguridad.

Precisamente en ese momento, el sonido de pasos acercarse, activó los sentidos de los jóvenes y abrieron sus ojos buscando alguna presencia de alguien.


–¡Oigan! –Les grito un investigador acompañado de otro par. Corrían hacia ellos.



En menos de un segundo los chicos junto con el Alíen desaparecen frente a sus ojos con una luz que parpadea. Los tres sujetos se detienen y con sus ojos muy abiertos llenos de impresión y boquiabiertos, quedan sin habla.


Gerard Eastlund, heredero del Haarp. Contemplaba la escena desde la cámara de vigilancia. Y arruga el ceño tratando de encontrar alguna explicación lógica.


–(Definitivamente esos chicos tienen una relación con los alienígenas, ahora entiendo el por que su organismo era mas resistente ¿Serán unos de ellos?... ¡Qué tontería estoy pensando!... Pero, el otro tipo que desapareció antes que ellos ¿Donde está? ¿También se lo llevaron los Alíens? Pero los chicos no parecían asustados, era como si lo conocieran personalmente. Bueno, ya no importa, aunque hubiera estado interesante seguir con los estudios, incluyendo al alienígena...) ¿No hay rastros de ellos, en todo el laboratorio?

–No señor. –Responde un vigilante.

–¿Y en las afueras?

–Tampoco señor.



Solamente se mantiene pensativo acariciando su barbilla, indagando en su mente.

.

.

Adentro de la nave de Break. El robótico alienigena apagado, permanece sentado en el fondo de la nave, recargado en la pared.
Suena la palmada que le estampa Lea a Break en la mejilla.


–¡Idiota! ¡¿Por que te fuiste y nos dejaste solos?! ¡No sabíamos que hacer! –Reclamaba en voz alta la chica– ¡¿Que tal si moríamos?! ¡¿Como pudiste irte tan tranquilamente?!

–Lea... –Interrumpe Seungri, algo asustado– No te enojes, ya estamos bien.

–¡Tú cállate! –Voltea a verlo molesta y cruza sus brazos furiosa.


Break muestra una inborrable y tenue sonrisa.



–Creo que he cometido un par de errores. Primero. Fue mala idea hacerlos caminar tanto, ya que eso les cansó, abriéndoles el apetito, y no venía preparado para algo así. También, no tenia en cuenta que podrían rastrearnos. –Los miraba– Igualmente, se que no debí dejarlos solos, pero no tuve otra opción –Ríe por lo bajo, enganchando su mano a su propia muñeca izquierda– Por todo eso, lo siento... –Baja su mirada asumiéndolo– Lea... –Levanta su mirada– Si lo crees conveniente o necesario, adelante, dame otra de esas –Sonriéndole le pone la mejilla a su alcance.

–No. –Viéndolo con enojo, desvía su mirada indignada.


Seungri al aburrirse se aleja tomando asiento al frente de la nave, dejándolos atrás. Break se endereza y relaja sus facciones.


–Bien, ahora mismo nos dirigimos a la zona marina en donde se esconde la cuidad. Debemos ocultarnos cuanto antes.



La nave al ser tan veloz, se ubica sobre el mar indicado, manteniéndose en el aire.


–Perfecto hemos llegado. –Celebra con una sonrisa Break, caminando hacia donde estaba Seungri.


El joven coreano observaba a través de lo que parecía un vidrio que se extendía a lo amplio del frente de la nave. Podía verse claramente la inmensidad del mar.


–A decir verdad, tengo un poco de miedo... –Con voz débil el joven.

–Tranquilo, no pasará nada, créanme, haya abajo estarán mejor. –Posicionándose a su lado.

–Esta bien –Seungri respira profundamente y cierra sus parpados apretándolos



Lea pone sus ojos en blanco con fatiga y cruzada de brazos mira hacia un lado.

–Break es un loco... –Musita.




La rubia chica de abrigo rosado, aún resentida, prefirió darles la espalda y reflexiva veía sus pies descalzos, para después posar su mirada en el Alíen robótico que se ubicaba por ahí. Break nota la indiferencia de la chica y decide acercarse.


–Cuando volví a mi tiempo, para traer conmigo al robot, recordé su apetito, así que también traje algo de alimento ¿Quieres probarlo?... –Habla a su espalda.



Ganando la atención e interés de Lea. Mientras Seungri quien alcanzo a escuchar, se levanta de un brinco y corre hacia ellos contento y entusiasmado.


–¡¿Comida?! ¡¿Trajiste comida Break?! ¡Genial!

.

.

Lea y Seungri sentados en el suelo de la nave veían con un gesto de extrañeza lo que tenían en sus manos.
Un pequeño sobre que cabía en la palma de sus manos.


–¿Esto es comida? –Lo mira interrogante Seungri– Yo esperaba, fresas o una pizza –Mirando el sobre decepcionado.

–¿De que estas hablando Seungri? –Pregunta Break– Esto es nutritivo. Los niños de su edad deben nutrirse bien.



La chica alza el sobre donde pudiera verlo y lo sacude alzando una ceja.


–¿Esto que es?

–Eso que tienen en sus manos, es comida muy saludable, contiene gran parte de vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos y las mejores propiedades naturales. Es lo que yo y mi equipo comemos de vez en cuando. Es muy practico. –Sonríe.

–Suena delicioso –Dice con sarcasmo Lea.

–¿Esto se puede comer? –Cuestiona Seungri.

–Pero por supuesto –Le quita el sobre a Seungri y lo abre vaciando su contenido dentro de un vaso especial y lo agita enérgicamente, entregándoselo abierto con un cucharón a la medida– Adelante pruébalo–Sonríe leve para darle confianza.


Cuando el chico ve el interior del vaso descubre que es muy similar al yogur natural.


–Esto es solo yogur –Dice el chico llevando un poco a su boca.

–No contiene lácteos. –Comenta Break.


Los ojos rasgados del joven se abren lo mas que pueden, y sonriendo gustoso. Continua comiendo muy deprisa con algo de desesperación y deleite.


–¡Es delicioso!


Lea muy sorprendida se anima a tomar el otro vaso, haciendo exactamente lo mismo que Break mientras este sonríe complacido.

.

.

Saciaron totalmente su hambruna con la anormal comida que les brindo Break. Se sentían con más energía y animo.
De esa forma la nave de Break se dejo caer al océano sin causar vibración alguna dentro de la nave. Descendió en el agua hacia las profundidades, viéndose el panorama marino cada vez más oscuro. En la nave, la iluminación interna se activa, al ya no recibir la energía de luz lunar. Los jóvenes fascinados admiraban el exterior a través del cristal del frente de la nave. Al principio no encontraron señales de vida marina. Pero después presenciaron el paso de un calamar gigantesco, el mas grande que pudieron imaginar. Sus largos y espectaculares tentáculos rosaron el exterior de la nave al pasar, lo que provoco un escalofrío a los chicos.


–¡Ah, que miedo! –Exclamo Seungri abrazándose así mismo.

–Tranquilos no pasa nada... –Hablo relajado Break.

–¿A donde exactamente nos dirigimos? –Pregunto Lea a Break por un manojo de nervios.

–A lo más hondo donde ni siquiera en este año donde ustedes viven. Ha logrado llegar el hombre, es por eso que vivirán ahí. No se preocupen, la presión no nos afectara en lo mas mínimo, esta nave al igual que la cuidad, están bien preparadas. Ustedes, solo disfruten el paisaje. –Clava su mirada en el exterior.

–Pero, no hay peces, ni arrecifes o algo llamativo, solo hay oscuridad –Hablo Seungri sin dejar de ver a través del cristal.

–Es verdad –Afirma Break– Por que, todavía no llegamos a lo desconocido, a lo mas bajo y profundo del océano, esperen y verán. –Le dedica una sonrisa a Lea.

.

.

Sumergiéndose en lo más hondo. Un paisaje marino, mas que maravilloso se puede ver ante sus ojos. Grandes rocas marinas que se alzaban, cubiertas en una clase de flora que brillaba a colores cambiantes, alumbrando la oscuridad del mar. Algo parecido a los arrecifes de coral pero más enorme y lleno de colores brillantes, junto con gigantes peces monstruosos que también emitían luz colorida de sus cuerpos.


–¡Oh! ¡Increíble! –Vocifero Seungri poniendo su cuerpo contra el vidrio.


Lea también se acerca y apoya sus manos en el cristal paseando su mirada a lo que alcanzaba a ver con una ligera sonrisa. Sus orbes azulados captan la presencia de una silueta negra de lo que parecía ser una "Sirena", que en segundos se oculta detrás de una roca.


–¡Un momento! –Grita Lea de repente.

–¿Qué sucede Lea? –Le presta atención Break.

–Lo que estaba por haya –Lo señala con su dedo– Estoy segura que era una sirena, o tal vez ya estoy delirando –Avergonzada se aparta del cristal.

