jueves, 31 de enero de 2013

Sinopsis de TEENGEARS





















En el año 2100.

Lea D'lioncourt, una joven francesa que un día amanece en el terror. Ayer por la noche, se esperaba una mañana común y corriente, despertar e ir al colegio pero esta vez no fue así. Despierta y desconoce como sus padres han enloquecido, gritan y pelean  a golpes, tomando lo que encontraran a su mano para golpearse ¿Que esta pasando? Jamas se habían peleado así. Sus ojos se abren mucho y su corazón brinca del susto al encontrar con su mirada a su hermana pequeña tendida y sin vida en el suelo, manchada de sangre y con heridas, no entiende nada en lo absoluto, alarmada y llena de temor, trata de gritarles a sus padres.

-¡¿Que están haciendo?!...

Ellos detienen sus actos y clavan su mirada en ella. Sus miradas habían cambiado, no eran las mismas de antes, la miraban con un intenso odio ¿Por que?. La enfrentaron y Lea podía leer en sus movimientos que ella seria la próxima  por lo que reacciono huyendo de ellos, salio despavorida y a toda prisa de su casa, topándose en las calles a la gente que de igual manera se comportaban, era como estar en medio de un caos, incendios, destrozos por doquier, muertos y las personas que luchaban entre si, era como una pesadilla ¿ Estará aun dormida? Muy en el fondo espera que si, no puede dejar de temblar.

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Extrañamente lo mismo sucede en Corea del sur. Un joven de veinte años llamado Seunghyun ya se había dado cuenta del horror que hay a su alrededor, creyendo que la gente de su estado se volvió loca, piensa en viajar. Va a su habitación evadiendo a su Tía y hermana mayor con las que vivía y guarda en su mochila muchas cajetillas de cigarros, no puede dejar el vicio y también agrega todo el dinero que encontró en la casa, saliendo lo mas rápido que puede, evitando a las personas que en la calle conducían con descontrol y corrían con desorientación matándose  unos a otros, era un horror total, pero para nada le daba miedo, aunque de igual forma no entendía absolutamente nada ¿Que les ha pasado a la gente de su estado? Piensa en viajar el solo a otra ciudad, al ser muy frío no le interesa su Tía y hermana, ellas se han vuelto locas y al igual que todo mundo se intentaban matar entre ellas. Al parecer el era el único normal que mantenía su cordura por eso emprendió su camino, cuando al dar pasos pudo sentir que el clima en un abrir y cerrar de ojos cambio totalmente. En pleno verano comenzó a nublarse y caer nieve, lo mas extraño que ha visto en su vida, es verano, no invierno, definitivamente aquí pasa algo muy raro, solo cargo su mochila y siguió su camino aunque empezara a sentir el frio en la piel. ¿Este es el fin del mundo? Se preguntaba.




                                                               Teengears. 

lunes, 28 de enero de 2013

Saranghae Oppa! [ La verdad revelándose ]






Capitulo.- 23      -La verdad revelándose- 




Por el momento, lo único que Taeyang deseaba era que la situación se calmara, puesto que las cosas iban de mal en peor, el orgulloso líder había hablado de más, y fue su impulso y descontrol lo que provoco la inesperada e impactante revelación de Cat. 
El silencio invadió el sitio cuando la voz del representante cerca de ellos lo rompió. 


– Chicos ¿Que esta pasando?


A lo que nadie se digno a responder, solo Luna quien era la más angustiada hablo. 


– No es nada grave. –Sonrió para despistar– ¿Verdad chicos? –Giro su mirada a ellos– Solo nos detuvimos un momento pero, ya ibanos a alcanzarlo –Suelta una risa nerviosa.



Gdragon seguía viendo fijamente a su novia quien sin un rastro de arrepentimiento le sostenía la mirada con seguridad y dureza. 


– Si es verdad – Añadió Taeyang para apoyar a la chica– Vamos, sigamos adelante –Dirige su mirada a su amigo– ¿No vienes man? 

– Váyanse ustedes, yo me iré aparte –Musita el chico sin despegar su visión de Cat.

– Muy bien –Sonríe con confianza Taeyang y avanza– Vamonos Luna. 

– ¡Si! –Da pasos tras el. 


El manager no muy convencido decide marcharse junto con Taeyang y Luna. Gdragon tenia mucho que hablar con Cat y sabe que probablemente toquen un tema intimo el cual solo podía ser escuchado entre ellos dos. 


– ¿Crees que soy un idiota desesperado por que no quiero esperarte? –Cuestiona el chico con sus manos en los bolsillos del pantalón. 

– No sé por que tienes tanta prisa en casarte. 

– También, crees que soy un egoísta ¿No? –Eleva ligeramente su barbilla sin apartar su mirar de ella. 

– Sí, si lo eres. Dime, dime ¿Por que quieres casarte de una vez? ¿Por que tan rápido? Siempre vas muy rápido ¿No haz pensado que quiza yo no puedo seguirte? 

– ¿Que quieres decir? 

– Te dije que para mi no será fácil tener la aprobación de mis padres y a ti no te importa. Te dije que te esperes hasta que cumpla la mayoría de edad. 

– Tus padres, ya te dije que los convenceré y ya. 

– Te repito la pregunta ¿Por qué tanta prisa? ¿Por que Ji? 


Ahí es donde Gdragon frota con sus manos su rostro como restregándolo con estrés y peina su cabello hacia atrás estirándolo. Confesando siendo directo. 


– ¡Por que si no me caso ahora, mis padres me seguirán molestando! Y queriéndome ordenar que me case con Kiko Mizuhara tradicionalmente! ¡Y yo no quiero hacerlo! ¡Yo no la amo! ¡Yo te amo a ti Cat! ¡Contigo es con quien deseo casarme! ¡Por eso! –Sus ojos se tornan levemente rojizos y vidriosos avanzando para envolverla cálidamente entre sus brazos– Por eso


La chica queda desconcertada y muy sorprendida, recibiendo con inseguridad el gesto amoroso de su novio ¿Kiko? ¿Que era eso? ¿Una mujer? ¿Quien era esa mujer? Nunca antes mencionada. 


– ¿Kiko?  –Pregunto en un susurro Cat con sus ojos muy abiertos y su barbilla en el hombro del chico. 

– Si, ella –Sonriendo angustiado la estrecha con afecto. 

– ¿Quien es Kiko, Ji? –Se aparta de su cuerpo para ver sus ojos con curiosidad– ¿Por qué hasta ahora me lo dices? –Enarca una ceja al verlo. 

– Ella es. Es una amiga japonesa, la conozco desde hace tiempo, mis padres me comprometieron con ella y según ellos tengo que casarme con Kiko, no entienden que yo no puedo verla mas que como una gran amiga. Los odio por eso, pero son mis padres, los he estado sobrellevando pero, por supuesto que no puedo aceptarlo. 

– Japonesa... –Baja su mirada y recuerda. 


Aquella vez que se enfrento a Dara y lo que ella claramente dijo. 


– Ademas. El dice que no eres su tipo, por que no eres coreana, el es muy tradicional, como la mayoría de coreanos, jamas se relacionarían con una chica que no corra por sus venas sangre oriental, por mas bonita que sea... -Ríe-


Deja ese agrio recuerdo que tal parece tiene algo de verdad ¿Será?. 


– No te había contado esto, por que jamas le he dado importancia, por eso Cat quiero que te cases conmigo –Hablaba el chico–  Ya no quiero oír a mis padres sermonearme, no creas que lo quiero hacer solo como una escapatoria, en verdad te amo y no sabes como me encantaría esperarte pero te juro ¡Que no lo soporto mas!

– Vaya –Alza su vista para verlo– Yo, bueno ahora lo entiendo todo –Avergonzada. 

– ¿Si? –Ríe complacido y toma sus manos– Perdóname, por no decírtelo antes, no creí que fuera necesario. 

– Ya no importa esta bien Ji, menos mal, que lo dices ahora. –Le sonríe con dulzura. 

– ¡Perfecto! –Mira a sus costados– Vamonos de una vez, no nos vaya a ver alguien y me llegue a reconocer. 

