Naruloid [Nunca soltare tu mano...]

Capitulo- 48.                                                     –Nunca soltare tu mano-

Unas semanas después…

Ya había entrado el otoño… Y en el colegio Konoha había terminado un ciclo escolar más… Aunque aun les faltaba el ultimo año, para su graduación…

Eran vacaciones… Las hojas de los arboles caían lentamente, apilándose en el suelo de las calles… Y en una banqueta, donde se podían ver muchos arboles a lo largo de la misma… En una banca, estaba el niño rubio ojiazul, enviándole mensajes de texto a Arika… Eran buenos amigos, y como ya no se verían en la escuela, no quería perder contacto, ni con ella, ni con ninguno de sus otros amigos…

Naruto escribe en uno de los mensajes: “Extraño a Aiko, ojala y pronto se recupere… ¡Debemos ir todos juntos a comer ramen!”… Con una sonrisa imborrable en su rostro, a pesar de los problemas que tenia con su novia Sakura por sus celos hacia Arika y aun sabiendo el estado tan delicado y peligroso de Aiko… El no perdía el optimismo y el ánimo que lo caracterizaban…

Aunque, aun no podía olvidar lo que los agentes de Arika le habían dicho aquella vez…

-¡Aléjese jovencito! –Dice el agente 1-

-¡No puede salir con la señorita Arika! –Exclama el agente 2-

-Sí ella ya esta comprometida… -Comenta el agente 1 y lo sueltan-

Desde ese entonces, no se ha atrevido a preguntarle si es verdad, aunque quiera hacerlo… Por simple miedo, a que la castaña se enfade de nuevo con él… Naruto era muy valiente, fuerte y optimista, pero cuando se trata de chicas…

Aun así, no puede soportar ya sus ansias por saber, esa curiosidad  lo mata… Así que se atreve al fin a preguntarle, en otro mensaje…

“Oye… Arika-chan… ¿Es cierto que, estas comprometida? “ –Envía el mensaje esperando con ansias la respuesta-

Pero esta nunca llego, se tardo más de lo normal… Pasan minutos y nada, decide mejor irse a casa… Pensando que nuevamente se enojo con él… Solo suspira algo triste…

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Deidara se encontraba cerca de un río, que visitó, solo para recordar cuando conoció a Aiko y la salvo… siendo un adolecente, que no sabia ni lo que hacia…

Solo sonríe cerrando sus ojos con tranquilidad, respirando llenando de aire puro sus pulmones, y se inclina para tomar una pequeña piedra, y lanzarla al río… Aunque le doliera, tenia que seguir esperando a que su pequeña hermana se recupere… Pero por dentro, se sentía feliz, al saber la noticia que le dieron los doctores apenas días atrás… “Que Aiko esta recuperándose”… Esa noticia sin lugar a dudas, resulto alentadora para el rubio… Quien sin Aiko se siente desdichado, nostálgico y muy triste… Nunca creyó que esa “Tonta niña” le llegara a provocar esa clase de sentimientos… Pero ahora solo le da risa… Ya no se siente tan mal…

El clima es algo frío, así que introduce sus manos en los bolsillos de la chaqueta que vestía… Da media vuelta y se dispone a caminar, hacia su camioneta, mientras reflexiona.

-(Aiko pronto se pondrá bien… Según los doctores, así que… La tendré nuevamente conmigo… Por ahora sigo viviendo con Hidan pero… Conociendo a Aiko, no creo que le agrade la idea de vivir ahora con él… Ella le ha tomado cierto aprecio a Itachi y Sasuke… Sí le digo lo que pienso ahora de Itachi… Se pondrá triste… ¿Cómo no lo pensé antes?... Es cierto, Aiko así es… Se pondrá a llorar, y odio que haga eso… Si la fuerzo a quedarse conmigo y hidan, quizá ya no vuelva a verla sonreír como lo hacia antes… Eso seria horrible… Además… Itachi, después de todo…) –Muerde su labio inferior frunciendo el ceño al llegar a su camioneta, se detiene apunto de abrir la puerta- … (Itachi, realmente parece arrepentido… ¿Cómo, como pude ser tan duro con él?... El no es así… Es raro que se disculpe por algo… Eso quiere decir que… Quizá si esta realmente arrepentido… Y sus últimas palabras que me dijo….)