–¿Qué? ¿Sirena? –Seungri no deja de ver afuera– Yo no veo mas que peces coloridos. ¡Oh mira ese!

–Quizá fue tu imaginación Lea –Sugiere Break detrás de ellos.

–Si, tal vez –En un murmullo mira de nuevo el paisaje.

.

.

Poco a poco la cuidad  que habían construido Break y su equipo para la gente rescatada se deja ver. Era como una cuidad moderna muy iluminada por luces artificiales. Lo único que la diferenciaba era que no tenia calles ni avenidas, tan solo se podían ver los imponentes edificios de techos curvados.
La nave de Break termina su viaje y se posiciona sobre uno de los altos edificios por donde una parte circular del tamaño de la nave se abre dejando entrar al objeto en forma de platillo con todo y agua salada. Posteriormente este techo se cierra y el agua que entro con la nave se desintegra convirtiéndose en oxigeno.
Una pared adentro de la nave hace una apertura permitiéndoles salir. Admirando su alrededor, del que seria su hogar. Era solo una de las tantas habitaciones que formaban el edificio. Estaba vacía, sin ventanas, las paredes y suelo eran grises. Viéndose dentro de un extenso espacio vacío. Break se percata de lo inmutables que se muestran.


–Esto solo es el lugar de salida y entrada de la nave. –Informo– Aún tienen mucho que conocer. Empezando por sus dormitorios –Los visualiza– Quisimos elaborar todo muy similar a su estilo de vida, tanto las instalaciones como la comida, todo es igual a lo que ustedes ya conocen, ya no los sorprenderé con alguna rareza, o algo decepcionante. –Ríe suavemente– Vamos siganme... –Da unos pasos adelantándose.

–¿Y que pasa con el robot? –Pregunto Seungri al seguirle el paso.



Break detiene su andar y se gira a verlos detenidamente.


–Esta apagado. No pasa nada –Mira hacia arriba– Ahora que lo recuerdo, es verdad, esto es muy importante –Con voz baja.

–¿Qué quieres decir? –Inquiere Lea curiosa.

–Cuando regrese a mi tiempo y observe a mis diez Alienígenas roboticos ordenados. Algo se me vino a la mente, una gran idea, que, probablemente, lleve su tiempo.



Los jóvenes enfocan su atención en él.


–Yo los construí para vigilar a la humanidad de diferentes tiempos. Si los mejoro y hago algunos cambios, posiblemente puedan servir para la batalla. Las palabras que dijeron aquella vez las tuve muy presentes...



–¡¿Qué?! ¡¿Que le hace pensar que yo y Seungri podremos contra todo un ejercito?! –Claramente molesta.



El joven coreano solo se le escapa una risa escandalosa, volviendo a llevar un cigarrillo encendido a sus labios.


–Esto debe ser una broma –Murmura el joven con una sonrisa burlesca dejando salir el humo de sus labios.


–Aunque no lo crean, ustedes tienen más resistencia gracias a la onda de protección , solo necesitan entrenamiento –Despreocupado y sonando muy seguro sonríe.


–¡¿Qué lo hace estar tan seguro?! –Furiosa Lea.


–¿Por qué no envía un ejercito del futuro? No tiene sentido. –Dice el chico con esa sonrisa y el cigarro entre sus dedos.







–¿Como no se me ocurrió antes? Yo no puedo interponerme, por que, si lo hago así, al usar mi armamento sofisticado y actual, sospecharían de inmediato y eso es peligroso para mi existencia. Pero si utilizamos mis diez Aliens robóticos quizá pueda servir de mucho. Lea tiene razón –La observa con seriedad– Es imposible que solo ustedes dos logren ganar una guerra, aparte de que les faltan agallas. Necesitan apoyo, yo les ayudaré de esa manera... –Exhibe una sonrisa casi imperceptible.

–(¿Que nos faltan agallas? Tch... ) –Pensó sintiéndose ofendida Lea– En ese caso con los robots basta –Comenta Lea sacudiendo una pelusa de su abrigo rosa– Nosotros no tenemos por que arriesgarnos –Mirándolo directamente– ¿Por qué nos arriesgaremos si ni usted va a hacerlo?



Seungri asiente suavemente con su cabeza viéndolo y después mira a otro lado intimidado.


–¿No quieren hacerlo? ¿Entonces que piensan hacer para sobrevivir? Haya afuera es un caos total, podrán morir fácilmente. Esta cuidad, fue creada para valientes guerreros, que deben ser entrenados, no para cobardes.

–¡¿Cobardes?! ¡¿Y tú que eres?! –Grita Lea con el entrecejo fruncido– ¡¿Crees que somos cobardes?! ¡Yo solo tengo dieciséis años! ¡Y Seungri veinte! ¡Tenemos toda una vida por delante!

–¿Qué vida? –Pregunto secamente Break con su semblante serio– Haya arriba. En la superficie... ¡No existe eso llamado vida! Solo hay muerte, y en pocos días existirá un control total –Con voz elevada y firme– Un solo gobierno, global, ni siquiera habrá libertad, solo algo parecido a la esclavitud ¡¿Crees que eso es vida?! –La encara con una mirada intensa– Todos serán programados a obedecer... ¡Su familia, sus amigos nada de eso existe ya! Así es mi mundo, yo he venido para ayudarlos a ustedes, para que su futuro no sea como el mio. Mi tiempo esta perdido, ya no puede alterarse, pero el suyo aún esta a tiempo. –Apoya suavemente su mano sobre el hombro de Lea.


Una pequeña lágrima se escapa del ojo de la chica y evita el verlo fijamente, conteniendo sus ganas de llorar. Seungri se aproxima a ella, tocando su mano que ella al instante aleja.

–¿Por qué tengo que hacerlo?... –Con voz ahogada– ¿Por que yo?

–No tienes que hacerlo Lea –Le habla suavemente Seungri casi a su oído– S-Si quieres, so-solo lo haré yo. Después de todo yo soy hombre y soy mayor. –Suspira y mira abajo.



Break miraba a Lea esperando escuchar sus palabras. La hermosa chica muerde su labio inferior y una lágrima más cae lentamente.

.

.

.

.

.

.

.

Que feo :´C..... Gracias por leer, no olviden dejarme su comentario ^^

martes, 28 de mayo de 2013

Desde los ojos de un Gato ( Relato )
















Me esfuerzo en ver claramente, pero solo veo luz a medias. Algo que me ardió y entro en mi ojo izquierdo no me deja abrirlo. Aun así sigo arrastrándome buscando a Mamá.
No se como sucedió, pero de pronto fui desprendido de ella cuando me alimentaba.

Tengo frío y también hambre. Solo quiero volver con Mamá ¿En donde estará? ¿Por qué se aparto de mi?.

Hay mucho ruido a mi alrededor, tengo miedo. Intento ir más rápido y mas lejos, tratando a duras penas de emitir sonidos guturales, en vano. Mantengo la esperanza de que Mamá venga por mí.

De repente cuando me detuve para descansar, percibí un pelaje y un olor que no me era familiar. Otra vez tuve miedo, quise escapar rápidamente, pasando por la hierva, alcanzando a ver con mi único ojo que podía abrir. Un espacio oscuro donde podría ocultarme. Fácilmente me escondí ahí, al sentir tranquilidad y seguridad poco a poco todo lo vi oscuro.

Algo muy grande y desconocido me elevo muy alto y me envolvió con un pelaje sin olor y mas áspero, el cual me proporcionaba calor. Tenia algo de temor, por eso no abrí ese único ojo, hasta que probé alimento, era tan cálido, igual al de Mamá. Desesperadamente trague ese liquido, aunque era diferente, podía sentir esa envolvente calidez ¿Eres tu Mama?... ¿Mamá ha vuelto por mi?.




De vez en cuando escuchaba sonidos, mucho ruido, como si algunos igual a Mamá pasaran cerca y me asecharan, eso me hacia estremecer. Aumentaba el miedo cuando algo gigante me rozaba, pero no parecía peligroso.

Algo empapo con tibieza mi ojo que dolía y no podía despegar. Viéndome posteriormente en algo  esponjoso y suave donde podía descansar.

Sentí esa misma humedad en mi ojo cerrado un par de veces, hasta que finalmente el dolor desapareció y logre separar ese lado y con claridad pude ver a Mamá. Ella me sostenía y me veía fijamente, sus ojos eran muy grandes. Nunca imagine que Mamá fuera tan enorme e irradiara tanta luz. Lleve mi patita hacia sus ojos lentamente pero ella emitió un sonido extraño y me movió a un lado, apretándome ligeramente.
Me siento tan contento de tener a Mamá de nuevo conmigo, ya no tengo frío, ni hambre, tampoco miedo, mi ojo ya no arde. Mi Mamá vino por mi.