– ¡Ah que vanidoso eres! –Riendo. 

– ¡En enserio, podría ser peligroso! –Se la lleva con él para tomar un taxi. 


Hasta ahora Cat siente que puede entender completamente a su novio, ahora todo tenia sentido pero ¿Que pasara con los padres de ambos? Ella todavía debe hablar con los suyos, y claro duda que Gdragon sea obligado por sus padres a casarse con Kiko a pesar de que imponga su decision. Son sus padres, obviamente se enteraran de la boda de alguna manera. Pero por el momento no quiere preocuparse por eso, tan solo quiere disfrutar de la compañía de Gdragon, aun así es imposible para ellos, estar en paz. 

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Tal y como debían hacer. Gdragon, Cat y Seungri emprendieron su vuelo con destino a Corea, Seul, dejando al par de enamorados en Nueva York. El estado actual de Taeyang estaba a favor de Gdragon, justo como el líder quería, su salud empeoro. Su temperatura había aumentado y su garganta también, sentía su cuerpo débil y pesado, estaba desganado, decaído, demacrado visualmente enfermo, lo que lo obligo a permanecer en Nueva York hasta que su salud se recuperara. Su amigo muy bien le había recomendado que no podía arriesgarse viajando así hasta Corea, son climas completamente distintos y eso le haría mucho daño. 

Siendo su asistente y amiga, la responsabilidad de cuidar a Taeyang cayo sobre Luna, ella estaba insegura y nerviosa pues no es una doctora ni mucho menos, de modo que no podía hacer mucho por el chico. El sabia muy bien a que iba todo esto que su amigo había planeado, por lo que se sintió con el deber de aprovecharlo, aunque con tal estado de salud, no tenia animo ni fuerza de hacer mucho, su humor había caído por debajo de los suelos, a causa de la enfermedad. 
Habían pasado un par de horas desde que los chicos se habían ido a tomar su vuelo, seguramente en este momento estén en el aire. Y el cielo ya ha oscurecido, Luna aun tenia puesto ese collar de plata de un sol y una luna, lo que le impacto a Taeyang el descansaba en su cama viendo Tv y ella abría las cortinas de la amplia ventana del cuarto de hotel, la cual permitía ver la iluminada cuidad de noche. Viendo a través del cristal de la ventana, en sus verdes ojos se reflejaba la imagen de la cuidad. Ya no sabia que hacer ni decir  le falta iniciativa, solo esta dispuesta a recibir ordenes o a hacer lo que sea necesario. Estar ahora si en su totalidad solos, la ponía nerviosa y preocupada. 

Taeyang veía la televisión ahí acostado, tosía fuerte de vez en cuando para nada le gustaba estar así  no sabia si odiar o agradecerle a su amigo. Incorrectamente creía que a Luna le gustaba Seungri y Luna sospechaba que le gustara otra chica, todavía no olvidaba lo que dijo CL. 

Ambos son tímidos a su modo, ambos son inseguros y bastante pensativos, pero es tiempo de que hablen más entre ellos, ya que aún hay muchas cosas que aclarar. Luna tomo con sus dedos el dije de plata y así lo acaricio mientras continuaba contemplando el panorama del exterior. En eso los dos dicen a la vez. 


– Oye... 


Ríen y se miran mutuamente por unos segundos aunque estén algo lejos. 


– ¿Que ibas a decirme? –Cuestiono Taeyang con una leve sonrisa. 

– Ah, no, no ¿Tu que querías decirme? –Sonriendo con timidez. 

– Bueno, que creo no deberías ocuparte mucho en mí, haz estado conmigo durante todo el día, tu que puedes, adelante sal a divertirte. 

– ¿Qué? ¿Como crees q-que voy a dejarte solo? –Dirige sus pasos hacia la cama. 

– Yo estoy bien –Con una simpática sonrisa– En serio, no te preocupes. 

– Gracias Youngbae, pero no, no quiero, este es mi trabajo y... –Lo mira a los ojos– (Me gusta estar contigo) –Pensó ruborizándose– Tengo que cuidarte.

– No soy un niño 

– ¿Entonces por que te niegas a ir con un Doctor? 

– Ah, cierto –Cambia de repente el tema– ¿Ji se disculpo contigo? ¿Por todo lo que te dijo? 

– Sí, antes de partir me pidió disculpas, pero ¿Eso que tiene que ver? ¡No evadas el tema Dong Young Bae!


Al ser la primera vez que menciona su nombre completo le causa risa, parecía que su madre le estaba reprendiendo. 

Aunque fueran tímidos al inicio, era extraño que conforme la conversación avanzaba podían hablar mas fluida y confiadamente. 

Luna no había notado que en el cuello de Taeyang colgaba un collar similar al suyo, de hecho era igual pero este lo formaba el oro. Por supuesto que el chico se lo había puesto con la intención de que se diera cuenta discretamente que ese collar que ella portaba se lo había dado él, queriéndole decir de este modo tan silencioso y disimulado que la ama. 


– Oye ¿Que es tan gracioso? –Lo observa algo molesta.

– Nada, nada –Se acomoda para sentarse en la cama y tose cubriéndose con la mano– ¿Hasta cuando estaré así? 

– Yo no soy un Doctor, pero espero y no sea mucho tiempo –Detiene su mirada en la toallita doblada y húmeda que estaba en la cama a un lado de el– Hey ¿Por que te lo quitaste? Tienes temperatura, anda vuélvete a acostar –Se acerca a el y coloca sus manos encima de sus hombros para empujarlo con suavidad hacia el colchón.

– De acuerdo –Se recuesta y cierra sus ojos dejando salir un suspiro. 


Luna vuelve a colocarle la toallita húmeda sobre su frente con una sonrisa, siendo muy delicada y cuidadosa. Medio abre sus labios mirando como embelesada el adorable y lindo rostro del chico, quien con sus ojos cerrados parecía fingir que duerme. Es tan enternecedor que no hace mas que invitarla a tocarlo por lo que a continuación pasa la yema de los dedos de ambas manos temblorosas por las sienes del chico descendiendo suavemente acariciando sus mejillas hasta bajar por su cuello logrando sentir esa alta temperatura en su tersa piel, lo estaba disfrutando tanto que el robarle un beso, no pasaba por su mente. Taeyang sintió como una descarga eléctrica muy dentro de su cuerpo, sabia muy bien lo que la chica hacia pero lo gozaba tanto que no quería arruinarlo, por primera vez quería ver hasta donde Luna era capaz de llegar, la estaba probando para saber si era igual a las otras chicas que le daban miedo, muy en el fondo anhelaba que ella no fuera así  Lo que lo hizo sonrojar fue el claro hecho que Luna gusta de el, de lo contrario no estaría haciendo esto. Despejando así esa duda. 

– (¿Se habrá quedado dormido? ) –Se pregunto en su mente la chica pelirroja y paseo su mirada por el rostro y lo que alcanzaba a ver de el, encontrando con su vista algo muy curioso que la hizo abrir sus ojos de par en par como si hubiesen sido accionados por algo. 


¿Que era lo que tenia en su cuello? Eso que brillaba en oro, obviamente era idéntico al suyo ¿Por que? Al instante se alejo de el y cogió su collar para verlo atentamente sin quitárselo ¿Que significa esto? Comenzó a analizar en su mente y el chico al notar su distancia abrió ligeramente sus parpados para verla, sus ojos eran tan rasgados que a pesar de ver parecía como si aun estuvieran cerrados. 


– (¿Por que él tiene uno igual al mio? No entiendo, este collar... Es cierto ¿Como llego a mi? No creo que haya sido Seungri el que me lo coloco ¿o si? No es posible, por que Young bae tiene uno idéntico, es muy bonito, es un sol y una luna y el también tiene uno, no, no entiendo) –Pensaba y mira a Taeyang quien parecía seguir dormido– (El... ¿El me dio este collar? ¿Cuando? ¿Como? ¿Por que? ) –Parpadea indagando impresionada.