-… -Se acomoda el cuello de la camisa negra, serio-… Bueno, cuando lo pienses bien… Puedes volver a mi casa, y ahí te esperare… Amigo… -Da media vuelta y se retira-

-(El me sigue considerando amigo… Y… Como me conoce más que cualquier otra persona en el mundo, sabía que lo pensaría bien después del ataque de ira… Y… Pensaría, justo en lo que estoy pensando ahora… Perdonarlo…) –Se traza una tenue sonrisa en sus labios y sube a su camioneta, dirigiéndose a casa de Itachi, decidido, aunque algo nervioso-

Estaba claro, quería perdonarlo, por que, a pesar de todo lo que le hizo pasar, a él y a Aiko… El seguía siendo su amigo, y esta era la primera vez que le pedía perdón por algo, el pelinegro siempre le ha dado su apoyo, desde que Deidara era tan solo un niño, su amigo Itachi siempre lo ha cuidado, y ha estado a su lado, como una figura de “Hermano mayor”… Pero, aun así, siente algo de nervios, ya que, tal vez, Itachi en estas últimas semanas, ha cambiado su modo de pensar, y ya no quiere verlo, o quizá, ya no le importe su “perdón”…

Algo inseguro, baja de su camioneta en plena luz del día… Toca la puerta con fuerza, y esta de rato se abre lentamente, él solo traga saliva, aun intranquilo…

-¿Deidara?... –Cuestiona algo sorprendido Sasuke al verlo-

-Hola, Sasuke… -Serio- ¿Qué tal las vacaciones?... –Sonríe de lado-

-Ve al grano… -Frunce el ceño-

-…Quiero ver a Itachi

-Ah… Justo acaba de llegar… Entra… -Le abre el paso con seriedad-

-… -Se adentra a esa casa que ya no había visto en semanas solo mirando unos segundos su alrededor, le vienen a su cabeza algunos recuerdos-

-¡ITACHI DEIDARA ESTA AQUÍ! –Grita Sasuke por las escaleras y se va dejando a Deidara solo-

-… -Frunce el entrecejo mirando hacia las escaleras esperando a Itachi, permaneciendo en pie-

No sabe como vaya a reaccionar su “amigo” después de la última discusión que tuvieron… Su corazón se acelera a un ritmo descontrolado, ya que sabia de lo que era capaz Itachi… Si no estaba de humor, y esta enojado con él, es capaz de matarlo fácilmente…

Logra ver como Itachi baja lentamente de las escaleras, con unos pantalones cómodos negros y una camisa sin mangas del mismo color, peinado como siempre…  Su mirada carmesí delataba cansancio… Se aproxima hacia él.

-Deidara… ¿Qué haces aquí? –Murmura mirándolo fijamente estando frente a él-

-… -Reaccionando impulsivamente lo abraza de repente, algo sonrojado y sorprendido de él mismo-

Fue algo muy extraño para él, ya que a la única que había abrazado así era a Aiko en una ocasión, a parte Itachi era un chico al igual que él, y eso se le hacia aun más raro…

El rubio tan solo queda tieso ante su acto, ligeramente sonrojado por la vergüenza que sentía pero frunciendo leve el ceño… Itachi no le corresponde, simplemente se deja abrazar, y cierra sus parpados, en su interior disfruta de ese primer “Abrazo amistoso” de Deidara… Quien lo estrecha con sus brazos…

-I-Itachi… -Hacia un esfuerzo para hablar-… No se, si aun sigues pensando en lo sucedido… hace semanas… Y-Yo… Lo he pen-pensado bien… Y creo… Que… Quiero perdonarte… -Cierra sus parpados frunciendo el ceño, sin soltarlo-