Tiempo después.

– ¡Dante!


Así me llamaba Mamá y toda mi familia. Yo solo los veo, aveces me acerco, solo cuando quiero. ¿Por qué no puedo ser tan grande como ellos? Siempre se inclinan para verme, saludarme o tocarme. Los quiero, pero de vez en cuando, necesito mi espacio así que me brinco la barda de casa y me voy a explorar los alrededores. Fuera y dentro de casa, soy el líder de mi manada, debo atender a ambas. La única diferencia es que, los de afuera están a mi altura y no son tan empalagosos, incluso, creo que se parecen un poco mas a mi.
En las noches yo y mi enemigo peleamos en la calle. Cuando se vuelve a ver la luz, Mamá preocupada al ver mis heridas, otra vez trae sus cosas raras y trata de curarme, luego me da agua. Siempre ha sido así de exagerada, con mi lengua basta. Continuamente me quita hasta el mas mínimo dolor, así ha sido perpetuamente.

Por las mañanas me gusta salir a ver a la amiga de Mamá, que es igual de gigante que ella. No se que tanto es lo que hace con las plantas y hiervas del jardín que da a la calle, pero es muy hermosa, siempre me habla, aunque no pueda responderle como quisiera. Solamente puedo mirarla.

Odio cuando ella me grita, diciéndome que vuelva con ella, cada que cruzo la calle ¿Cual es el problema? Todas las noches lo hago y no pasa nada. Todo mundo es tan exagerado.


Como es casual, Mamá juega conmigo, mostrándome colores y cosas muy llamativas que se mueven captando mi atención, no puedo evitar tratar de atraparlas o quitárselas, aunque ella me siga hablando y tratando como a un bebé. ¿Que no entiende que somos iguales? La única diferencia es el tamaño, eso es todo.
Se que es mi Mamá, pero aveces no me gusta su olor, es por eso que limpio su piel, para compartir mi olor con ella.




Hoy esta muy rara, me cargo como siempre y hacia un ruido extraño, me miraba diferente y después empezó a salir agua de sus ojos ¿Que le sucede?. No sabia que hacer, pero veía que esa agua le molestaba, ya que insistentemente la limpiaba con sus manos. Intente ayudarla viéndola directamente, pude ver como seguía saliendo esa agua y me acerque a limpiarla con mi lengua. Poniendo mi pata delantera en su cara, como tratando de preguntarle y hablarle, pero no puedo hacerlo como ella. No se que tiene ni que hice pero, después dejo de hacer ese sonido extraño y me  apretó con sus brazos. Yo quería hacer lo mismo pero, no soy tan grande como Mamá. Odio eso, solo puedo dejar que lo haga.


Desde muy temprano, aproveche que Mamá seguía dormida, para salir a ver a su amiga. Ella despertaba casi a la misma hora que yo y siempre iba al jardín que daba a la calle para mojar con agua las plantas y cortarlas. Yo disfrutaba verla, era muy entretenido, aveces sentía ganas de hacer lo que hacia ella, y el resto de mi familia pero por mas que lo intentara era imposible.
El viento que pasaba moviendo esos hilos largos de su cabeza al igual que las hiervas de su alrededor era divinamente precioso. De nuevo volvió a mi esa tentación, ese deseo, de cruzar la calle, siempre he tenido la curiosidad de ¿Que hay al otro lado? Cuando hay luz, ¿Por qué me lo prohíben?.
Espere a que la amiga de Mamá entrara a casa para aproximarme y atravesar la calle, estaba tan sorprendido de haber logrado cruzarla que me quede en el otro lado admirando mi casa desde ahí, justo como lo hacia todas las noches. No note mucha diferencia, era exactamente lo mismo.


Escuche mucho ruido y voltee a ver que era. Parecía una caja enorme que se movía y venia hacia mi. Alcance a oír la voz de la amiga de Mamá.



– ¡Dante! ¡Ven! ¡Ven Dante!


Me apure a ir hacia ella, pero esa ruidosa caja me empujo y aplasto con un gigantesco peso, escuchando el crujir de mi interior, acompañado de un intenso dolor insoportable. Esa gran caja paso de mi. Por eso odio ser pequeño. Dolía tanto, pero no podía emitir sonidos –Es mudo– Para que Mamá me escuchará. Me era imposible moverme. Necesito a Mamá, ella que siempre me quita todo dolor, toda incomodidad.
Algo colorido salio de mis cavidades, no podía respirar, se me dificultaba hacerlo cada vez mas. Mis ojos se cerraban pero nuevamente algo me elevo. Y hacia un ruido extraño, parecido al que emitía Mamá aquel día. Pero ella no es Mamá, olía a su amiga, ella me hablaba como siempre. Quiero ir con Mamá pero no puedo moverme. ¡Déjame! ¡Tengo que ir con ella, ella me quitara este dolor!.


Mis ojos estaban por cerrarse completamente, por mas que hiciera un esfuerzo no podía mantenerlos muy abiertos. Estando en los brazos de la amiga de Mamá que hacia mucho ruido, a ella le pasaba lo mismo que le paso a Mamá, brotaban gotas de agua de sus ojos, pero no puedo apretarla, mi cuerpo no responde, mi respiración es lenta. El dolor era grande y permanecía, no se iba. Afortunadamente escuche la voz de Mamá.

– ¡Dante!

Me llamaba de nuevo, aunque sonaba diferente, pude estar tranquilo. Estoy con Mamá. Cerré mis ojos. Confió en que Mamá me quitara este dolor.

Y así fue. Pude descansar una vez más, tranquilamente.











........................Dedicado a mi Gato Dante, esa alma sensitiva que tanto ame :´)... Espérame. 






viernes, 24 de mayo de 2013

Saranghae Oppa! [ Colérica antes que llorona ]







Capitulo.- 32    – Colérica antes que llorona –





Con algo de inquietud y asombro. El joven líder esperaba una confirmación de parte de Dara. Todavía puede confiar en ella. Gdragon ignoraba que Dara era cómplice de CL.
Todo esta puesto a favor de la chica atacada por la fiereza de Cat. Tal y como se puede ver claramente en las señales que dejo en la piel de su rostro.


– ¡Claro que fue ella quien me hizo esto! ¡Y no es la primera vez! –Grito con fingido sufrimiento, observando al chico.

– ¡¿Por qué Cat haría algo así?! –Sonando incrédulo y alterado mira a Dara.

– ¡No te hagas el tonto, Ji! ¡Tú más que nadie, conoce el temperamento de Cat! ¡Pero aveces por cualquier pequeñez me ataca así! ¡Debería controlarse! Yo soy una celebridad, valgo mas que ella. –Gesticula un puchero y abraza al presidente– ¡Appa YG me duele la cara!


El CEO le corresponde preocupado y Gdragon se siente ofendido ante las palabras de la chica. ¿Cómo puede decir que ella vale más que Cat?. Solo por ser famosa.

– ¡¿Eso crees?! ¡¿Que tu rostro con cirugías y múltiples capas de maquillaje vale más que mi chica?! ¡Tú no vales más que ella! Por que ella si es bonita, y una gran mujer.


Dara y Yang permanecen abrazados viéndolo con suma impresión. Indudablemente, era la primera ocasión que escuchaban esa clase de palabras salir de los labios del chico en defensa de una novia.


– Tienes razón –Continua el chico con un rostro grave– Conozco muy bien a Cat, por eso, se que ella no reaccionaria así por nada –Entrecierra sus ojos– No me digas que tú... ¡Eres igual que Chaerin! –La señala con amenaza.


Dara era mala para la actuación, incluso más que CL por lo que es de lo mas obvia.


– A ver ¡Para ya Ji yong! –Interfiere el presidente manteniéndose unido a la chica– Sea como sea, algo es cierto y es que Cat acaba de lastimar a Sandara y eso no esta bien. –Separándose de ella para verlo directamente– Te he dado la libertad para que te unas en matrimonio con esa chica si así lo deseas, pero, no puedes traerla cada que te plazca a las instalaciones de YG ¿Entendido?



Gdragon desvía su mirada muy disgustado, lastimándole profundamente en el orgullo. A decir verdad, ya hacia tiempo desde la ultima vez que el presidente le hablaba en ese tono de voz y de esa manera. Fue exactamente antes del debut.
Yang voltea a ver a Dara cambiando su rostro a uno mas relajado.


– Dame cinco minutos Sandara. Hablaré con Jiyong...

– De acuerdo –En una leve reverencia camina cruzando la puerta para salir.


Ahora en la oficina del CEO, solo quedan ellos cara a cara. Para el presidente esto parecía mas bien un juego de niños, y algo insignificante, pero para el chico era mas que importante, ya que se trataba de su novia. No podía permitir que le restara más el tiempo que puede pasar con ella.