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martes, 22 de enero de 2013

Enamorada de las palabras [Amistad por conveniencia]






Capitulo.- 4               –Amistad por conveniencia–






Ahí a pasos de llegar a la secundaria. Estaba tan feliz que abrace con una sonrisa de oreja a oreja a mi amiga, anhelando profundamente el día en el que Victor vendrá a casa de Ale y yo finalmente podré verlo y decirle cara a cara, lo mucho que lo quiero.

En serio me sentía tan alegre, fue una noticia demasiado grata que hasta en clase estuve atenta al maestro, tomando apuntes necesarios, participando en clase, era como si volviera a ser la misma de antes.
Solo tenía que esperar dos días, que para mi fueron como dos largos años, ya quería verlo, estaba impaciente, ansiosa e incluso nerviosa, por eso no dejaba de morder mis uñas.

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Ese día llegó trayendo consigo una tremenda felicidad que no podía ocultar mi cara. De verdad era bastante obvia, mi madre y hermanos lo notaron de inmediato y es que mis ojos eran como un cristal a mis sentimientos.

Ya eran las dos de la tarde, minutos atrás Ale me había llamado diciéndome que Victor ayer le dijo que estaría en su casa justo a las tres de la tarde. La intranquilidad y el estrés crecían en mí.

Es un maravilloso día soleado como lo son comúnmente en verano, acababa de darme un buen baño y ahora solo tenia una hora para arreglarme decentemente, por supuesto quería que el tuviera la mejor primer impresión de mi, tenia que verme perfecta, tengo que conquistarlo, así que cuide cada detalle por más mínimo que fuera. Seque y alacie uniformemente mi oscuro cabello que deje caer hasta mi cintura, busque mi vestido favorito dentro de mi armario y lo convine con unos lindos zapatos, quería lucir femenina y bonita para el. Solo use un poco de polvo y un brillo labial rosado y listo salí directo a casa de Ale, preparada para lo que sea que vaya a pasar, tenia que mentalizarme, tomar fuerza, mi corazón podría estallar.


Llegue mi amiga me recibió y pasando mi mirada a lo que me rodeaba, percibí un completo silencio y soledad, solo estaba Ale en casa ¿Y Victor? No veía su persona por ninguna parte y ya pasaban de las tres.



– ¿Donde esta Victor? –Pregunte sin dar un paso más, permanecí ahí parada cerca de la puerta.

– Ah verás... –Rasca su cabeza y mira el suelo–  El no vendrá.

– ¿Qué?... –Hago un gesto de decepción al verla.

– Lo que pasa es que –Toma aire– Hace rato me llamo y me dijo que mi tía y mi madre se pelearon, yo ni enterada de dicho asunto eh –Me mira a los ojos– Entonces, como mi tía ya no vendrá, él tampoco. ¡Por cierto que lindo vestido! Te vez muy bonita –Sonríe de repente como tratando de aligerar el ambiente.

– ¡¿Como que no vendrá Ale?! –Miré a otro lado angustiada– ¡¿Por tú tía?! ¡¿Acaso el no puede venir solo?! –La vuelvo a mirar– ¡Creí que vendría solo!

– No él no sabe llegar a mi casa, y sinceramente, sonó como si no le importara mucho – Mirándome– A pesar de que le comente que tú vendrías para verlo.

– ¿Qué? ¿Como así? –Alcé una ceja molestándome.

– Lo siento...  –Evita el verme.

– ¿Lo sientes? JÁ ¡¿En serio lo sientes?! ¡Ale, tú eres mi amiga! ¡ Deberías ayudarme!

– ¡¿Qué es lo que quieres que haga?! –Eleva su tono de voz y me observa fijo– Mi tía no vendrá, el no sabe llegar, yo no puedo hacer nada al respecto.

– ¡Si realmente fueras mi amiga, lo hubieras convencido! ¡Hubieras hablado con tu mama y tu tía!

– Mi madre ahora no esta en casa Angie –Frunciendo el ceño.

– ¡Por dios Ale! ¡No sé, les llamarías al móvil o algo! ¡Harías algo! Y no solo te quedarías con los brazos cruzados esperando a que yo llegará para decirme esto –Alterada.

– ¿Qué diablos te sucede Angie? –Se cruza de brazos y me mira interrogante.

– ¡No! ¡¿Qué diablos te sucede a ti amiga?! –Histérica– !Si de verdad eres mi amiga!

– Oye, ya basta, relájate... –Se acerca para tocar mi hombro–

– ¡No me toques! –Aleja su mano con un manotazo– ¡T-Tú, no sabes! –Con voz cortada, mis lagrimas fluyen por mis mejillas– ¡No sabes cuanto deseo verlo! ¡Y a ti no te importa! ¡Eres de lo peor! –Doy vuelta para abrir la puerta.

–¡Angie!



Salí sin decir más, ni despedirme, daba los pasos más rápidos y pesados que había dado en mi vida para alejarme lo mas pronto posible, me sentía como plantada, mis ojos se volvieron irritados y lacrimosos, mi airada mirada se posaba en el pavimento bajo mis pies, no podía detener mis saladas lagrimas, estaba muy desilusionada ¿Ale me habrá mentido? ¿A Victor no le intereso más? De ser así entonces ¿Por qué me envió esas cartas? No tiene sentido, me siento de lo mas humillada y patética.

Tenía mis dudas, por eso, a pesar de todo deseaba hablar con él ¿Pero como contactar con Victor sin Ale? A quien ya no considero mi amiga, ya he roto ese lazo de amistad que nos unía.

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Cuando el oscuro y frío velo de la noche cubrió el inmenso cielo, no pude contener mis ganas de leer una vez más esas cartas. Por dios ¿Estoy obsesionada o enamorada? Ambos sentimientos se confundían dentro de mi, es tan difícil retener ese amor que siento hacia Victor, aunque me sintiera triste, abrí nuevamente esa caja de tesoros y releí las cartas, casi involuntariamente una sonrisa se trazo en mis labios y al instante pude sentir como toda esa tristeza se desvaneció, fue como si sus palabras que ahí estaban plasmadas, fueran mágicas y muy poderosas, me hacen sentir especial y eso se sentía tan bien.

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Así pasaron días, no fue ni una semana pero, en el transcurso de ese tiempo, de alguna manera fue tan eterno, sobre todo al estar en la secundaria, era tan pesado. El ver y tener a Ale tan cerca me incomodaba de hecho me molestaba también. Ella parecía que de igual forma estaba enojada conmigo ¿Como puede ser así?  Aquí la única afectada soy yo. No podía hablarle, mucho menos disculparme, mi orgullo estaba primero.

Tras esos días comenzaba a desesperarme y morirme de la curiosidad y es que necesitaba saber de Victor y ¿A quien engaño? La única manera que tengo de saber de él y contactarlo es por medio de Ale, además extrañaba esas largas platicas sobre Victor, por eso, solo por eso trague mi orgullo y me dispuse a dirigirle la palabra, después de casi cinco días de ni siquiera mirarla y mucho menos saludarla, temía que me fuera a ignorar, a gritar o a burlarse de mi. Como era de esperarse ella estaba sola en la cafetería, así había estado estos últimos días y yo también a las dos se nos dificultaba hacer amigos. Sin más me aproxime a su mesa y me senté al frente justo como lo hizo ella la primera vez que hablamos.


– Alejandra... –La llamé con voz clara.

– ... –Comía chocolates sin parar y sin verme.

– Oye, ¿Podemos hablar un momento?


Yo la veía atentamente y ella solo me ignoraba como si yo no existiera me sentía invisible.


– ¡Ah, ya se! –Saco mi almuerzo y se lo dejo a su alcance– Puedes comerlo si quieres –Sonriendo– ¡Esta vez traje una deliciosa hamburguesa!

–... –Bebe de su refresco, lo coloca con fuerza sobre la mesa y con un suspiro se incorpora apunto de retirarse.

– ¡Ale! –Me levanto y tomo su mano para no dejarla escapar.

– Por favor, escúchame, en verdad necesito hablar contigo ¿No crees? –La miro preocupada.

