viernes, 23 de diciembre de 2011

Naruloid [La calidez de tu voz]

Capitulo-59                                                        -La calidez de tu voz-








La nieve no dejaba de caer, parecía que se estaba destrozando el cielo…

La camioneta de Itachi estaba medio cubierta de esa blanca nieve, él seguía revisando el motor, tratando de arreglarlo. Frunce ligeramente el ceño y asiente, al pensar que ya lo ha reparado, cierra esa parte de la camioneta y sube a ella, cerrando la puerta, introduce la llave e intenta encenderla… Pero solo produce un molesto ruido, y no se mueve, pero al menos consiguió que las luces se encendieran, la apaga y suelta un gran suspiro, sintiéndose agotado y frustrado ante su situación… Su camioneta no avanza, su amigo se había dejado llevar por sus impulsos y se fue solo a buscar a Aiko, quien hasta a él mismo le preocupaba…



-(¿Dónde estará Deidara?...) –Se pregunta en su mente y con un rostro serio, vuelve a tomar su celular, para llamar al rubio- (Vamos, contesta...) –Piensa con la bocina en su oído y logra escuchar el timbre del celular de Deidara muy cerca- (…) –El se sorprende y se deja guiar por el sonido, encontrando el móvil de su amigo a un lado, en el asiento del copiloto donde el iba- (¿Por qué lo dejo aquí? ¿Acaso no quiere que lo moleste?...) –Apaga su celular y vuelve a salir, creyendo que si hace un segundo intento, lograra solucionar el problema de su camioneta-

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Mientras tanto… Deidara se encontraba totalmente perplejo ante tan fuerte escena, Aiko parecía muerta…

Deja caer al suelo el abrigo de ella y también la linterna de mano, aún sin estar seguro si sigue con vida, apresura el paso para entrar al agua sin pensarlo mucho, solo sabe que tiene que sacarla de ahí… Poco a poco siente como va hundiéndose en el helado río, luchando con la corriente para poder acercarse a Aiko, quien no estaba muy lejos de la orilla y se mantenía contra esa roca. El rubio se comienza a sentir un poco nervioso y su corazón late más y más, un intenso sentimiento lo invade, no sabe muy bien que es, solo continua… Y aun viéndola en ese estado, habla temblando de frío…



-¡Aiko!... ¡Aiko! –Se aproximaba a ella- ¡¿Qué diablos haces aquí?!... ¡Aiko, respóndeme! Tch… -Sin poder evitarlo, empezaba a temblar incontrolablemente a causa del inmenso frio que congelaba su piel- A-Aiko… - Llega con ella y toca su mejilla, abriendo mucho sus ojos al notar que su piel estaba muy helada como el hielo- ¡Aiko! –La mira con desesperación y la toma en sus brazos, llevándola hacia la orilla- (¿Por qué no responde?... ¿Estará…? No…) –Piensa y la saca del río respirando agitadamente por el frío que siente su cuerpo, extiende el abrigo de Aiko sobre la nieve y ahí la recuesta, arrodillado cerca de ella, la observa sin saber que hacer para que abriera sus ojos o le respondiera-





Las blancas estrellas de nieve, seguían cayendo suavemente, parecían no tener fin…

El rubio se había empapado y se moría de frío pero lo que más le preocupaba era ver congelada a Aiko, quien mantenía un rostro tranquilo con sus ojos cerrados y labios entreabiertos, se acerca para pegar su oído sobre el pecho de ella, intentando escuchar su corazón, y se siente algo aliviado al percibir unos leves latidos, algo lentos…



-Aiko ¿Estas viva verdad?... –Cuestiona mirando su rostro y sus lagrimas salen de sus ojos, comenzando a llorar en silencio, extiende sus brazos para tomarla entre ellos, alzando su espalda del suelo repleto de nieve para abrazarla- Aiko… -Murmura mientras esas lagrimas descendían lentamente por sus mejillas, creyendo que la ha perdido, y eso que escucho fue solo su imaginación-