– Cat es mi asistente personal, ella debe ir conmigo a todas partes. Así debe de ser.

– No a todas partes, recuerda que frente a las cámaras no puede mostrarse, lo arruinaría todo.

– Lo sé... –Mira abajo con un amargo sabor de boca.

– Sabes que no me importa si es tu pareja, incluso no me importaba si venia al edificio contigo. Pero ha sobrepasado los limites. Molesta a Sandara de hecho hasta la ha golpeado en varias ocasiones según ella ¿Sabes que esa acción de tu novia, puede ocasionarte problemas? Agradece que Sandara es muy dulce y amable, y no la ha demandado. ¿Quieres que me quede con los brazos cruzados, esperando a que lastime a otro miembro de la familia YG?

– No me interesa. Cat vendrá conmigo a YG sea como sea... –Aplicando énfasis a sus palabras– No quiero apartarla de mi, suficiente tengo con no poderla llevar a todos lados, por culpa de los medios. –Alza su mirada para ver sus ojos– Suficiente la escondo ya.

– No quería llegar a esto pero. Si no obedeces te restare la cantidad de ganancias que recibes.

– Hágalo. No me importa el dinero. –Sonando seguro.


El CEO perplejo y boquiabierta al escuchar sus palabras. Lo mira. Sin poder reconocer a la persona que tenia al frente. ¿De verdad este chico es el autentico Gdragon? ¿Desde cuando a este ambicioso muchacho no le interesa el dinero?. Y el que creía que le estaba dando donde más le duele. Esperaba un reclamo de su parte.

.

.

Un taxi se estaciona cerca de la mansión donde estaban viviendo los cinco "Bangs". Bajando Cat con el ceño permanentemente arrugado, si que estaba furiosa. Su pecho, corazón, sangre, todo en ella ardía. Resultado de haber visto aquella escena que le retorció las entrañas y sacudió sus emociones a tal grado que las lágrimas amenazaban con salir, pero no pensaba llorar como una tonta. Así que esa tristeza la ahogaba en un profundo enojo.
Su corazón pedía a gritos una explicación, pero por el momento, no desea verlo, solo estar sola.

Aunque quisiera ir a otro lugar o hablar con su hermana mayor, no podía hacerlo, ella la había abandonado y el departamento lo habían dejado. Aparte no conocía a nadie más. Esta vez, si que esta completamente sola. No tenia a donde huir. Solo le quedaba esperar en la mansión de los chicos hasta que se dignara a hablar con Gdragon. Probablemente hasta que anochezca.

Top era el único que se encontraba en casa en ese instante. Siendo dulcemente acompañado por su novia Bom. La pareja disfrutaba una magnifica tarde, de su limitado descanso, para beber un poco de vino fino, en la sala principal, muy juntitos.


– Ah... Que horror –Habla Bom con voz decaída– Entonces en ese lapso de tiempo ¿Ya no podremos vernos?

– Sería imposible... –Contesta pasando su brazo por sus hombros y degusta el vino– Créeme que si fuera por mi, me gustaría estar contigo todo el tiempo, pero trabajo es trabajo y aunque no quiera, pronto iniciare con la filmación de la película y con Bigbang se viene una gira mundial muy pronto. Estaré bastante atareado. –La mira a los ojos muy de cerca a su faz– Pero no quiero perder por completo la comunicación entre nosotros. Nos mantendremos en contacto por el móvil  cada que podamos ¿Verdad?.

– Ay, no será igual y te extrañare mucho –Baja su mirada un tanto angustiada– Pero es inevitable, así que te deseo lo mejor, ya lo sabes –Exhibe una encantadora sonrisa.


Uniéndose en un beso prolongado. Se escucha el fuerte taconeo de Cat. Pisaba sonoramente por su coraje, como descargando toda esa furia que sentía en su interior.
Ruido que interrumpe el gesto amoroso de la pareja y los obliga a voltear. Viendo a Cat pasar cerca de ahí, dirigiéndose a las escaleras.


– ¡Hey! ¡Cat! –La llama Top con una sonrisa.


Bom se aleja de Top sentándose apropiadamente.
La furiosa chica hace caso omiso a su llamado, continuando su camino sin parar.


– Tal vez no te escucho –Excusa Bom tocando la mano de su novio, sonriendo ligeramente.

– No, se veía enojada ¿Por qué no regreso con Jiyong? –Mira a Bom– Espérame un momento, iré a ver que ha sucedido.

– Si...


Se despiden con un beso fugaz.

.

.

Después de todo, Cat no estaba tan sola, todavía contaba con la amistad incondicional del mayor del grupo. El les había prometido a Luna y Cat, que podían confiar en él, y que sería su amigo. Por eso Top con toda confianza, llegó hasta la puerta de la habitación del líder  Era muy obvio que la chica, estaba adentro.



– ¡Cat!... –Le da tres golpecitos a la madera– ¡¿Cat te sientes bien?!


No obtiene respuesta.

En un suspiro, el chico sigue insistente, golpeando la puerta, como si tuviera que rescatarla de ahí dentro.


– ¡Cat! ¡Por favor respondeme!



Enseguida la puerta se abre de golpe y Cat lo mira fijamente con una expresión severa.


– ¡¿Qué quieres?! –Exclama irritada.



Top se sobresalta al oírla y evita verla directamente a los ojos, con una pizca de nervios.


– Yo... Yo solo quería saber si

– ¡Es obvio que no estoy bien! ¡No es como si estuviera muriendo! ¡Ahora vete y déjame en paz! –Le cierra la puerta en sus narices.

– (Ah... Muy bien, así es ella, es mejor dejarla sola ) –Pensó antes de irse.

.

.

La carcajada del presidente Yang resuena en su oficina. Sonriendo burlesco lo mira a los ojos.

– Ji, tal vez no haz escuchado bien, dije...

– ¡Escuché perfectamente! –Elevando el tono– Haga lo que quiera. Ya lo he dicho, no me interesa el dinero. ¿Qué más puede hacer? ¿Echarme de la compañía?. Hay un contrato de por medio ¿Acaso lo olvida?... Usted no tiene un mayor poder sobre mi. No me puede prohibir hacer música, y mucho menos amar a Cat.



Dicho lo ultimo, el chico da media vuelta para marcharse, teniendo a Cat en la cabeza, se preguntaba ¿Donde podría estar?.

Todavía guarda ese desprecio creciente hacia Kiko, ahora más que nunca siente el deseo de matarla, pero claro que no sería capaz, tan solo era el fruto de ese odio y rencor que se alojaba muy dentro.

¿Como pudo ser tan estúpido? De haber caído en las redes sentimentales al recordar el antaño, cuando Kiko le hablo. Y esta arpía se atrevió a realizar ese asqueroso acto que sin duda a lastimado a su frágil mariposa, que no hizo mas que volar lejos de él.
La busca por todo YG sin obtener éxito  Le llama al celular y justo como lo esperaba no responde.  Ahora ella es lo que más le preocupa, pero por más que anhele encontrarla y aclarar las cosas. Debe empezar su trabajo, razón por la que fue a YG.

.

.

Armado de paciencia. Taeyang aguarda el día en que viajará a Canadá en busca de Luna. Aún no cuenta con tiempo disponible para ir.

Espera que la dirección que le dio Osiel sea correcta. Es como un tonto enamorado que deposita toda su esperanza en lo que le indico Osiel, que mantenía grabado en la memoria de su móvil.

Tranquilamente conducía su auto mientras escuchaba aquella canción con la que se confeso –You are my/Taeyang–. Inconscientemente, una sonrisa aparece al recordar ese momento.





–Luna, quiero que lo tomes con calma –Con voz suave– No quiero presionarte, ni ser acelerado, nos ha costado llegar a esto ¿No es así? –Sonríe ligeramente– Entenderé sea cual sea tu decisión.

–¿Decisión? –Lo mira con timidez y confusión.

– Así es –Se le escapa una leve risa– Sabes que quiero... Que tú y yo, estemos juntos siempre... Dime ¿Me aceptarías?  – Viéndola con anhelo.


Luna alza su mirada a sus ojos y sonriendole asiente suavemente con su cabeza. Taeyang ensancha su sonrisa y humedece sus labios para abrazarla y besarla suavemente pegándola contra su cuerpo.





La canción termina. Acerca su mano al reproductor para repetirla, pero se detiene pensando en el fondo.


– (Es verdad ¿Iré solo a Canadá?... No sería buena idea... Necesito acompañarme de alguien) –Mira al frente volviendo ambas manos al volante(Jiyong, aunque es mi amigo, el esta bastante ocupado y esos tres días que tendremos libres, seguramente los aprovechara para pasarlos con su novia... Seungri, no, el no... ¿Hyung? No, el estará con Bom....) –Sonríe y coge su celular eligiendo un numero, acto seguido coloca el móvil contra su oreja– Hola, Mina Nonna... –Con tono alegre.