– Pero, si tú y yo, ya no somos amigas

– No, claro que lo somos.

– Tú dijiste que no era tu amiga, así que olvídalo –Aparta su mano.


Dio un paso y en ese segundo yo sabia que si no hacia o decía algo ahora si realmente perdería su valiosa amistad y la necesito, por lo que decidí rápidamente lo que menos pensaba hacer y por supuesto me avergonzaba.


– ¡Perdóname! –En un tono claro.


Ella al instante detuvo su andar y camino hacia mi con ese semblante serio y frívolo.


– Angie... –Una sonrisa aparece en su faz– Al fin lo haces –Ríe.

– ¿El qué? –Algo nerviosa miraba sus ojos.

– Disculparte, creí que nunca lo harías. Te extraño amiga –Sin dejar de sonreír.

– ¡Yo también! Y, bueno –Mire el suelo mordiendo mis labios– ¿Si me perdonas?

– ¡Claro que si! –Riendo me estrecha en un abrazo.



Quede muy sorprendida, la verdad no me lo esperaba que aceptara mis disculpas con tanta facilidad.
Después volvimos a tomar asiento en la mesa ya mas tranquilas, me sentí como las típicas amigas que se pelean o discuten y al final resuelven sus problemas y vuelven a llevarse bien, osea que ¿Es normal?.
Todavía tenia mis dudas, estas no me dejaban en paz, daban vueltas en mi cabeza, las quería despejar, pero por ahora solo quería disfrutar de la compañía de Ale quien había tomado mi hamburguesa y ya la estaba devorando. Apenas habíamos iniciado una conversación y yo no pude evitar decirle.


– Y ¿Haz visto a tu primo últimamente? ¿Haz hablado con él?

– Angie –Resopla con fastidio– Por favor –Sonando molesta hace una pausa al comer– No hablemos de Victor por ahora, no sé, podemos hablar de otra cosa, como de mi grupo favorito o lo que hemos hecho todo este tiempo.

– No fue tanto.

– No, pero seguramente tenemos mucho que contar, aparte no, no he sabido de él, le he llamado a su casa pero no responde, parece que mi tía no me deja hablar con el.

– Tú tía y tu mamá ¿Siguen enojadas? –Interesada me acerco quedando al borde de la silla.

– Si, y es horrible por que si ellas ya no se hablan, no nos dejan comunicarnos ni vernos –Termina la hamburguesa y limpia sus labios con el dorso de su mano– ¡Oh! ¡Deliciosa! –Sonríe y bebe refresco.

– Que horror... –Recargo mi espalda en el respaldo y dejo escapar un suspiro– Espero y pronto todo regrese a la normalidad, me gustaría recibir una carta mas de él

– ¿En serio?

– Sí, ya que no puedo verlo ni hablarle, por lo menos tener una carta nueva, seria increíble –Mis ojos lagrimean un poco– Yo, necesito leerlo –Bajé mi vista afligida.

– Angie... –Con voz baja y compasiva.



Una carta, solo una carta más era lo que ocupaba, con eso volvería a ser feliz por que al ver que existía una enorme barrera impenetrable entre nosotros no me quedaba de otra.

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Pasaron los días junto con sus noches y en lugar de enojarme me ponía a llorar, al saber que Ale ya no veía a su primo y ya no le hablaba, por lo tanto ya no podía pedirle otra carta para mi, los problemas familiares no se solucionaban ¿Por qué a mi?. Estaba tan deprimida por que ya no me enteraba de nada, Ale no me contaba mas de Victor. ¿Por qué sufro así? Teniendo a muchos chicos a mi alcance de los que hay en la escuela, me era imposible, el poner mis ojos en otro chico que no fuera Victor, no podía enamorarme y tampoco podía dejar de amarlo, soy una verdadera tonta.
Noté que Ale se agobiaba, por verme así  sufriendo por su primo y trataba de darme ánimos pero nada servía, parecía que mi estado no tenía remedio. Así termino todo un mes, por dios fue tan largo.


Era un día sin sol, el reloj en mi muñeca indicada que ya eran las cinco de la tarde. Yo y Ale nos habíamos puesto de acuerdo para hacer la tarea juntas, por eso salí de mi casa rumbo a donde vivía mi amiga.

Precisamente en el momento que acabamos la tarea. Estábamos sentadas en el piso.


– Orale, eso fue rápido –Dijo Ale poniéndose en pie.

– ¿Si verdad? –Ordenaba los libros, cuadernos y demás.

– Ah cierto Angie, te tengo una sorpresa –Ríe mientras busca entre un cajón de un mueble.

– ¿A si?

– Si..


Dicho esto volvió a sentarse frente a mi en el suelo con una rosa carmesí en su mano y en la otra lo que parecía ser una carta.

– Eso –Señalo sus manos– Eso es... –Con mis ojos exaltados.

– Sí, Victor me lo dio para ti –Me lo entrega.

– Es una rosa y una carta –Aún impactada sonrió ampliamente– Pero creí que tu tía y madre seguían peleadas y ¿Haz visto a tu primo? ¿Por que no me dijiste? – Mirándola.

– Ah es que, quería que fuera una sorpresa –Ríe nerviosa.

– ¡Que mala! –Reí y olfatee la rosa con mis ojos cerrados– ¿Por qué me envió una rosa? ¡Eso quiere decir que me quiere!

– Sí, esta loquito por ti –Ríe divertida.

– ¡Genial! –Abrazo la carta– Oye que linda esta...


Miré los detalles del sobre, tenia corazones brillos y al abrirla un aroma a perfume se adentro en mi nariz yo sin dejar de sonreír, estaba tan contenta, tenia en mis manos una carta de él, no lo podía creer.


– Sí, se esmero en hacerla esta vez –Comento Ale viéndome como intranquila e insegura.


Pero yo no le di importancia a su comportamiento, estaba ansiosa por saber que me escribió ahora, ya ha sido tiempo desde la ultima vez que lo leí. Mi corazón vibraba de emoción, mis mejillas las sentía tibias. Abrí la carta y pude ver un texto muy largo, había llenado toda la hoja lo que me extraño.


– Oye Ale ¿Por qué su letra es diferente?

– ¿Eh? –Me mira.

– Sí, esta letra, no se parece en nada a la de él, es más bonita y el texto es mas largo, el escribe poco ¿No?

– Ah, eso... – Sonríe de medio lado.


Yo claro que espero una explicasion, esto no parece ser autentico ¿O si?.

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viernes, 18 de enero de 2013

Saranghae Oppa! [ Unidos por un lazo invisible ]













Capitulo- 22        -Unidos por un lazo invisible-



Tanto Seungri como Luna no abrían sus ojos. Aquel sofá se ha convertido en parte de la escena de Luna sobre las piernas de Seungri. El cuerpo del chico vibrara del placer que le provoca sentir las manos de ella pasearse por su ropa junto con el roce de sus labios en su cara y cuello. Esa incomodidad de su miembro aprisionado en su pantalón lo hacia fruncir el ceño y volver su acelerada respiración a jadeos esta al borde de cometer un acto que sabe lamentara después  el deseo carnal cada vez era más fuerte, sabe que encontrándose ella en tal estado de ebriedad sería mas fácil tener un delicioso coito, sin embargo quiere cambiar e ir en contra de sus deseos, tiene que ser fuerte. No puede oponerse, es imposible solo puede mantenerse quieto y en silencio con sus parpados cerrados. 
Los besos y movimientos de Luna se alentaban es como si le estuviera ganando el sueño, pero no se detenía. 


– Mi sol... – Murmura con voz barrida – Te amo Youngbae no te apartes de mi
 –Abraza por el cuello a Seungri y besa sus cabellos. 


Es ahí cuando el maknae entiende que Luna esta confundida, el alcohol la ha descontrolado y expuesto sus sentimientos, es claro que lo que quiere demostrarle a Taeyang equivocadamente se lo muestra a Seungri a quien no le importa en lo mas mínimo e incluso le saca una sonrisa ladina pero teme que el mencionado pueda llegar en cualquier momento, por lo que se dispone a oponerse. 