Trata de darle calor al abrazarla… Sosteniéndola en sus brazos la observa detenidamente, su lindo rostro tan apacible que parecía estar sumergida en un profundo sueño… Algunas lágrimas caen depositándose en las frías mejillas de Aiko…



-No… No quiero perderte… No a ti... Tú eres mi vida…-Pronunciaba en un tono entrecortado sin dejar de llorar silenciosamente- Aiko…





En ese momento a Deidara ya no le importa su orgullo ni mostrar su debilidad, no podía contener ese sentir, ni retener más ese amor que en este instante se desbordaba y estaba a flor de piel, al ver a su amada como si hubiese perdido la vida… Se arrepiente de ser tan duro, indiferente e introvertido con ella… En lo más profundo de su corazón, desea que Aiko abra sus ojos, que pueda verlos una vez más, esos hermosos orbes violetas llenos de inocencia, de los que se había enamorado, los mismos que lo habían cautivado la primera vez que la vio, para poder decirle cuanto la ama… No sabe si ella lo escucha o si haya sentido la tibieza de sus lágrimas que seguían depositándose en sus pálidas mejillas…



-Aiko… Por favor, dime algo… Lo que sea… -Aún temblaba por el frío y se le dificultaba el hablar con ese enorme sentimiento que lo controlaba-





Un repentino y oscuro pensamiento llega a su mente… Que quizá Aiko ya no esta con vida y el nunca pudo decirle esas dos simples palabras… Que para el, eran dos palabras muy pesadas, al ir cargadas de sentimientos los cuales estaba convencido eran puros, tan puros como la nieve que no se detenía y comenzaba a juntarse en su cabeza y hombros… Cierra sus parpados y posa delicadamente sus labios en la frente de ella, se aleja para mirar su cara jadeando levemente al no soportar tan intenso frío, su ropa estaba húmeda lo que lo congelaba cada vez mas, aun así intentaba darle calor a Aiko, aunque pareciera inútil… Sosteniéndola en sus brazos y pegándola en su pecho sin dejar de llorar… Después de unos segundos, la contempla observando aquellos copos de nieve que parecían adornar su oscuro cabello aún con esa serena faz, lucia como un ángel…



-Aiko… Yo… Yo… -Coloca su fría mano en la mejilla de ella acercando su rostro lentamente mientras articula difícilmente- Te… Te amo… -Casi susurrando, dejando chocar su aliento en sus labios cerrando sus parpados un momento para luego alejarse sin dejar de verla-



Una expresión afligida se apodera de su rostro al pensar que quizá esas palabras ella no las logró escuchar… Lo que le entristece más y dejándose llevar por sus sentimientos, la estrecha con sus brazos aferrándose a ella con un afecto especial.



El rubio había dejado el coraje que sentía hacia ella, por haber salido de casa y poner en peligro su vida, en este momento era llevado por sus más profundas emociones que se habían abierto ante la aparente muerte de Aiko…



Sentía que era en vano seguir hablándole, que ya era tarde para decirle eso, que no importaba cuanto tratara de darle calor, seguía fría y el seguía congelándose, pero algo en su interior no le permitía pensar en otra cosa que no fuera en ella ni tampoco abandonarla.



De pronto Deidara puede sentir como el cuerpo de Aiko hace un ligero movimiento… Ella recuperaba su conciencia al reaccionar por el sonido de su voz al hablarle…



-Dei… Deidara –Musita débilmente al abrir temblorosamente sus parpados-



-¡Aiko! –Exclama reaccionando muy sorprendido al escucharla, detiene sus lágrimas y la aleja tan solo para volver a ver esos ojos violetas, esos ojos que lo miraban y el semblante tranquilo y cansado de Aiko-… -La observa impaciente y alterado-



-Gracias… -Murmura bajando su mirada y se balancea frágilmente hacia él al perder el equilibrio-



-¡O-Oye!… -La sostiene abrazándola sonrojado, sintiendo una paz interior-



Aiko se encontraba en un estado muy delicado y débil, tan débil que ni siquiera tenia la fuerza de mantenerse erguida…