.

.

Del otro lado del mundo. El reloj en la oscura habitación de Luna, marca las dos de la mañana y ella se revuelca entre el cobertor, incapaz de dormir. No era la primera vez, así había pasado la noche, desde que regreso a su país. Eran tantos recuerdos los que venían a su mente. Su hermana, amigos y el que mas destacaba. Taeyang.
Extrañaba todo ¿Será que se había acostumbrado? O realmente echa de menos a ese chico coreano y a su hermana.

Con sus ojos abiertos mirando el techo. Como cada noche los mismos pensamientos vuelven.


– (¿Por qué soy así?... ¿Por qué no puedo ser más fuerte? ¿De que sirve estar aquí? Estoy más sola que nunca. Soy una verdadera tonta. Siento que estando tan, tan lejos de él, soy más débil. Mi vida ahora es muy vacía )Una pequeña lágrima se desborda( Por más que desee volver corriendo, disculparme y abrazarlo eternamente. No puedo, eso ya lo he dejado atrás. ¿Es demasiado tarde? ) – Toma una postura de lado, y sus orbes esmeralda brillan– (No tengo dinero, ni el apoyo de nadie, ni siquiera el de mis padres ¿Qué puedo hacer? Me he arrepentido. Debí hablar con él.) –Cierra sus parpados brotando un par de lágrimas.



Su inspiración, al igual que ella, había decaído. Le es imposible escribir poemas. Ni siquiera es capaz de hacer lo que mas le gusta. Sabe que es una tonta por creer que CL estaba saliendo con Taeyang. El no es así. Además ¿CL?. Taeyang ya sabia como es ella en realidad.

Como siempre, se había dejado llevar por sus impulsos emocionales y ahora se encuentra atrapada en la abrumación, envuelta en frustración. Todo por un grave error.

.

.

Dos copas de champagne chocan en un elegante bar, a plena luz del día. Kiko y CL se miran con una satisfactoria sonrisa que comparten. Asentadas en un cómodo sofá color vino.


– Vaya Kiko, eres grandiosa. Estas haciéndolo muy bien, incluso eres mejor que Dara. Ella solo es infantil –Lleva la copa a sus labios.

– ¿Yo? ¿Que hay de ti? Haz hecho que la tal Luna regrese a su país, con solo una simple llamada. –Ríe entre dientes sosteniendo la copa con clase.

– Es verdad, soy genial ¿Verdad? –Ríe a carcajadas–  Oye... – Mira a sus lados–  Hablando de Dara ¿No crees que ya tardo?

– Déjala .. – Mira su copa–  Seguro esta aprovechando la situación y esta con Ji, en este momento. –Con un semblante serio.

– Oh... – Cubre sus labios–  Lo siento Kiko. Tú aún lo amas ¿Cierto?.


A Kiko se le escapa una risa burlona.


– ¿De que estas hablando? Desde luego que no. Solo quiero vengarme y hacerle su vida miserable. Créeme  apenas voy empezando –La observa con una sonrisa, en tanto acaricia su vientre.



Era ligeramente notable, pero ella estaba vestida de modo que no se notara tanto, no faltaba mucho para usar "eso" a su favor.


– ¡Ah! ¡Piensas igual que yo! ¡Esa es la actitud amiga! –Ríe sonoramente.

–  (Si claro, amiga...) –Piensa sarcástica solo mirando la copa sin probar ni una pizca.

– Oye ¿No conoces algún diseñador importante que pueda regalarme alguno de sus mejores diseños? –La mira con interés.

.

.
El CEO le había pedido a Gdragon que le diera unos cuantos consejos y hablara con la nueva trainee, Lee Hi. En ese instante Dara entra con una enorme y exagerada sonrisa, fingiendo una vez más ser tierna y linda. Sosteniendo en sus manos un chocolate caliente.



– Hola Ji yong –Con un tono dulce– Oh. ¡Veo que estás ocupado! ¡Bueno, te dejo aquí el chocolate! –Manteniendo ese falso gesto en su rostro.



La trainee y Gdragon la observan sin inmutarse.


– Yo no te pedí que trajeras algo. Llevatelo, no lo quiero –Sonando molesto aparta su mirada de ella.

– ¿Te sientes bien? Se nota que estas muy cansado –Hablaba Dara– Por eso te traje el chocolate, te sentirás mejor si lo pruebas ¿Te gusta el chocolate cierto?–Emite una risita.

– Cállate y déjame solo. –Seco y cortante pone atención a unos papeles que tenia en sus manos.



Lee Hi continua sin mostrar ninguna expresión,  manteniendo su compostura, espera la siguiente indicasion de Gdragon.

Sin mas Dara se resigna y sale llevando consigo el chocolate.

.

.

Cansado, cabizbajo y estresado. Así es como llegó Gdragon pasando de las diez de la noche a casa. De pronto al lograr vaciar su mente el recuerdo de Cat, regresa lo que le provoca un sobresalto y corre hacia su habitación a toda prisa.

Encontrando la puerta abierta, se adentra y levanta su vista, pudiendo ver ante sus ojos a su novia con una femenina pijama que dejaba ver sus largas piernas. Francia el ceño y sostenía su bate alzándolo lentamente.



–Cat... –Pronuncia en voz baja y estático con sus ojos como platos la observa.

– Jiyong... –Masculla levantando con amenaza ese bate metálico.

.

.

.

.

.

.

.

Desgraciadamente, mi PC esta en reparación todavía y no se cuando la tenga de vuelta conmigo. En este momento estoy en una PC mas viejita y aqui no tengo programas, ni imagenes nada. Por eso no pude hacer la imagen de este capitulo T_T Que horror. Pero no puedo dejar pasar un dia más, el capitulo ya esta listo asi que quedo debiendoles la imagen de este cap u.u ... Espero no les importe :) GRACIAS POR LEER



viernes, 17 de mayo de 2013

Teengears [ Sin salida ]





Capitulo.- 7          – Sin salida –







¿A donde habrá ido tan rápido?. Era lo que se preguntaba el soldado estadounidense de rubios cabellos. Estaba alterado y bastante impresionado, buscando sin cesar por los alrededores al fugitivo tal y como le había pedido Alexa.

Sin más se detuvo a revisar en el tipo de radar que traía, el cual le había mostrado la ubicación de los tres objetivos. No logrando comprender ¿Como es que aquel sujeto se esfumo?


– (Imposible...) –Sus parpados se abrieron totalmente. Con cierta incredulidad. 



Había desaparecido o eso parecía. Empezó a pensar que probablemente su radar andaba fallando pero lo curioso del caso es que el radio le mostraba la ubicación de los dos chicos capturados pero el rastro del hombre increíblemente no aparecía. ¿Como es eso posible?. Evidentemente tenia que continuar con su búsqueda sin apoyo de su radar. No piensa rendirse. El sin duda va a encontrarlo, por que esto debe ser una broma o algo por el estilo. 


– (Si que es un tipo con suerte eh... El radar no me da su posición, pero yo lo descubriré...) –Persistente y determinado sigue buscando. 

.

.

La nieve se hizo presente en plena luz del día, en donde las bases encubiertas del Haarp se habían colocado hace tiempo. Aquellos copos blancos que caían suavemente encima de la enorme construcción metálica. Decoraban una vez más el albo ambiente, que reinaba no solo en Alaska, si no, en todo el globo. 

Entretanto los jóvenes estaban siendo empujados a la puerta. Indefensos y débiles ante la situación. 


– ¡Rápido entren! –Les impulsa con sus manos obligándolos a entrar en el laboratorio.



Para Lea era una gran humillación, jamas había sido sometida a algo parecido. Claramente esta soldada casi los trataba como unos criminales. Estaba a una pizca de perder el control y hacerse contra ella. Pondría en practica su habilidad de lucha cuerpo a cuerpo. Sin embargo hacia un gigantesco esfuerzo para mantener su compostura, lógicamente no le conviene enfrentarse contra una mujer armada, ni siquiera oponer resistencia. 
Seungri solo clavaba su vista en el suelo muy asustado, sintiéndose desprotegido y nervioso. Los dos desconocían lo que estos estadounidenses planeaban hacer con ellos. 

En el interior del laboratorio había mucha luz blanca, el suelo es tan lustroso que figura un espejo, en un amplio espacio vació que daba la bienvenida al lugar. También podían ver que a su alrededor se exponían puertas en las paredes colocadas de modo que formaban una "U"  que por lo visto se abrían automáticamente deslizándose a un lado. 

Alexa sujeta con fuerza el brazo del chico y de un tirón lo acerca para encararlo.


– ¿Qué es lo que llevas en esa mochila? –Cuestiona con su voz en eco, echándole un vistazo a su espalda, sin soltarlo. 