– Muy bien, ya fue suficiente Luna –Un tanto nervioso trata de separarla de el con delicadeza agarrándola de sus brazos. 


– ¡No! No seas así conmigo Con ese mismo tono se aferraba a él – Se que te gusta otra chica pero, por favor.


El chico respira profundamente y exhala no queriendo ser duro con ella ¿Que puede hacer? 


Siendo lo mas lógico y esperado, Taeyang llega a la puerta de su habitación, desanimado y angustiado. Al querer introducir su llave nota que la puerta ya esta abierta, pensando que probablemente Luna ya esta dentro y olvido cerrarla, sonríe con la idea de que quizá no lo hizo por que lo esta esperando. Abre la puerta para entrar con la esperanza de encontrarla y en eso la voz de Luna se escucha cerca activando sus sentidos. 



– ¡Vamos! ¡Quítate la ropa de una vez! -Voz ebria-



Gira su mirada y logra ver que en una esquina están Luna sobre Seungri que permanece sentado y ella ríe queriéndole sacar sus prendas e intentando besarlo en sus labios pero el maknae evadía sus besos, la chica termina sacándose su suéter y blusa arrojándolos al suelo quedando en pantalones y sostén negro, en ese instante Taeyang aparta su mirada muy decepcionado Seungri estaba tan preocupado y distraído a la vez que no se percata de la presencia del chico. Taeyang retrocede lentamente hasta sentir que su espalda toca la puerta y mirando el suelo piensa. 



–(No puede ser, ella no es así ¿Estará actuando? No... ¿Por qué haría algo así? ) –Pensaba y a la vez siente un golpe fuerte en su corazón formándose un nudo en su garganta que hace que sus rasgados ojos brillen – ( ¿Entonces todo es mentira? ¿Realmente ella si provoco así a Seungri como dijo Chaerin?... No, no es posible ) –Se hacen ataduras y un enorme embrollo en su mente mezclándose con el sentimiento que invadía su pecho.



No hace más que salir corriendo de ahí, recorriendo el largo pasillo del hotel a un paso rápido, encontrándose con Cat y su gran amigo, ahora borracho. 



– Vamos Ji tenemos que entrar, tienes que dormir  –Con la puerta ya abierta atraía con toda su fuerza a su novio para hacerlo entrar a su habitación.


– ¡No! ¡Mira es Sol! –Le dirige su mirada a Taeyang quien pasaba por ahí–  ¡Hey man! ¡¿A donde vas?! –Exclama con voz barrida el líder-


– Ahora no man... Dicho esto sin voltear a verlo sigue su camino.


– ¿Eh? ¡Hey! ¡Heeeey espera! –Da un paso queriendo seguirlo.

– ¡Ya! ¡Vamos! – Lo detiene y hala hacia adentro del cuarto.


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Justo cuando Taeyang sale del hotel, sus lágrimas brotan naturalmente llevando consigo ese agrio sentir que le dolía en sus entrañas. Camina directamente a la camioneta para subir nuevamente en ella, solo quería irse lejos, estar solo un momento. No podía simplemente permanecer en su cuarto de hotel como si nada pasará, tampoco podía entrar en escena y separarlos, no tenía el valor ni el coraje. 

Se odia a si mismo por ser tan débil puesto que aún estando lejos del hotel y conduciendo por las calles de Nueva York no dejan de salir esas lágrimas de sus ojos continuaban desbordándose silenciosamente y con facilidad. Tan solo pensaba dar una vuelta para tranquilizarse, después volvería al hotel aunque no quisiera tenía que hacerlo, pero que descaro el de Luna y Seungri haciendo lo que sea que estén haciendo en su habitación de hotel. 

Taeyang no pudo cumplir su promesa, aquél dije de sol y luna lo sigue conservando ¿Que hará con el? ¿Desecharlo, guardarlo o dárselo aunque no le importe? Por lo visto a ella le gusta Seungri. 

Continuaba paseándose en la camioneta. 

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Ha llegado al limite, el excitado chico no puede contenerse más, definitivamente es muy débil cuando se trata de alguna provocación sexual es su gran debilidad, cree que no debió darle esas bebidas pero con malicia piensa: ¿Y si me aprovecho del asunto?. Al ver que Taeyang no llega y ya pasa de media noche decide actuar lo mas rápido y placentero posible, lleva a Luna hacia donde había visto la cama de Taeyang ella seguía muy cerca de él costándole el mantenerse erguida y en pie por lo que Seungri la sostenía. 



– ¿A donde vamos Tae? –Pregunto Luna y estando a un lado de la cama se aparta del maknae y sus piernas pierden equilibrio cayendo al suelo.



Queda tendida en el piso y con sus parpados cerrados parecía inconsciente. 



–Luna... –La llama el chico y dobla sus piernas para alcanzarla tomando sus brazos para levantarla-



Pero antes que pudiera hacerlo Luna coloca sus manos extendidas contra su pecho como deteniéndolo a cierta distancia para clavar su mirada en su rostro, medio cierra sus parpados viéndose sus ojos irritados, lo observa detenidamente, la silueta del chico la veía doble y su visión no era nítida. Seungri quita las manos de la chica de su camisa para ponerlas detrás de él justamente en la parte mas baja de su espalda y pudiéndose ver ese notable bulto de su entre pierna, se da la molesta labor de quitarle su sostén negro elevándola levemente del suelo para hacerlo, mientras se acerca a morder suavemente su labio inferior y Luna va abriendo los ojos perezosamente imaginando y creyendo que es Taeyang, sonríe y desliza sus manos hasta tocar las mejillas del chico en tanto que sus labios se acarician Seungri desprende el botón del pantalón de la chica y baja el cierre. Luna ríe entre el beso y apenas puede responder el roce de labios que el maknae intensifica abriéndole paso a su lasciva lengua que introduce en la cavidad de la chica formando parte del húmedo y tibio beso con sabor a alcohol.


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El pavimento de la cuidad estaba mojado y un viento helado podía hacer temblar a cualquiera. 

Taeyang se había detenido en una calle recargándose en la camioneta para contemplar con tristeza la luna que parecía esconderse de su vista entre las nubes, apenas se podía ver. Adentra su mano en el bolsillo de su pantalón y encuentra el dije de plata que pensaba darle al momento de confesarse, lo observa en su mano unos segundos para después lanzarlo hasta el otro lado de la calle. 

– ( Se acabo no quiero saber nada de ella, no tiene caso, claramente a ella le gusta Seungri ) –Deja salir un suspiro que se ve en el aire y al sentir que se entumecen sus dedos mete sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta. 



Él sabe perfectamente que se esta mintiendo, no es tan simple olvidarla y decir que todo terminó. 

La calle lucía sola y se apoderaba de ella un profundo pero a la vez ruidoso silencio. Taeyang no deja de ver hacia donde cayó el dije de plata, mordiendo sus labios, estaba inseguro. 


– ( ¿Se acabo?... ) –Camina directamente a donde estaba el dije y se inclina para recogerlo del suelo– (Debo cumplir mi promesa sin importar que ) –Levanta ligeramente sus comisuras apenas notándose su sonrisa regresando a su camioneta.



Pensaba que tal vez sus ideas están equivocadas o tal vez esta en lo cierto.
 .