-Gracias… -Repite en ese mismo tono de voz-



-¿Por qué?... –Sin soltarla-



-Por salvarme… Otra vez –Cierra sus ojos trazándose una tenue sonrisa, colocando su cabeza contra su pecho- T-Tengo frío… -Tiembla apretando levemente sus parpados-



-Tú… Tú eres una tonta… -Ruborizado frunciendo el entrecejo, se estremecía tratando de soportar el clima que los envolvía- (Que alivio, esta hablando… ¿Habrá escuchado lo que dije?...)



-…



-Vamos… Debemos ir con Itachi, él estaba en su camioneta, seguramente nos esta esperando… -Dirige su mirada a los lejos notando la neblina en la oscura noche-



-… -Suspira-





Deidara no dejaba de abrazar a Aiko y aunque ambos estaban muy helados, la cercanía era muy cálida por el amor que sentían entre ellos…



El rubio de orbes azules le coloca a Aiko su abrigo sobre sus hombros y le enreda su bufanda en el cuello levemente, ya que eran las únicas prendas que no estaban mojadas y la carga en su espalda llevándose consigo la linterna para alumbrar su camino…



Vuelve a caminar lentamente, pues se sentía congelado y sus músculos entumecidos, pero el llevar a Aiko sobre su espalda, le proporcionaba algo de calor y al escuchar su ligera respiración cerca de su oído le da ánimos para continuar, caminando por entre los tantos arboles y terreno inestable de esa zona boscosa llena de nieve.

El no estaba muy seguro si tomo la dirección correcta para llegar con su amigo, pero no se rendiría y mucho menos sabiendo que Aiko seguía dando señales de vida, de esa vida, que era tan valiosa para él… En su interior se preguntaba una y otra vez ¿Si ella escucho su confesión amorosa?... Claro que no iba a preguntarle directamente, además para el, lo más importante ahora era llegar con Itachi para llevarla al hospital.

Mientras caminaba se impulsa y acelera el paso con su mirada derecha, tratando de recordar el camino, ya que le urge llegar para poder propinarle calor dentro de la camioneta a Aiko, en eso, no se fija cuando la tela de su pantalón se engancha en una de las ramas de las tantas plantas que los rodeaban y lo hace tropezar cayendo de frente, sintiendo como cae el peso de Aiko encima de él, rompiéndose la tela y rasgándose parte de la piel de su pierna por la caída.



-Tch… Maldición… -Masculla y se levanta lentamente, sin soltar en ningún momento a Aiko, volviendo a caminar, soportando el dolor en la zona dañada de su pierna, la cual sangraba, la herida fue algo profunda, pero le preocupaba más su “hermanita”- Aiko… ¿Estas bien? –Voltea su cabeza hacia un lado sin escuchar respuesta-





La pelinegra no se había hecho ni un solo rasguño, ya que Deidara había amortiguado su caída, ella parecía como dormida todo el tiempo, ni siquiera se percato de lo ocurrido.





-(Mientras siga respirando, no importa si no contesta…) –Piensa y sigue su andar-





Finalmente encuentra la camioneta de Itachi, sintiéndose afortunado por no perderse… Itachi al escuchar que unos pasos se acercan, gira su mirada hacia Deidara y hace un gesto de sorpresa al ver que llega junto con Aiko, con su ropa empapada de agua y con su dorado cabello notablemente cubierto de nieve… Notando la sangrante herida de su pierna…



-Deidara… ¿Estas bien?... –Cierra la parte de enfrente de la camioneta estando esta vez seguro de que la ha arreglado-



-… -Se aproxima mas y lo mira con seriedad- Sí…



-Pero, tu pierna… ¿Qué te paso? Estas sangrando mucho… -Mirando su pierna con preocupación-