– ¡Ah! ¡Nada, nada! –Respondió sintiendo escalofríos. Poniéndose muy tenso, retrocediendo un paso sin poder ir más lejos por el agarre. 


Lea ignora la escena y aventura su mirada por su contorno, sintiendo como lentamente el frío de su piel se dispersa. Adentro del laboratorio era perceptible un clima acogedor. 


– ¡A ver dame eso! –En un tono autoritario le arrebata su mochila para sacudirla, vaciando su interior. Cayendo al suelo las cajas de cigarrillos y un montón de billetes coreanos.

– ¡Por favor no! ¡Son míos! –Alarmado veía a la soldada. 



Suplicaba el chico recibiendo a cambio una malvada sonrisa de parte de la mujer que no parecía para nada piadosa. 



– Esto ya no te pertenece mocoso. –Se inclina para recogerlo y llena la mochila de nuevo, sosteniéndola con su mano.

– ¡¿Por qué?! ¡Eso es mio, por favor! –Cae de rodillas al suelo sobreactuando y aferra sus dedos al pantalón de la chica– ¡Por favor no me los quite! ¡Los necesito para sobrevivir!... 

– Por supuesto que no, tú ya no necesitas el dinero, ni los cigarros. Ustedes probablemente mueran –Con una maliciosa sonrisa los mira a los dos por un momento. 



Lea se gira a verlos con asombro, con sus labios sellados. Sumiéndose en sus pensamientos.


– (¿Que piensan hacer con nosotros?... Break ¿Dónde rayos estás?...) 



Alexa agarra a Seungri de su ropa levantandolo y lo empuja hacia Lea viéndolos chocar. Después vuelve su mirada a la puerta por donde entraron. 

–Esperen aquí, no vayan a huir... –Miraba la entrada y probablemente única salida que tienen– No creo que puedan irse de todas formas –Ríe entre dientes sosteniéndoles la mirada.



Los chicos permanecen juntos y en pie, observando a la soldada frente a ellos cuando ella toca su oreja, juzgando por su expresión que esta escuchando algo. 


– ¡Nick busca bien! ¡Mierda! ¡¿Por qué no haces nada bien?! ¿Cómo va a desaparecer? ¡No seas idiota!... ¡Ay eres un inútil! Voy contigo ahora mismo ¿Cuál es tú posición? –Empieza a caminar de vuelta a la puerta que con su tacto se abre y posteriormente se cierra. 



Lea y Seungri admiran como esa puerta se cerró frente a sus ojos. Todo indica que es imposible salir. No les queda de otra mas que esperar un milagro. 

Rendido el joven coreano se sienta en el suelo con su cabeza inclinada al frente. Guardando silencio por unos segundos en tanto Lea, da unos cuantos pasos adentrándose aún más al sitio, viendo ante sus pupilas unas diez puertas que formaban una "U". Maravillada, admira con curiosidad esas entradas tratando de imaginar lo que había del otro lado de ellas. 


– ¿Escuchaste lo que dijo Lea? –La voz de Seungri se escucha con resonancia– Dijo que moriremos... –Levanta su vista viendo la gran puerta de entrada ante él.

– También, no encuentran a Break. Maldito Break –Lleva sus dedos a sus labios y retoma su mal habito mordiéndolos con nerviosismo. 



Seungri suspira y ladea su cabeza intentando asimilar todo lo que esta pasando. 


– Sabes... Extraño todo, antes de esto –Hace un gesto de inconformidad.

– Yo también –Mira el suelo viendo su reflejo– Así que, según ella no podemos escapar de aquí... –Regresa a donde Seungri estaba sentado y dobla sus piernas para alcanzarlo a su lado– Vamos tonto levántate, tenemos que salir de aquí. 

– ¿Pero como? –Se pone en pie y la mira. 


Lea se incorpora y pasa su visión a su entorno. 


– No lo sé, pero, al menos hay que intentarlo... –Arruga ligeramente el ceño. 

.

.

En medio de las pequeñas montañas y arboles congelados que rodeaban la zona de la concentración del  HAARP. Los soldados dejan de buscar al misterioso hombre. 
No hay rastros, ni una sola huella o señal que los ayude a encontrarlo. Terminando incompleta su misión. 


– ¡Esto es increíble! –Sonando molesta golpea con su bota una pila de nieve– ¡¿A donde demonios fue?! 

– Te lo dije Alexa, es como si ha desaparecido literalmente. 

– ¡Deja de decir tonterías!. Bueno, olvidemoslo, igual, aunque haya escapado morirá  Reportemoslo y listo, aún tenemos a los otros dos, no creo que el tipejo sea de gran importancia. 

– ¡Entendido! 

.

.


En el interior de la entrada del laboratorio los jóvenes intentaban abrir la puerta palpándola. Imitando a la soldada pero no obtienen éxito. 



– ¡Ah! Obviamente esta puerta solo acepta cierto registro de palmas ¿Que diablos estoy haciendo? Es inútil –Dijo Lea indignada y se retira de la puerta resoplando y tocando su frente con su mano un poco fatigada, cerrando sus ojos. 



Hacían un esfuerzo, pero les faltaba energía, para pensar y actuar. No habían probado un alimento en mas de dos días, era demasiado.

Aprovechando el momento. Seungri se posiciona a su lado y pasa su brazo por encima de sus hombros, invadiendo con osadía y descaro su espacio personal, pronunciando en un tono sensual.


– Tranquila Lea, mira el lado bueno, estás conmigo a solas –Exhibe una sonrisita llena de picardía.


Lea golpea sus costillas con su codo alejándolo así de ella.


– ¡Ah! ¡Eso dolió! ¡Que ruda! –Se quejo el chico tocando su costado con una mueca de dolor grabada en su rostro.

– ¡Parece que ya no tienes miedo! ¡Y vuelves a ser el mismo otra vez! Seung hyun... –Lo mira claramente molesta.

– Aish, yo solo... ¡Oye no olvidaste mi nombre! –Deja de hablar para ver su contorno con extrañeza.

– ¿Sucede algo? –Pasea su mirada tratando de buscar algo extraño.

– ¿Qué es ese olor? –Se van cerrando perezosamente sus parpados y le entra un sueño incontrolable.

–Es... Ve-Verdad... –Siente sus parpados muy pesados y un ligero mareo se apodera de ella.




Las piernas de ambos pierden su equilibrio y firmeza derrumbándose completamente inconscientes en el blanco y brillante suelo.
Terminando tendidos en el amplio piso, cuando se pueden escuchar unos pasos acercarse a ellos. Eran dos científicos quienes se agachan para verlos detenidamente.

.

.

Esos científicos los habían dividido en distintas habitaciones, para realizar una clase de examenes teniéndolos inconscientes y a su disposición. De modo que consiguieran hallar la razón por la cual aparentemente solo ellos han mostrado resistencia y han mantenido sus mentes estables y su voluntad viva.

Quedando todavía muchas interrogantes. Dejan pendiente la investigación para más tarde, sin importarles que recuperen su conciencia, saben que aunque lo intenten es imposible penetrar la seguridad de su inmenso laboratorio.


Es una habitación en su totalidad blanca, iluminada intensamente como todo el interior del lugar. Por las paredes se encontraban maquinas sofisticadas y de la más alta tecnología, enormes pantallas que simulaban ser una hoja de papel que no tocaba la pared y flotaban en el aire. El cuerpo de Lea solo lo cubría dos piezas de tela fina en un matiz blanco al frente y atrás, solo donde era necesario, y se ataba a los costados con unas tiras manteniendo las telas en su lugar, permitiendo ver sus largas piernas y ombligo.
Sobre una cama de luz, permanecía suspendida en el aire por unas hondas magnéticas que emitía aquella cama. Una clase de cubierta que salia desde atrás de su cabeza hacia arriba, extendiéndose a lo largo de su cuerpo, la cual mostraba su reflejo como si fuese un espejo y un tipo de techo.

Recuperando su conciencia, se observa a si misma en ese reflector que encuentra arriba, exaltando sus ojos al notar que no lleva su ropa, si no que, solo una delgada tela blanca que oculta las partes mas intimas. Siente un agotamiento interno un tanto extraño, tratando de recapacitar.


– ¡Ahh! ¡Mi ropa! –Se remueve de su posición horizontal y esas hondas que la tenían levitando se apagan dejándola caer en la cama solida de luz.



Lea se aleja de aquel aparato y retrocede lentamente con cierta inquietud proyectada en su faz. Intenta descubrir donde está.