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No había tiempo, Seungri debía apresurarse no podía subir con ella a la cama. Ahí en el frío suelo de madera Luna estaba ya acostada completamente desnuda el pervertido chico le gustaba ver toda su piel y la hermosa escultura que es su cuerpo, parecía una obra de arte. El sigue vestido con su camisa y pantalón que solo ha bajado para descubrir su miembro erecto el cual estimulaba con su mano al besar y morder con suavidad el rosado y pequeño pezón de la chica, no aguantaba mas, con ansiedad toca sus muslos para ponerse en posición y entra en su entrepierna de una fuerte y rigurosa embestida que hace gritar a la chica quien con sus ojos cerrados arruga el ceño en señal del punzante dolor que sintió en lo más intimo de ella, pero su cabeza daba vueltas y no podía responder, solo permanecía inmóvil con sus manos a los lados de su cabeza, indefensa, y Seungri mueve sus caderas rápidamente apretando sus dientes al sentir la exquisita sensación de su firme miembro entrar y salir repetidamente de esa pequeña cavidad que lo oprime al moverse volviéndolo totalmente loco, aumenta más el ritmo y Luna con la misma expresión facial medio abre sus labios escapándose algunos gritos un tanto mareada estira sus propios cabellos como con desesperación esta perdida. Seungri sujeta sus muñecas colocándolas en el suelo a los lados de la cabeza de la chica sin detener su movimiento, volviendo más profundos y casi salvajes sus embestidas tanto que parecía querer clavarla en el piso, el calor que producía su cuerpo junto con toda esa excitación acumulándose lo hacen sudar pero no se quitaría la ropa no perdería tiempo en eso, de los labios del chico salían gemidos cortos pues los trataba de retener al sentir que esta por venirse sale de ella y su semen salpica sobre la piel del abdomen de Luna quien ha quedado como desmayada probablemente dormida. Seungri tiembla mirando el techo disfrutando de ese placer que alcanza y toma un respiro presintiendo que no ha de tardar Taeyang. Su miembro pierde su dureza y abrocha su pantalón viendo que la chica esta dormida se dispone a buscar una pequeña toalla para hacer el trabajo que no le corresponde, limpiar ese fluido blanquecino de ella, creyendo que se pasa de bueno, se apura cargándola para dejarla acostada sobre la cama y la cubre con las sabanas sin más que hacer sacude su camisa todavía con su respiración agitada y se va lo antes posible. Esta claro que el maknae del grupo no entiende y es muy débil se ha arriesgado a muchas cosas.




Minutos después Taeyang llega a su habitación de hotel. En el camino había pensado bien la situación. Al dar unos pasos a donde se encuentra su cama puede ver que Luna esta ahí derrumbada en un profundo sueño con la sabana hasta su cuello se aproxima lentamente contemplando por unos segundos su bello rostro.



– (¿Cuantas veces Seungri la ha tocado?... ¿Tres o cuatro veces? )–Decepcionado la observa y lleva su mano derecha a la cabeza de la chica para acariciar su carmesí cabello.




Evidentemente no podrá dormir en su cama, no quiere despertarla, no bruscamente. Desliza la sabana para destapar su cuerpo y conforme la va descendiendo puede ver la blanca piel de sus hombros y logra ver sus senos desnudos lo que lo hace sonrojar e inmediatamente la vuelve a cubrir con su mano temblorosa, libera un suspiro. 



– ¿Te divertiste mucho esta noche no? Mira su alrededor levantando una ceja– (¿Donde estará Seungri? ¿Se habrá ido? ) –Le resta importancia y vuelve a mirarla– Luna, sabes... Sonríe N-No me importa, si me haz mentido... –Dobla una pierna para poner su rodilla sobre el colchón y acercarse mas a ella– O me haz engañado, realmente te amo ¿Escuchaste? La observa dormida Te amo como no te imaginas y... Esta noche, tengo que cumplir mi promesa... –Sonriendo nace un sentimiento que lo hace lagrimear un poco




Luna se remueve un poco y el saca el dije de sol y luna formado en plata, acorta la distancia para ponérselo en el cuello alzando ligeramente su cabeza de la almohada para poder pasarlo y abrocharlo, acomodándolo justo en el centro por debajo de su cuello. 




– Se ve hermoso en ti... –Con sus manos sobre el colchón a los costados del cuerpo de Luna se acerca más a su rostro frotando su nariz con la de ella, sonriendo tenuemente con sus parpados cerrados– Te amo y no puedo dejar de hacerlo Luna –Susurra y una pequeña lágrima se escapa aún con su parpado cerrados cayendo en la mejilla pálida de la chica




No se anima a besarla, ni se atreve a despertarla mucho menos a dormir a su lado estando ella desvestida, a pesar de todo la respeta. Piensa donde podría descansar ¿En el sofá en donde duerme ella? Siente que no es el suficiente espacio, por lo que es incomodo para él. Opta por dormir en el suelo, no le queda de otra, pero ahí cerca de la cama. Trae lo necesario para preparar el lugar a un lado de la cama donde dormiría esta noche, todo lo acomoda en modo que sea mas confortable. Ya casi es la una de la mañana y había tantos pensamientos que revoloteaban por la cabeza de Taeyang que no lo ayudaban a conciliar el sueño,  poco a poco sus ojos se cerraron hasta que la luz de un nuevo día ilumina cada rincón de la habitación. 


Los ojos verdes de Luna se abren pausadamente y su visión ya es mas clara pero siente su cabeza muy pesada acompañado de un dolor que sin duda era resaca. Ella sin saber muy bien que había pasado y por que esta en la cama de Taeyang en un instante reacciona exaltándose. 



– (Estoy en la cama de Young bae ¡¿Por qué?! ) –Separa la espalda del colchón tocando su cabeza alterada y confundida mira a todos lados– (No recuerdo casi nada...) –En su piel siente un leve frío y mira sus senos descubiertos– (¡Dios mio! ¡¿Por que estoy desnuda?!) –Se cubre al instante y observa la cama como si estuviera buscando algo– (No, no entiendo nada ¡Ah! Mi cabeza...) -Coloca su mano en la frente y frunce el ceño por el molesto dolor– (Mis caderas también me duelen) –Trata de levantarse de la cama– Ah... –Se queja de dolor– (¿Por que me arde mi entrepierna? Y mis caderas están adoloridas, no puedo moverme ¿Y donde está Young bae? ) 



Comienza a divagar en su mente.



– (N-No... ¿Me puse ebria y lo hice con él?... El quizá ahora esta en la ducha ) –Deduce y se alteran sus nervios ruborizándose hace un movimiento hacia la orilla de la cama queriéndose poner en pie, pero sus piernas se encuentran en un enredo de sabanas que la hacen caer fuera de la cama




Sorpresiva e inesperadamente cae sobre el firme pecho de Taeyang quien se encontraba sin camisa y queda encarándolo de muy cerca lo que la avergüenza tanto. El despierta y le sonríe sujetando sus brazos para alejarla de él.



– ¡Lo siento! –Exclama Luna con sus ojos muy abiertos y un rubor notable en sus mejillas.


– Tranquila, esta bien –Con una sonrisa bondadosa el se pone en pie y la observa estando ella de rodillas en el suelo, cubriéndose con las sabanas-. 


– Y-Young bae yo, no entiendo nada –Mira abajo muy apenada– ¿Qué hacia en tu cama? ¿Qué paso? 


– ¿Ya lo olvidaste? 


– ¿Eh? ¿El que? –Alza su mirada para verlo alarmada.


–... –Se le escapa una risa y mira a otro lado– Anoche cuando llegue aquí, tú estabas con Seungri en aquel sofá –Lo señala siendo directo– Estabas en sus piernas, besándolo y... –La voltea a ver– No se por que hacían algo así en mi habitación –Su voz tiembla por el sentimiento– Seungri también tiene su habitación... –Baja su mirada afligido. 


– ¿Como?... ¿Hablas en serio? ¡No juegues con eso! 


– Te estoy diciendo lo que yo vi, jamas mentiría –La mira. 


– Yo nunca haría algo así... –Busca en los recuerdos de su memoria alguna razón– Un momento, yo bebí mucho con él, es lo único que recuerdo bien ¿Me puse tan borracha? –Viendo donde durmió Taeyang. 


– Estuviste con Seungri en mi habitación –Alza sus cejas al hablar y niega con su cabeza algo indignado– ¿Por que aquí? ¿Por que no fueron a otro lado? 



Sin decir una palabra más el chico camina al baño para lavar su cara y sale yendo a ponerse una camisa, cerca de donde estaba ella como perpleja. 

Luna se levanta del suelo no pudiendo avanzar, se sienta en el borde del colchón.

 ¡Por dios! Cubre su boca con sus manos y sus ojos se vuelven cristalinos– ¿Seungri lo habrá hecho de nuevo? –Mira hacia un lado– ( ¿Por eso me siento así? ) 


– No quisiste hacerlo, pero lo hiciste Luna –Se giro a verla con una mirada intensa– Lo conoces y aún así, lo dejaste hacerlo. 