-…Ah, era eso –Se traza una ligera sonrisa en sus labios- Gracias, Deidara… No, debería decir… Amigo… Sabia que lo harías, te conozco bien –Medio abre sus parpados, apunto de corresponderle-

-Y… -Lo deja de abrazar dedicándole una directa mirada- Yo creí conocerte, pero no… No fue así –serio-

-… Deidara, quiero que sepas que ni yo he terminado de conocerme… El amor, fue un sentimiento muy fuerte, y nuevo para mí… No supe controlarlo… Durante toda mi vida… Solo sabía llevar odio, venganza, y satisfacción propia… Pero Aiko… -Vuelve a su seriedad común, desviando un poco su mirada-

-… -Ríe divertido-

-… ¿Qué sucede? –Lo mira confundido creyendo que se trata de alguna broma o algo así, pero dudoso-

-No, nada… -Sonriendo- Solo se me hace gracioso, pensar que casi pierdo a mi mejor amigo… Por una niña… Que amo con todo el corazón… Yo los valoro a ambos… Y quiero tenerlos a los dos… Conmigo… -Frunce el ceño borrando su sonrisa- ¡Joder no se porque digo estas cosas! ¡Pero me nacen decirlas! –Alza un poco su puño-

-Sí, si… Lo sé, tu tranquilo… Te entiendo muy bien… Entonces es cierto eso de que… “El amor te cambia”

-No, no en lo absoluto… Solo un poco…

-También es cierto que nunca soltare tu mano… Deidara… Sabes, que siempre contaras conmigo… Para lo que sea… -Asiente leve con su cabeza, extendiendo su brazo hacia él para que tome su mano -

-… -Sonríe y toma su mano dándole un apretón-

-Y no agradezcas… Creo que ya ha sido demasiada sensibilidad por hoy… -Se aleja acercándose al sofá y se sienta cómodamente- ¿Cómo sigue Aiko?

-Esta recuperándose… Poco a poco. –Permanece en pie-

-Ah… Me alegra escuchar eso… -Serio mira al suelo- ¿Seguirás viviendo con Hidan?

-¡¿Qué?! ¡Claro que no!... ¡Es horrible vivir con él! ¡Cada fin de semana tienen reuniones y se ponen ebrios, gritan, hacen escándalo, cantan, de todo! Y lo peor, es que siempre quieren que me les una… Así que… Supongo que tendré que rentar algún departamento… –Ligeramente sonrojado desvía su mirada frunciendo el entrecejo-

-¿De que hablas?... Sabes que esta es tu casa… -Cruza sus brazos- Cuando Aiko se recupere completamente, podemos ir a celebrar todo esto a algún lado… Los cuatro juntos ¿Qué dices? –Lo observa-

-Suena bien… -Sonríe-

Deidara se sentía profundamente agradecido con Itachi, y deseaba muy dentro de él, que su “hermanita” se recupere y se sienta de nuevo bien… No sabe cuando esto suceda, pero tiene una esperanza muy marcada en él, que no piensa abandonar por ningún motivo.

Hay un breve momento de silencio algo incomodo, y la voz de Deidara lo rompe.

-Es raro que Karura ya no me moleste, como solía hacerlo… Ya aprendió la lección… -Sonríe frunciendo el ceño-

-Sí, seguro eso es… -Se traza una tenue sonrisa llena de malicia-

-... (De hecho es demasiado raro, que no haya aparecido, en busca mía, en semanas…. No es que me importe, solo… Es inusual.)-Piensa a sus adentros-

-… -Ríe un poco- Deidara, no quería decirte pero… Mate a tu novia.

-… Ah si, que bien… -Sonando despreocupado- Ya me había hartado con sus estupideces… Gracias amigo

-Lo sé… -Saca un cigarrillo encendiéndolo para llevarlo a su boca-

Después de todo ambos tenían pensamiento de asesinos o criminales, algo insensibles, siempre han sido así, solo que la dulzura de Aiko, los ha cambiado, volviéndolos, mas sensibles y amables…

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