– (Este lugar... ) –Lo contempla estática– (Parece algún tipo de cuarto de investigación...) –Lleva sus manos a su rostro para tocarlo con sus dedos delicadamente– ( Pero no me hicieron daño, por lo que veo... También, no veo a nadie cerca...) –Mira a sus lados– ( ¿Seungri? ¿Él donde esta?... Maldición, ahora he quedado sola ¿Acaso no me quedará de otra mas que luchar hasta morir? ) –Suspira con fatiga– (No... Tengo que buscar a ese tonto de pacotilla. Si es que aún vive ) –Da media vuelta y con su mirada localiza una puerta delineada en la pared.


Fácilmente Lea puede atravesar esa puerta de salida, encontrándose con un largo pasillo de lado a lado, con muchas puertas iguales a la que ella acaba de abrir.
Sin saber donde empezar a buscar, avanza dando pasos lentos pero decididos, cuidándose de que no haya nadie cerca, se abraza a si misma con timidez e inseguridad por aquella tela que apenas le cubría lo necesario. No estaba acostumbrada a mostrar tanta piel.


– (¿Donde rayos está mi ropa?... No, ese tonto es más importante ¿O no? ) ¡Seungri! –Vocifera con la esperanza de que la escuche– ¡Seungri!



Su estomago vacío le exigía alimento, estaba hambrienta, peor aún su garganta y boca las sentía secas, añadiéndose una molestia más. Esa saciedad es tanta que le provoca un ataque de tos. Cubriendo su boca al toser con fuerza.


– (Estúpido Break ¿Donde estará? ¿Realmente nos ha abandonado? ¿Por qué él haría algo así?...)



Llena sus pulmones de aire tocando su pecho y exhala cerrando sus parpados. Cuando los abre divisa a un hombre con ropa blanca de protección, gafas transparentes y cubre bocas. El hombre aparentemente científico se acercaba paso a paso, ella vuelve a la puerta de donde salio y deteniéndola con sus manos para que no se cierre por completo, asoma su cabeza para ver donde se detiene el tipo, quien entra a una de las tantas puertas.


– (¿Estará Seungri ahí dentro? ) –Deduce arrugando leve el ceño.


Un minuto después, el hombre con bata blanca sale de la puerta y se marcha regresando por donde había llegado. Lea corre hacia la puerta con curiosidad y con la extraña sensación de que Seungri pueda estar ahí dentro.

Estando en la habitación muy similar a donde estaba ella, repara en la cama de luz donde su compañero flotaba al igual que ella, portando solo esa tela que cubría de su cuello a sus muslos semejante a una bata, que dejaba ver sus brazos y pantorrillas. Las mejillas de la chica se enrojecen al verlo, aproximándose hacia la cama y contempla lo que parecía un profundo sueño apacible del chico.



– Seungri... –Protege con sus brazos su pecho aunque este cubierto por esa tela se siente apenada– Seungri... –Se estremecía esperando que el chico no actuara pervertido– (¡¿Por qué solo yo muestro más piel?!)




Ella no quería admitirlo pero tenia miedo, una vez más sentía temor. Estaba asustada de lo que pudiera suceder en ese laboratorio. Viendo a Seungri como dormido sin responder, viene un recuerdo a su cabeza.






– Esto ya no te pertenece mocoso. –Se inclina para recogerlo y llenar la mochila de nuevo, sosteniéndola con su mano.

– ¡¿Por qué?! ¡Eso es mio, por favor! –Cae de rodillas al suelo sobreactuando y aferra sus dedos al pantalón de la chica– ¡Por favor no me los quite! ¡Los necesito para sobrevivir!... 

– Por supuesto que no, tú ya no necesitas el dinero, ni los cigarros. Ustedes probablemente mueran...



¿Por qué exactamente aquella mujer había dicho algo semejante? ¿Será que conoce muy bien lo que planean hacer con ellos? Todo esto era lo que tenía muy intranquila a la hermosa Lea.

Al verse sola de nuevo, no pudo pensar mas que en buscar a su cobarde e inútil compañero, por lo menos con él no se sentiría sola.
Jamas creyó que lo necesitara tanto. Pero ¿A quién más podía acudir, si Break los ha abandonado?. A decir verdad surge un alivio al presenciar a Seungri frente a ella.




– ¡Seungri idiota! ¡Despierta! –Acorta la distancia, para verlo de más cerca con algo de desesperación– Seungri... –Con sus manos lo sacude para despertarlo.



De pronto las manos del chico se alzan tocando el cabello rizado y rubio pálido de la chica. Ella en un respingo echa su cabeza hacia atrás para alejarse, pero Seungri es más rápido y la atrae para que sus rostros se encuentren pretendiendo robarle un beso sin abrir sus ojos. Lea se disgusta y por un impulso le pellizca con sus dedos uno de sus brazos sin soltarlo.


– ¡Ahh! ¡Duele! –Separa sus manos de ella y visualiza donde le pellizca con una mueca de dolor- ¡Ya déjame! ¡Por favor!



Lea lo deja de lastimar alejándose de esa cama de luz dándole la espalda y cruzándose de brazos un tanto incomoda y ala vez molesta. Seungri tocando la enrojecida piel de su brazo baja de esa cama yendo hacia ella con un rostro inexpresivo.


– ¡Oh apenas lo noto! ¡Tú ropa! –La señala con impresión– Y la mía... –Se mira el mismo– ¿Qué nos hicieron? ¡¿Experimentaron con nosotros?! ¡Oh! ¡¿Nos han hecho uno de ellos?!...


La chica solo lo mira con el rabillo del ojo sin querer darle la cara.


– ¿De que demonios hablas? No lo sé, pero tenemos que salir de aquí. No esperaré a que me maten.

– ¡Es cierto! ¡Pero! Recuerda que Break nos dejo solos. Sin él ¿A donde iremos? – Perdiéndose al mirar su melena rubia– Ya lo haz escuchado. Todo el mundo, esta siendo controlado.

– Es verdad... Tch –Mira hacia arriba pensando que puede hacer.

– Bueno, por lo menos nos tenemos el uno al otro ¿No crees? –Sonriendo con dientes– Oye... Entonces. ¿Tú también debajo de eso, no tienes nada más? –La observa de pies a cabeza con una mirada depravada.

– Idiota... –Un poco avergonzada– ¡¿Como puedes seguir pensando así en un momento como este?! –Se adelanta hacia la puerta para salir.

– ¡Oye espera Lea! ¡Debemos ir juntos! –Apurado la alcanza.



Hambrientos y sin saber como escapar del mundo en el que estaban atrapados, buscaban puerta en puerta con sigilo y cautela. No querían ser descubiertos pero tampoco querían andar por ahí casi desnudos. Su ropa debía estar por algún sitio.

Hasta que afortunadamente encuentran un pequeño cuarto con armarios modernos, que ellos sabían muy bien como funcionaban, eran iguales a los que tenían en sus habitaciones en casa. Eran como unas paredes de cristal donde claramente se guardaban muchas batas blancas, y abrigos cuidadosamente ordenados.
Sin dudarlo Lea es quien se atreve a manipular el mecanismo que tenían los armarios de modo que las paredes de vidrio se deslizan hacia arriba dejando las prendas a su alcance.


– ¡Oye! ¡ Ahí esta mi ropa! –Sonando emocionado por su hallazgo exitoso, se desplaza emocionado hacia donde estaba su vestimenta bien colgada.



Ni uno ni otro, se iba a detener a pensar ¿Que hacia la ropa de Seungri en donde estaba la de los científicos y mas?. Estaban más preocupados por vestirse con algo decente de una vez.

A Lea se le escapa un suspiro y pasea su mirada por toda la ropa que la rodeaba y no encuentra la suya, pero si un abrigo de peluche rosado que llama su atención. Hipnotizada por la hermosa prenda camina hacia ella.
Solo era una pieza, pero la mantendría mas cubierta y segura.
Sin pensarlo lo descuelga y lo viste fascinada, deslizando sus manos en el peluche con suavidad, era tan cálido y cómodo.


– ¡Hey Lea! ¡No vayas a mirar, me estoy vistiendo aquí mismo! –Grito Seungri desde el otro lado del cuarto.

– (¿Quien quiera hacerlo imbécil ...) –Pone sus ojos en blanco con fastidio– ( ¿Me pregunto si podremos hallar algo de comida aquí?... Aunque eso ya sería demasiado) –Se pone alerta de repente– (¿Qué estoy haciendo? En cualquier momento alguien puede...) –Mira hacia la puerta.

.

.


Los soldados ya habían reportado el caso del sujeto perdido. Lo que despertó la curiosidad de los científicos e investigadores, esto no hace mas que incrementar la curiosidad de los cientificos e investigadores.

Apresurados, un trío de investigadores se dirige a las habitaciones de estudios, en donde habían dejado a los jóvenes y justo como lo esperaban se fueron. Previamente habían descubierto que estos chicos tenían cierta resistencia a la anestesia que les fue introducida cuando la aspiraron.