– ¡Estaba borracha! ¡Estaba sola! 


– No tenias por que tomar de más, lo hiciste por que quisiste y no te importo –Se pone una gorra y busca una chaqueta adecuada.


– ¡¿Como puedes decir que no me importo?! – Viéndolo con un nudo en su garganta– ¡Tú me dejaste sola! ¡Te importo más bailar! ¿No es así? 


– No, sabes que me gusta mucho bailar – La corrige al voltear a verla de reojo– No es que me haya importado más


– Lo sé pero


– No me culpes –La interrumpe y se pone la chaqueta– Sabes muy bien que me encanta bailar, tú también debiste hacerlo si querías estar conmigo, hubiéramos bailado como Ji y Cat –Se mira a un espejo.


– Sabes que no me gusta y a mi hermana tampoco, pero Ji casi la obligo. 


– Por eso mismo, yo no quería obligarte, por eso te deje sola


– Tú una vez dijiste que me cuidarías y no me dejarías sola ¿O ya lo olvidaste? ¿Fueron palabras vacías? –Dice por impulso con voz ahogada, el nudo en la garganta surge en lágrimas que Luna secaba con sus manos. 



Taeyang queda mudo, claro que lo recordaba y se siente un poco mal en su interior, solo la sigue escuchando estático y atento, frente al espejo, ya no sabe que creer. 



– ¿Que querías que hiciera? –Continua– Estaba aburrida, sola y Seungri fue el único que se quedo a mi lado, el extrañamente fue muy lindo y amable conmigo, parecía que había cambiado, por eso confié en el –Hace una pausa al hablar– Se que fue un error, y que fuí una tonta ingenua lo sé. – Se dejaba llevar por sus sentimientos del momento. 




Parecía una pelea de novios pero ni Luna ni Taeyang lo notaran. Es como si siempre han estado unidos por un lazo invisible. 



– Esta bien Luna olvidemoslo, tengo que salir, te veo mas tarde, yo te llamaré –Se encamina a la puerta para salir.



No le gusta pelear ni discutir por lo que decide ponerle un alto de una vez. 






 – ¡E-Espera! – Aún cubierta con las sabanas se gira a verlo a sus espaldas– Abrígate bien esta muy frío afuera ¿No crees? – Tratando de ya no molestarlo con el mismo tema. 

– Estoy bien gracias... – Le sonríe muy leve y adopta un rostro serio disponiéndose a salir. 



Ella baja su mirada decepcionada de si misma. Todavía se sentía adolorida de su cabeza y caderas, cuando se percata que tiene puesto un dije de plata muy peculiar en su cuello, lo coge con sus dedos y lo examina con su mirada. 


– (¿Que es esto? ¿Cuando me lo puse? ¿O quien lo hizo?... Parece un sol y una luna, es lindo) – Algo extrañada aun así sonríe– (¿Habrá sido Seungri? ) –Ladea su cabeza y frunce el ceño dudosa. 




Aunque sabia que algo había sucedido con Seungri, prefirió no verlo ni hablar con él, pues sabe que ella sola se expuso, no tenia justificación  lo que la deprime y ahí sola en la habitación llora para desahogarse ¿Que había hecho?. No se quita el dije pues no le da gran importancia. 


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Al medio día Cat veía una película con Gdragon era coreana y romántica. En una hermosa sala del hotel que parecía un cine pero en lugar de tener muchas butacas había solo como seis sofás para dos personas muy cómodos y elegantes. El líder había rentado el lugar previamente solo para ellos dos, se sentía bastante enamorado y emocionado cuando pensaba en la boda. 


– Así te prefiero, sobrio y no ebrio –Comenta Cat tomada de su mano, se recarga en su hombro para sentirlo mas cerca.

– Lo sé, discúlpame baby no lo volveré a hacer. 



Cat sonríe complacida al escucharlo. Guardan silencio un momento poniéndole atención a la película y Gdragon no puede evitar hablar.


– Esa pareja me recuerda a Youngbae y a tu hermana, son muy tímidos. Me pregunto como irán a acabar. 

– ¿Quienes? – Lo mira aún en su hombro.

– Mi man y tu hermana, se que ellos se aman, yo estoy haciendo todo lo posible para ayudar a Youngbae es mi amigo, tengo que hacerlo, pero es tan lento –Ríe cubriendo su boca con el dorso de su mano– El siempre ha sido así. 


Cat piensa que quizá es tiempo de decirle a Gdragon como esta la situación con sus padres, por lo que se pone algo nerviosa y no dice más. El cree que se esta aburriendo y la abraza por sus hombros para acercarla mas a el besando su cabeza sonriendo. 


– Hoy cuando amanecí con resaca, la verdad no me importo como antes, por que te encontré dormida a mi lado, sabes, no me importa que te despiertes tarde, es mejor para mi, así puedo contemplarte y admirar tu belleza en esa forma tan pacifica que tienes al soñar, te acaricio el cabello y me pierdo en tu aroma, todo es felicidad -Emite una leve risa- Amo ese momento, también no puedo evitar imaginarte con tu vestido de novia, el tradicional blanco que reflejara tu pureza y seguramente resaltara tu belleza apagando a las demás chicas a tu alrededor, será hermoso ese día ¿No crees? –La mira con una encantadora sonrisa.


Justo como había estado esperando Gdragon ya ha sacado el tema de la boda, ahora es el momento por lo que Cat le dirige una seria mirada directamente a sus ojos.


– Ji, tengo que decirte algo

– Ah, adelante hermosa –Sonriendo le presta atención.

– No creo que sea fácil el casarnos 


– ¿De que hablas? –Sonríe creyendo que es una broma. 


– Aún soy muy joven, además tendría que hablar con mis padres, estoy segura que se enojarán y no aceptaran que conciba matrimonio contigo –Mira abajo decaída. 


– Hey, hey ¿Solo hay que hablar con ellos no es verdad? Estoy seguro que entenderán –La abraza y besa su mejilla con un beso sonado para después sonreír ampliamente– Tranquila baby... –Musita. 


– Ji ¿Por que tenemos que casarnos tan pronto? ¿Podría ser después de unos años cuando sea mayor? – Mirándolo de reojo. 


– No, yo quiero casarme lo más pronto posible, después ya no tendría sentido Cat Viéndola– Piénsalo será igual, los años que tengamos siendo novios para ese entonces, podrían ser los mismos pero en matrimonio, así valen más –Ríe– Vamos nena, será genial, una fiesta en grande –Toma su mano entre la suya y la besa sonriente. 


– No sé... –Suspira viendo abajo muy preocupada. 


– Mira, a mi no me importa nada, nos casaremos ya lo he decidido –Mira la pantalla al hablar– Ya he hablado con nuestro manager que sigue aquí en Nueva York, mañana mismo regresaremos a Corea por que quiero empezar con los preparativos. –Mira arriba como alucinado– ¡Tú vestido, será el mejor de todos los que hayan existido! Lo mandare a hacer con un gran diseñador no me importa cuanto cueste por que sera para ti y como mi futura esposa, tendrás que lucir esplendida con un vestido de novia moderno y único, sera increíble. –Le dedica su mirada junto con una sonrisa que deja ver sus dientes. 


– Oh, genial... –No muy animada sigue con su vista abajo preocupada.


– Cat... –Borra ese gesto y adopta un semblante serio y frío. 


– ¿Qué? –Lo mira. 


– Relájate y muestra una sonrisa por favor, sin ella no podre vivir, es lo mas importante para mi –Acaricia su mejilla con su mano viéndola directamente algo molesto. 


– Sí... –Se esfuerza en esbozar una sonrisa. 