-¡Estoy bien! Abre la camioneta, debo recostar a Aiko en el asiento de atrás…



-Sí… -Rápidamente abre la puerta ayudándole a acostar a la pelinegra en el asiento trasero, deteniéndose a verla un instante- ¿Qué fue lo que le paso?... –Se acerca y toca la frente de la chica- Vaya, esta muy fría y pálida…-Pasa sus manos palpando la ropa de Aiko- Y mojada… -Voltea a verlo- Tú también…



-No tenemos tiempo, Aiko necesita un doctor esta muy grave… -Abre la puerta del asiento del copiloto para subirse a la camioneta-



-Bien, entonces vámonos… Espero y esta vez no me falle…



-… ¿Qué? –Ya dentro de la camioneta lo observa antes de cerrar la puerta, molesto-



-Nada… -Pasa por enfrente de la camioneta para llegar al otro extremo y entrar en ella tomando el asiento del volante-



-…Rápido Itachi –Dice intranquilo-



-Espera… -Se quita su abrigo habilidosamente y se gira para alcanzar a Aiko y cubrir su cuerpo con este- (Pobre niña…) –Con un rostro serio, vuelve a su posición colocándose el cinturón de seguridad-



Resopla algo estresado, esperando que su camioneta funcione, y la enciende escuchando como el motor vuelve a trabajar como es debido…



-¡Genial lo conseguí! –Eleva el tono de voz algo contento por su logro sonriendo levemente y mueve la camioneta tomando una dirección para salir de ahí-

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En camino a casa…



-Deidara ¿Doctor?



-Sí y rápido Aiko necesita atención médica… -Mirando al frente con determinación-



-… -Suspira leve y entre cierra sus ojos- Deidara, parece que aún no entiendes nuestra situación… Debemos tomar temprano el vuelo o lo perderemos, sabes lo difícil que es para nosotros programar un vuelo y si seguimos aquí mañana es muy posible que la policía nos encuentre, y tú y yo, iremos a la cárcel… Piensa ¿Qué pasara con Aiko y Sasuke? Sin nosotros ellos estarán solos… Además por más que necesitemos llevarla a un hospital, no podemos



-¿Por qué? Nuestros rostros no son conocidos aún… -Lo mira-



-Sí, lo sé pero, no debemos tomar ese riesgo… La policía no conoce con exactitud nuestro rostro pero si conocen algunos rasgos físicos nuestros… ¿Y si nos ven sospechosos? No dudaran en interrogarnos y eso puede ser peligroso…



-Tch… -Muerde su labio inferior mirando por la ventana-



-Lo mejor será que volvamos a casa y esperemos que ella sola se recupere…



-¡No! –Voltea a verlo arrugando el ceño con enojo- ¡Yo se que Aiko esta muy grave! ¡¿Qué no la vez?! ¡Ni siquiera puede caminar, su pulso es muy bajo y, y no importa lo que hagas sigue pálida y fría! ¡Necesita un medico! ¡Ahora! ¡¿A casa?! ¡¿Ir a casa y esperar un milagro?! ¡¿Estas loco?!...



-Oye, relájate… -En un tono bajo lo mira de reojo unos segundos y vuelve su vista al frente-… Se que Aiko necesita atención medica, pero… No somos gente común, Deidara… Es imposible… Piénsalo. –Dice mientras conducía-



-… Ella, ella es lo mas importante para mí, aun mas que mi propia vida… Sin ella, ya no me importaría vivir, es mi motivo de vida… Y lo sabes –Lo mira de la misma manera-



-… Le llamare a Sasuke, espero y este despierto –Toma su celular-

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3 comentarios:

  1. jajaj pobre sasuke cada rato le hablan,laverdad si es muy tonta aiko pero bueno almenos ya la llevan a casa :3 espero el siguiente

    XD

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  2. Si que es tonta xD... Si pobre Sasuke pero asi aparece mas *-*... Y gracias por seguirme hermana xD... Ya pensare el siguiente... Y gracias a los que me lean D: olvide agradecerles n_n

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  3. ya los alkanse :3 muy kawaii espero el siguente :3

    Ate:Kata-San

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