Lo que les resulto bastante fuera de lo común, fue que su organismo y mente habían presentado una alteración positiva, contraria a lo que ellos habían logrado con el efecto del Haarp en la gente. Por supuesto querían saber ¿A que se debe todo esto? ¿Y como fue que sucedió? ¿Tendrá su maquina alguna falla que les afectara en sus planes a futuro?.



– ¿Los buscamos? –Cuestiono uno de los investigadores.

– No tenemos prisa, ellos siguen dentro del laboratorio. Aparte, tenemos cosas más importantes que hacer. Mejor activen los dispositivos de vigilancia que hay en cada habitación, pasillo y sala. Veamos como es que se comportan y que es lo que dicen entre ellos, probablemente nos sirva esa información.

– Es verdad, entonces encenderé cada dispositivo. –Se dirige a cumplir con el pedido.

.

.

Ya había pasado todo un día, hasta el cielo se oscureció.

Y en ese cielo nocturno del imponente laboratorio del Haarp. Volaba la nave de Break sin moverse de su sitio. El hombre del futuro apenas había vuelto de su viaje a su tiempo. Había estado preocupado por que gracias a su descuido los jóvenes estaban sufriendo de hambruna, sin embargo ahora esta listo con algo de alimento que trajo junto con el mayor motivo por el cual había regresado a su tiempo. Este le ayudaría a sacarlos de ahí, sin ser descubierto.

–( Espero y no me odien por demorar un poco...) –Pensó Break mirando desde el telescopio el laboratorio– ( Aunque estoy seguro que están muy bien... Ellos son más resistentes ahora, no creo que les hayan hecho gran cosa... Me pregunto si esos científicos lo habrán notado. Lo más seguro es que si, pero que importa, eso no es gran problema...)

.

.

Luciendo su ostentoso abrigo rosado de peluche acompañada del bien vestido de Seungri, salen del cuarto de armarios vigilando a sus lados por el largo corredor, para no ser vistos.


– ¿Y ahora que hacemos Lea? –Le pregunta viéndola a su lado sin dar un paso más.

– Por lo visto, no nos queda de otra, mas que enfrentarlos...

– ¿Estás loca? Tienen a soldados a su disposición –Enarca una ceja– ¿Quieres morir?

– ¡¿Tienes una mejor idea?!... –Lo observa con enojo– Ah, será que ya no puedo pensar bien... Estoy cansada de todo esto, y muero de hambre.

– Yo también –Baja su vista– Pero, no quiero morir a manos de soldados –En voz debil–

– Mucha gente haya afuera, aún sin tener conciencia, esta muriendo. Incluso tú familia y la mía, ya han muerto.–Su voz tiembla por el sentimiento– Así que ¿Que más podemos hacer?. No es como si sobrevivimos podamos volver a casa y ser felices. Eso es imposible, eso ya no existe... ¡Ese idiota de Break se olvido de nosotros! –Mira a otro lado con rabia– De todas formas, su plan con nosotros era egoísta e inaceptable para mi, pero por lo menos con el, me sentía segura y... –Le dirige su mirada– Vamos a buscarlos ¿O piensas ocultarte de ellos todo el tiempo? Estamos en su laboratorio, nos encontrarán de todos modos. –Se adelanta tomando una dirección por el pasillo, exponiéndose en su totalidad– ¡Acabemos con esto ya!

– ¡Pero Lea! ¡Espera! Eso es suicidio –La sigue inseguro viendo a todas partes.
.

.

Cada uno de los pasillos, habitaciones y salas del enorme laboratorio estaba iluminado con gran claridad, que hasta lo resentían las pupilas de los chicos. Ellos no tenían el conocimiento de que cada uno de sus movimientos y palabras que emitían estaban siendo vigilados y estrictamente monitoreados por cinco agentes voluntarios.

Seungri podía ver su reflejo en el blanco y lustroso suelo de la sala en la que acaban de infiltrarse. Era extenso y ancho con una prolongada mesa al centro y unas sillas flotantes, uno que otro arreglo natural que daba vida a la pálida habitación, y unas grandes ventanas cerradas de donde se podía ver el exterior, percatándose que llego la noche. Lea se detiene y también el chico al ver ante sus ojos un autentico Alíen cerca de una de las ventanas. Tal y como lo pintaban en toda clase de ficción. Enorme cabeza con grandes ojos negros y profundos, sin un solo cabello, cuerpo largo y muy delgado, todo un fenómeno.
El ser tan solo los miraba detenidamente sin hacer ni decir nada. Naturalmente ambos sentían algo de miedo por lo que desconocen.



– Es... ¡Es un! –Tartamudea Seungri viendo al Alíen a determinada distancia.

– ¿Un Alíen?... –Con sus ojos muy abiertos.


Aquel ser no pronuncia palabras pero tiende su mano, extendiendo sus largos dedos como queriéndolos alcanzar desde ahí. Posteriormente da un paso hacia ellos, acto que pone los pelos de punta a Seungri.


– ¡Corre! –Se dispone a huir espantado.


Lea lo hala del brazo hacia ella adoptando un rostro serio.


– ¿A donde crees que vas cobarde? Quédate aquí... –Susurra.

– ¿Que no lo ves? ¡Es un Alíen y es real! No parece una ilusión o algo por el estilo... –Viendo al ser que permanecía estático en esa misma posición.

– (Tal vez...) ¿Lo haz olvidado? Lo que nos dijo Break...




Yo quise advertirles pero no podía comunicarme directamente con la gente, solo podía vigilarlos la mayor parte del tiempo, inclusive aveces enviaba robots que parecían de otro planeta para que no sospecharan, ellos cargaban cámaras en sus grandes ojos, fueron vistos y grabados en vídeo y fotografiados en varias ocasiones, pero creían que era un ser de otra galaxia, los tuve que engañar también, así los vigilaba intentando comunicarme con ustedes pero no podía hacer mucho o desaparecería al regresar a mi tiempo.


– ¿Los alienigenas? –Cuestiona Seungri con impresión– ¿Eran tus robots?




Termina de recordarle y lo mira por sobre su hombro.




– Pero él ya no esta aquí... –Mirandola con extrañeza.

– ¡Ay si que eres tonto! ¡¿Qué no lo entiendes?! ¡Este puede ser un robot enviado por Break!

– ¡Oh, es verdad! –Sonríe– ¡¿Break eres tú?!

– ¡Idiota! ¡¿Como va a ser él?! ¡Es un robot!



A través de los gigantescos ojos del Alíen, había un tipo de dispositivo con el que capturaba la imagen en vídeo, por donde Break podía verlos y escucharlos, estando desde su nave que seguía sobre el laboratorio suspendida en el cielo.


–( Ellos jamas cambiaran...) –Pensó Break con una sonrisa– (Si, como lo supuse, están en perfectas condiciones, aunque la ropa de Lea es diferente... Menos mal que no hay nadie cerca, entró en buen momento, de todos modos, si lo ven pensaran que los "extraterrestres" han venido por ellos, aprovechare para llevármelos y creerán que han sido raptados  por los alienígenas de esa forma no quedaran sospechas. )



Break controlaba el robot alienígena desde un mecanismo sofisticado en el interior de la nave con unas gafas puestas en donde podía ver lo que captaban los ojos del ser. Indudablemente este robot fue su más grande invento. Orgulloso y contento de encontrarlos hace que el robot se acerque hacia ellos lentamente.


Lo que ninguno de los tres sabían era que estaban siendo vigilados desde vídeo y los agentes encargados de observarlos, quedan perplejos ante lo que dijo Lea más el Alíen presente.


– (¿Qué son exactamente estos chicos? ) –Pensó uno de los agentes– Debemos llamar a Gerard Eastlund, tiene que ver esto...

– Sí... –Se pone en pie y se encamina rápidamente a llamar al mencionado.

.

.

Lea sabiendo con seguridad que se trata de un robot de Break, se anima a hablar en voz alta.


– ¡Break! ¡¿Puedes escucharme verdad?! ¡¿Eres tu cierto?! ¡¿Por qué rayos te fuiste y envías este robot?! ¡Ven con nosotros y ayúdanos a salir de aquí! –Sonando cabreada– ¡Cobarde!

– Lea baja la voz... –Murmura Seungri viendo a todos lados con inseguridad– Siento que alguien nos esta viendo, me da esa sensación... –Musita.



Lea no aparta su mirada del Alíen robótico que los alcanza colocándose a un paso de ellos. Los jóvenes esperan con la expectativa y los agentes junto con Gerard Eastlund heredero del Haarp. Enfocan toda su atención en ellos, sintiendo un revoltijo de confusiones y un inmenso asombro. No sabían que pensar o imaginar con lo que estaban presenciando. Una serie de preguntas invade a los agentes. Todo lo que decía la chica los ponía a pensar ¿Quién era ese tal Break? ¿Y quienes eran ellos?...


.

.

.

.

.

.

.