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Horas más tarde el líder dragón ya había hablado con el maknae por el móvil  avisándole que su vuelo en regreso a Seul sale mañana a las siete de la tarde, para que este listo. Ahora solo le faltaba decirle a su amigo a quien prefirió ver en persona acompañado de Cat y el manager. Como era predecible Taeyang estaba con Luna y ya los esperaban para salir a almorzar todos juntos excepto Seungri a quien por supuesto no invitaron. Estando en un establecimiento donde disfrutaban comiendo una deliciosa hamburguesa con papas y refresco, ahí sentados en una mesa empezaron a hablar y Gdragon aprovecho para avisarle también a su amigo que mañana mismo ya vuelven a Corea, cuando repentinamente se escucha la tos de Taeyang quien cubre su boca al instante y no le da importancia. El desesperado líder sabe que lo puede usar a su favor todo para seguir con su plan de que su amigo este con Luna. 



– ¡Oh! ¡Youngbae! –Lo señala Gdragon y los demás lo miran atentos.


– ¿Que pasa man? –Pregunta el mencionado con sus ojos algo vidriosos e irritados, ya tenia rato que no había dejado de estornudar también- 


– ¡Estas enfermo! –Asegura con un rostro de fingido asombro. 


– No, claro que no –Ríe por lo bajo– Solo aclare mi garganta es todo. 


– Eso no es verdad –Sonriendo el líder– Claramente se escucho que era una tos seca, además no haz dejado de estornudar, estas resfriado – Mirándolo convencido.



La joven pelirroja se siente preocupada y observa a Taeyang a su lado. El manager solo comía siendo solo expectante. 

– ¿Ves Youngbae? Por eso te dije que te abrigaras mejor. –Comento y lleva una papa frita a sus labios. 

– Pero, no es nada grave –Dice Taeyang riendo un poco. 


– A ver... –Cat se acerca a Taeyang y toca su frente con su pequeña mano– ¡Ah! Esta caliente 




Gdragon sabe que tiene que ayudar a su amigo para que se acerque más a Luna, el que haya pescado un resfriado y tenga algo de temperatura podría ser un buen pretexto para que ella lo "cuide" y tenga que quedarse en Nueva York con ella y así pueda haber más contacto, pero sabe que no sería suficiente para que Taeyang decida quedarse, tenía que ser mas grave por lo que empieza a pensar ¿Que hacer?. 



– No es nada Cat es una temperatura normal –Habla el chico y coge en sus manos su hamburguesa- Estoy bien


– Olvídalo Youngbae no puedes viajar así... ¡Ah! Gdragon golpea con la palma de su mano la frente con fingida frustración– ¡No! Tendrás que quedarte un poco mas en Nueva York. Tú asistente tendrá que cuidar de ti... -Actúa como si fuese una desgracia. 


– ¿Eh? –Reacciona impresionada Luna. 



Cat y Taeyang solo miran a Gdragon muy serios sin notar la actuación y falsedad del líder. 


– ¿Que estas diciendo Jiyong? –Le cuestiona el representante– Solo debe ir a ver al medico, tomar el tratamiento que le recete y listo. 



El enloquecido líder se aproxima a la oreja del manager y masculla secretamente. 



– Usted solo sigame el juego ... 


– ¡Ah! Si Jiyong tiene razón Youngbae, no puedes viajar así. Lo siento, tendrás que quedarte hasta que te recuperes Voltea a ver a Gdragon y él le guiña un ojo con complicidad. 




Ahora si fueron mas que obvios, lo que hace reír en modo divertido a Taeyang en lo que Luna los mira sin comprender por que Gdragon exageraba en algo así. Cat algo confundida atrae a su novio a ella para hablarle cerca del oído.



– ¿Que estas haciendo? 


– Tranquila solo el y tu hermana se quedarán –Murmura y sonríe, pronunciando en un tono muy débil– Esto podría ayudarlos ah... Ya sabes 


– Oh... –Cat enarca una ceja impresionada de lo loco que es su novio. 


.


.


Saliendo del lugar Gdragon se aproxima con su refresco en mano a su gran amigo, nadie sabia por que traía con el ese envase. 



– Oye me gusta tu chaqueta ¿Puedo verla? –Sonriendo. 


– ¿Que? –Ríe entredientes– Claro –No se mueve y lo mira con una sonrisa.




Luna y Cat quienes estaban a sus lados solo los miran mientras que el manager se adelanta a la camioneta. 



– No, tienes que quitártela, así no puedo verla bien 


– ¿Estas loco? Hace frío no me la quitaré. 


– ¡Vamos quiero verla solo sera un momento! –Con una de sus manos trata de quitársela pero Taeyang no lo deja. 



Las hermanas hacen un gesto de extrañeza y los esperan. Gdragon consigue quitarle la chaqueta a su amigo y la observa retomando su andar a un paso lento siendo seguido por su novia y Taeyang y Luna. 


– ¡Oh es genial! ¡Me encanta el color negro y estos detalles del cuello! – Viéndola detalladamente mientras camina con una sonrisa.



Luna observa con preocupación a Taeyang pues solo portaba una camisa y no era suficiente para cubrirlo del frío, sabe que su resfriado podría empeorar y convertirse en algo peor. 



– ¡Ah! – Grita de repente el líder y simula tropezar con algo de una manera muy falsa y choca contra el cuerpo de Taeyang derramando su refresco en su camisa– ¡Oh! ¡ Perdón, perdón! ¡Fue un accidente! –Acerca sus labios a su  oreja– Es por tu bien Bro. 


– ¿Que hiciste? –Taeyang se había detenido y miraba la parte mojada de su camisa. 



Luna se exalta y acelera el paso para arrebatar la chaqueta a Gdragon de sus manos. 



– ¡¿Que diablos te pasa?! ¡¿Estas loco?! ¡¿Por que lo hiciste?! –Le grita enojada– ¡¿No ves que ya tiene un poco de temperatura?! ¡Puede enfermarse mas! ¡Creí que eras su amigo pero solo eres un loco! –Se acerca a Taeyang y cubre su pecho con su chaqueta algo avergonzada de como ha reaccionado– Vamos úsala... –Saca una toallita de su bolso y lo empieza a palpar con ella para secarlo un poco. 


– ¡Y tu quien eres para que me alces la voz! –Se enfurece el líder repentinamente dirigiéndole una afilada mirada a la chica que lo enfrento. 


– Hey man tranquilízate –Le dice Taeyang mientras introduce sus brazos en las mangas de su chaqueta y Luna sigue secándolo– No tienes por que enojarte, ya olvidemoslo y sigamos –Estornuda y cubre  su nariz. 



Aunque Luna hiciera un intento inútil por secarlo su ropa seguía húmeda y fría. 


– ¡Oye Ji ya vámonos! –Toma su mano Cat y se lo lleva.


– ¡Espera! –Exclama el líder observando a la pelirroja– ¡Tu no eres nadie! ¡Solo eres una pelirroja rara, pobre e inútil!  ¡No eres nada! –Con el entrecejo fruncido.




Cat se siente ofendida al ser su hermana. Taeyang también al ser el amor de su vida y el representante detiene sus pasos notando que iba hablando solo, alcanza a escuchar sus gritos volviendo su mirada a donde ellos. Luna detiene sus acciones y evita ver a Gdragon mirando el suelo. 



– Ji, no permitiré que le hables así a Luna, respétala por favor –La defiende Taeyang.


– ¡Si Ji ya cállate! ¡No seas idiota! –Agrega Cat y lo toma de la mano. 


– ¡¿Idiota?! –Se suelta de su agarre– ¡¿Crees que soy idiota?! 


– Sí, por que insultas sin saber el daño que ocasionas –Habla la rubia– Ella es mi hermana... 


– ¿Y yo que soy para ti? –Mirándola de reojo muy irritado.


– Oye man, no iniciemos una pelea por una tontería como esta –Trataba de calmar el asunto. 


– ¡Eres un desesperado! ¡Que no quiere esperarme! Siempre solo quieres hacer lo que tu quieres ¡¿Como crees que me siento?! –Con sus ojos cristalinos. 




Hay un momento de silencio cuando el manager llega a ellos preocupado por ver sus rostros tan serios y a Gdragon junto con su novia muy molestos mirándola fijamente parecía que se querían matar el uno al otro con la mirada. 



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